Se me ocurrió intentar escalarlo, teniendo esperanza de que los pocos huecos que tenía la pared me sirvieran. Me arme de valor y de fuerza, pero no tardé más de tres minutos en caerme al perder el equilibrio. Por suerte, no caí de muchos metros de altura y, aunque cuando toqué tierra me di en la cabeza, solo caí inconsciente durante un corto periodo de tiempo.
Cuando me desperté y abrí los ojos sentí un dolor intenso en la boca. Miré a mi alrededor y lo primero que me encontré fue la muñeca que anteriormente la había dado una patada incrustada en mi mano
Tenía una sonrisa malévola y sostenía una tercera letra impresa: una D. Me la guardé en el bolsillo e intenté quitármela, pero parecía ser que se intercambio por mi mano.Quise gritar y pedir ayuda, pero algo me lo impedía. Llevé la mano a la boca y me asusté al palpar unos hilos que cosían mi boca. Me levanté de un salto y me vi la ropa. Era una bata larga y blanca con manchas de sangre. No era la ropa que yo llevaba hasta hace un momento. En ese momento, pasó por mi cabeza un recuerdo claro. Pero desde otro punto de vista.
ESTÁS LEYENDO
EL NIÑO DE LA BOCA COSIDA
TerrorUn niño amante del terror entra en un video y su vida da un giro de 360°. "Oigo como alguien sube las escaleras"