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Se encontraban grabando un capítulo más para "Run BTS", esta vez les había tocado ir a un campo de flores y por sugerencia de SeokJin todos llevaban overoles de distintos tonos.
El reto de hoy había sido seleccionar correctamente las flores que venían escritas en unos papeles que tomaron, ¿Cómo iban a saber ellos de flores?
SeokJin solamente se dedicaba a tomar las flores que a sus ojos eran las más bonitas, estaba maravillado por tan raras formas y colores. Pegaba saltitos para tratar de alcanzarlas, sus ojos desapareciendo cada que sonreía tiernamente y susurraba cosas a la cámara.
—Debería preocuparme por ganar el reto pero prefiero agarrar un par de flores para YoonGi-ah, de todas formas JungKook siempre gana en todo.—
Cuando el tiempo finalizó, corrió para encontrase con sus amigos, tomó asiento junto a YoonGi quién había comenzado a comer antes que los demás, el staff seguía mencionando las reglas del nuevo desafío que harían mientras les pasaban una canasta con sodasy bocadillos que les habían llevado.
Un bote con papeles se puso en el centro y todos se fueron encima de este para sacar el nombre de a quién le harían la corona, él sólo esperaba que se tratara de YoonGi. Tomó el último papel tratando de ocultar su mueca de desilusión al ver el nombre, "HoSeok", no es que no tuviera ganas de hacer algo lindo para sus compañeros pero las flores habían sido seleccionadas especialmente para la persona que era dueña de cada uno de sus suspiros.
Comiendo de un pequeño pastelito de fresa, apartó las flores de tonos rosa pastel y se entretuvo en hacer dos distintas coronas, una estaba llena de colores vivos perfecta para los destellos de alegría que emanaba HoSeok y otra era tan delicada con sus tonos pastel.
El tiempo había finalizado, guardó la segunda corona en su canasta y se dedicó a divertirse durante las grabaciones, todos eran amigos ahí, más que eso, una familia, pero NamJoon era su alma gemela y de eso no tenía dudas así que cuando supo que él recibiría la corona de su amigo chilló de emoción y agachó su cabeza como si de una coronación real se tratara.
—YoonGi-cchi, ¿Me veo bonito?—
"Pareces un príncipe, Jin" había recibido de respuesta por parte de YoonGi, sus mejillas sonrojadas seguro dieron mucho de que hablar entre los fanáticos. El resto del día fue muy cálido, los castigos fueron dados y para su suerte había logrado quedar en cuarto lugar, NamJoon había sido el ganador esta vez.
Los chicos exhaustos llegaron directo a dormir, omitiendo la cena y las duchas, estaba seguro que ese era su momento. Revisó su canasta, un puchero adueñándose de su rostro al ver que las flores que tanto había cuidado comenzaban a apagarse, entrecerró sus ojos buscando alguna solución rápida, se lanzó sobre una botella de agua y mojó con sus dedos los pétalos de las flores que adornaban la corona.
Entró a la cocina tímidamente, YoonGi no dormiría sin haber comido algo antes, sonrió un poco y se sentó frente a él, una mesa separandolos. Deslizó la corona por la mesa hasta dejarla cerca de las manos llenas de uvas de su compañero.
—Especialmente hecha para ti, YoonGi-cchi. El rosa te queda muy lindo, mejor que el negro.—
El menor se había sonrojado, llevaba la corona hacia su cabeza y la acomodaba, hizo un par de tiernas poses para el mayor quién estaba encantado con aquél aegyo.
"Yo no tengo nada para ti, Jin Hyung. Esto es muy lindo de tu parte."
—Lo sé Yoonie, yo...—
Se quedó callado cuando una uva se adentró a su boca, masticó mientras veía al menor entretenido uniendo racimos de uvas siguiendo el proceso que nos mostraron para hacer una corona, era algo complicado. Soltó una carcajada al ver el resultado y negó sonriente con su cabeza. Una corona de uvas, YoonGi le había hecho una corona de uvas y ahora mismo se la estaba poniendo en la cabeza, tan cerca de su rostro que si tan sólo se estirara un poquito probaría aquellos labios que siempre había observado pero no podía arriesgarse a hacer algo tan estúpido.
—Que creativo eres YoonGi-cchi.—
Pasó una mano por su cabello pero fue detenido cuando sintió unos dulcez labios tocar apenas los suyos, su cuerpo de gelatina se había convertido el roble más duro en estos momentos. Escuchó a YoonGi murmurar disculpas mientras se apartaba y se golpeó mentalmente al quedarse sólo en la cocina. Después de un par de suspiros y pensamientos revueltos más sentimientos desprendiendo de cada parte de su cuerpo, se tomó una foto con la corona de uvas y se fue directo a dormir, mañana sería un largo día. Aparte de que tendrían que volver al campo para grabar una parte más que era importante para ayudar a crear conciencia entre sus seguidores, aunque tal vez para él se convertiría en un pacto de amor.
Y ahí se encontraban todos, comenzando a excavar un poco de tierra para plantar algunas semillas de la flor que más les hubiera gustado. Se sorprendió cuando YoonGi eligió el flor de cerezo, el mismo que había puesto en la corona de flores, pero se sorprendió más al escuchar la respuesta de la elección de la flor.
"Creo que representa mucho el amor puro, además es rosa y adoro el rosa. A SeokJinnie también le gusta mucho la flor, ¿No es así?"
Asintió un poco aturdido, no sabía como serían las cosas después de eso, pero luego de que YoonGi se acercara para sembrar sus semillas junto a las de él supo que su vida sería diferente apartir de aquel puro pacto de amor. Su nueva relación se mantendría tan fuerte como seguro crecería aquel árbol, no necesitaban palabras cuando sus miradas lo decían todo, desde ese entonces las uvas se volvieron la fruta preferida de ambos y las flores de cerezo los mejores regalos que podían darse.
