Hisashi había vuelto a casa, y al entrar Inko estaba con sus dos hijos y unas maletas y esta al ver a hisashi el miedo inundo su ser, Hisashi la miro con seriedad y se le acerco y al estar cerca de ella, le susurro algo que hiso que Inko abriera los ojos de golpe y se tapara al boca aterrorizada, después de eso Hisashi miro a sus dos gemelos y les sonrió de forma cariñosa y les dijo.
Hisashi: Ustedes dos serán grandes héroes, yo los ayudare a que lo sean.
Fueron las palabras de aquel hombre mientras, después de aquello paso una semana y para justificar la desaparición de izuku, lo dieron por secuestrado y como hisashi era un heroe y trabajo con la policía en varias ocasiones, sabia como era su modus operandi, con lo cual supo como ocultar toda evidencia además de que Inko se quedo callada mas que nada por el bien de sus dos hijos, pero dentro de ella había un gran vacío, el cual tendría que vivir y soportar ya que debía ser fuerte por Kiji y Yaomi, además de asegurarse de que Hisashi no los convierta en horribles personas.
Mientras tanto con izuku, empezaba a despertar lo primero que sus ojos vieron fue un techo de madera, su cabeza miro a los lados viendo una pared a su izquierda y a su derecha, una mesa de madera con una cilla y una ventana, y al frente una puerta cerrada, se reincorporo lentamente y a la vez que lo hacía sentía algo de dolor en sus costillas, ya sentado en lo que al parecer era una cama izuku recordó con un ligero dolor de cabeza lo ocurrido, y en eso lentamente y con sus manos temblando estas se acercaron a sus labios, y al sentir sus mejillas sus ojos se abrieron con horro y las lagrimas empezaban a surgir de sus ojos, el niño lloraba a mares en silencio, pero este fue interrumpido por un hombre de avanzada edad y cabello largo con lentes, y que tenia una barba algo peculiar ambos se miraron, la mirada de alegría de el hombre al ver que el niño despertó se convirtió en una de preocupación al ver, aquella mirada llena de tristeza aquel niño no sabia quien era el anciano solo sabia que seguramente el lo salvo, y sus ojos le preguntaba el ¿porqué le paso eso a el?, ¿ porque tenia que ser el?, ¿Qué hiso mal para que esto le ocurriera? El hombre simple mente se puso a la altura del niño y lo abrazo gentilmente, el infante pecoso abraso al señor aferrándose a el mientras sus lagrimas no paraban de salir.
Y en lamente de aquel anciano prevaleciera pregunta que se hacía desde que encontró al niño, ¿ que clase de monstruo le aria tal cosa a un niño?, y ahí estuvo al menos 20 minutos en donde aquel niño estuvo llorando hasta volver a quedar dormido, el anciano lo vio lo acomodo bien para que durmiera cómodamente, salió del cuarto y de la cabaña y estando afuera de esta prendió un cigarrillo y lo fumo entero de una ves, solo para después liberar aquel humo y aplastar el cigarrillo con sus manos y botarlo en una papelera dentro de su casa, después de aquello al día siguiente el niño volvió a despertar pero ahora su mirada era diferente, era una mirada bacía la mirada de alguien que estaba roto por dentro. Repentinamente su mirada se dirigió a aquel mismo hombre el cual se sentó en la cama y le dio una plato con comida.
???: Ten come aun que sea un poco, necesitas recuperar fuerzas
Poso el plato en las piernas del niño el cual, miro la comida un rato y luego tomo la cuchara de madera y dio un pequeño bocado, el masticar era lento cada masticada se sentía como una punzada, al final solo comió 4 cucharadas.
???: ¿Te duele cuando masticas?
Izuku: *asiente*
???: Tendré que hacerte la comida licuada, hasta que puedas comer sólidos sin que te duela, dame un momento.
El viejo tomo el plato y estaba por irse, pero fue detenido por el niño el cual sujeto la manga de su camisa, el anciano lo miro pero solo expreso una sonrisa y le acaricio la cabeza.
???: Esta bien tranquilo estas a salvo nadie te ara daño.
El peli verde miro al anciano y esa sonrisa sincera, aun que con temor aun decidió confiar en el y lo dejo ir, pasaron al menos 5 minutos desde que se fue, y volvió con una baso con la comida licuada.