Epílogo

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Denle muchas gracias a @Dreams_Sam ❤️

Por si no me siguen aún, vayan a hacerlo jeje 🙊 para que les llegue la notificaciones de cuando publique las nuevas adaptaciones y mis nuevos fanfics. Sigan dándole amor a Joong eres un idiota, a chica por accidente y I'm an alpha 💕

Y sí, este es el fin. Muchas gracias por apoyar está historia aunque todo se debe a Dreams_Sam.

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Con muchísimo cuidado y preocupándose de no llegar a lastimar el sedoso cabello negro entre sus manos, ató una liga de color rosa en un punto alto de la cabeza de la adolescente. Dejó suelto su flequillo y, antes de soltar el cabello con exquisito aroma, depositó un tierno besito en la coronilla ajena.

Nine esbozó una amplia sonrisa y puso sus manos en sus caderas, dando por terminado el último detalle que hacía falta para comenzar ése precioso día.

Frente al espejo, Malai sonrió de la misma forma que su progenitor, dejando a la vista su hermosa sonrisa. Herencia de su papá Joong. 

— Estamos listos — habló el adulto a su primogénita.

La adolescente asintió y se puso de pie. Se giró sobre sus talones y pasó sus brazos por la delgada cintura de su papá Nine, apretándolo en un cálido abrazo. 

Tenía la mirada más linda que Nine ha visto en su vida, llenos de energía y alegría, capaz de transmitir tranquilidad. Su adoración. Perfecta ante sus ojos. 

Y aprovechando que estaba convertida en una bella señorita, necesitaban celebrar su cumpleaños como nunca.

— ¿Vamos? — preguntó la chica, a lo que su papá asintió. 

Salieron de casa y sintieron los intensos rayos del sol calando en su piel, sin embargo era un día maravilloso, un día para festejar y disfrutar, de modo que nada sería un impedimento para pasear por las lindas calles de la ciudad. 

Nine manejó en todo momento con una felicidad invadiendo su cuerpo, con una sonrisa imposible de borrar de sus gruesos labios. A su lado, Malai cantaba a todo pulmón las canciones transmitidas en la radio, de vez en cuando realizando alguna actuación, todo según el tipo de melodía. Incluso él se unió y cantó desde el corazón.

El centro comercial fue recorrido sin olvidar un solo rincón. Compraron ropa bellísima, tomaron helados grandes, buscaron maquillaje para la adolescente (sólo unos cuantos, Nine no quería arruinar el lindo cutis de su hija) y comida para llevar a casa.

Además, aprovechando el caluroso día, decidieron pasar un momento en la playa. En realidad no estaba en sus planes, estaban demasiado guapos para la ocasión, pero eso no importó y acabaron bañándose y salpicándose agua.

¿Qué importó que el maquillaje de Malai se estropeara?

¿Qué importa que Nine haya arruinado su ropa nueva?

La sonrisa de su primogénita lo valía todo. La amaba tanto. Siempre la ha amado. 

Siempre la amaría...

Un mareo detuvo el entretenido juego en el mar, repentinamente Nine sentía una sensación incómoda en su pecho.

— Papi... ¿Estás bien? — el semblante de Malai cambió radicalmente.

Se notaba a leguas su preocupación. Se acercó rápidamente y tomó el rostro de su papá entre sus manos. 

Nine asintió. Ya no estaba mareado, pero aún sentía ése sentimiento extraño en su pecho. Una sensación de vacío. Pero no quería arruinar el cumpleaños de su niña, así que formó una amplia sonrisa y besó la frente ajena. 

Como una estrella. || Joongnine - MpregDonde viven las historias. Descúbrelo ahora