Camille

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Se escucha un golpe seco aturdir la cocina. El chico ya mayor de 21 con un poco de distracción decidió prestar atención a lo que causo que su rutina matutina fuese como la de todas las mañanas.

su hermana. aquella pequeña no pasaba de los 16 y ya se creía la reina del mundo... Castaña, cara perfilada, cabello largo y con un corte extraño, era baja para su edad pero bien desarropada si de su cuerpo vamos a hablar, era de un buen pensar y de sano actuar... Aunque sus dientes le delataban la adicción a la nicotina que ella juraba algún día dejar.
-Uno más- dijo ella con algo de sorna- ya van más de 2 asesinatos en esta semana matt.
-Cam no le prestes atención a eso- dijo despreocupado.
- la primera fue encontrada con la boca cosida en un columpio del parque y con una herida que decía
"MENTIRA" en su piel...- continuo ella sin Prestar atención a lo que decía su hermano mayor- la segunda fue hallada atada por la cintura a un árbol y sin ambas muñecas, en su abdomen llevaba un cartel con la palabra "ENVIDIA" en el y ahora está....
- que fue esta vez?
- la encontraron calva y en una extraña poción, le colocaron nombre propio y todo... La muñeca de la muerte - dijo ella algo burlona- debido a que al encontrarla así estaba y en su frente lleva copiado "VANIDAD" en una caligrafía algo aniñada, tenía un corazón en la i.
- y esto te incumbe por..?- pregunto el algo confundido.
-querido matt, sólo puedo decirte que a tu pequeña hermanita sólo le interesa saber como van las cosas en el pequeño lugar en donde ella vive.
- mejor preocúpate por que hoy no llegues tarde princesita de lo macabro.
- amo cuando me llamas así hermanito!
- vete ya- finalizo este y le entrego dinero par que pudiera comprar algo de comida por el camino.
Ella cogió su bicicleta estilo antiguo y agradeció mentalmente el no colocarse esos shorts cortos; con el frío que hacia esa mañana ella juraba poder hacer paletas al aire libre.
Paso rápido por una cafetería y luego salió disparada hacia su instituto. Al llegar aseguro a su nena (como ella la llamaba) y con 5 minutos exactos para serrar puertas entro, con un panecillo en mano y su mochila en el otro.
Al encontrar su aula luego de analizar los puestos y la posibilidad de que le fuera bien en esa clase decidió hacerse en la hilera que estaba junto al pasillo y de fondo un campus en donde se corrompía La Paz para crear deportistas decididos a un triunfar sin importar que.
Se acomodó sus jean ajustados y decidió por fin sacar su libreta con datos de los asesinatos que habían comenzado esta semana... Para ella era claro que la frecuencia del asesino era nula, no daba tiempo de saber que aria ni a quien atacaría. Sus motivos, inciertos pero aún así están esos carteles con lo que parecen acusaciones algo pecaminosas. Por alguna razón se le vino a la cabeza que las muertes eran por clasificación de pecados y aún en su locura se le ocurrió pensar cual era su pecado... Derivando en la línea de los pensamientos recordó que sólo le quedaba un cigarro y que debía de comprar una caja de ellos para así no tener un ataque de ansiedad.
De su bolsillo saco una goma de mascar sabor a menta y mientras lo masticaba copio aquello que descubrió hoy.
La clase comenzó, era química, la chica prefería mil veces las matemáticas solas, pero odiaba la química y se resignaba a que nunca la entendería.

Pasaron las horas y el tiempo de estudio requerido caduco por el día de hoy. Decidió dar un paseo antes de ir a su cuarto a analizar cosas sobre el homicida, dormir, comer y que así pase todo su día, igual al de ayer y seguramente igual al de mañana.
Su padre llegaría dentro de 1 semana y ella se estaba quedando con su hermano mayor el cual la cuidaría y se encargaría de ella por ese corto tiempo... Después de todo le pagarían y así pasaban "tiempo de hermanos" si a eso nos referimos a el en lo suyo y ella en lo de ella entonces estamos en lo correcto.

Cogió a su nena e inició su paseo por las calles sin tener rumbo alguno, luego de un par de horas pasó por una tienda pequeña y compro su caja de cigarros para así sacar uno de su lugar, metérselo a la boca y luego encenderlo con un cerillo.... Dio dos vueltas más por la ciudad y luego fue hacia su casa para seguir investigando sobre esos extraños pero cautivadores asesinatos.
Camille era peculiar, a ella le interesaba mi trabajo...

Juegos de sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora