T R E B O L

♣Ambos Estamos Locos♟

Todo lo que hice durante estás semanas fue buscarla, intenté contactarme con ella pero su teléfono estaba fuera de línea, revise entre sus cosas ningún indicio, pense en Leonora pero no sabía dónde diablos se escondía, y por mi cabeza rondo la idea de su familia pero desapareció enseguida, el último lugar a dónde ella iría sería a ese, quizá esté con Reimond y todo esto de verdad sea el final.

Que divertido.

Hablo de final cuando ni siquiera hubo un comienzo, al menos no está muerta, me dije.

Pero joder, quiero que esté conmigo, de verdad.

Fue cuestión de días, solo días para caer ante ella, ¿Quien rayos cae perdidamente enamorado en días?

Yo.

No sé que fue.

Su constante bipolaridad.

Su horroroso estilo de la moda a lo cruela de vil.

Su cabello con orzuela.

Sus ojos enormes como los de una rana.

O sus labios como las de esas muñecas que solía tener Jennie de niña, bretz, bratz, britz, creo se llamaban.

Su caminar elegante y aburrido.

Su asqueroso fleco.

Su voz, no era sensual como la de Jennie, ni amigable como la de Rose, era frío, como si una oleada en invierno te recorriera al escucharla pronunciar palabras.

Y si hablamos de su esquizofrénia...

¿Que fue?

Quizá su forma de sonreír... No eran constantes sus sonrisas pero cuando lo hacía era como entrar al paraíso, era como ver a un demonio transformarse en angel.

O su figura, era sexy aunque lo ocultaba un montón de ropa, reiteró, horrible.

La forma en la que me miró al tocar ese lunar, como lo hacía mi madre, ella solía decirme que era mi interruptor para dormir y yo fingía hacerlo y cuando ella lo hizo mil recuerdos volvieron a mi mente.

Cómo me escuchaba y su confianza hacia mi.

Sus consejos.

Pareciera que la conozco desde años, pareciera que no fue hace menos de un mes que comenzó toda esta locura del matrimonio.

Era fácil hablar con ella, y para ella era fácil decir lo que se le viniera a la mente.

Jamás me juzgó, aunque lo dijo aquella vez...

La primera vez que nos conocimos...

Nunca imaginé que esa pelea sería el comienzo de lo que sea que sea esto.

Estoy enamorado, estoy perdidamente enamorado y no voy a callarlo, incluso si la hubiera conocido hace una hora, no me arrepentiría de decir, le quiero.

-Baekhyun. -salí de mi trance al escuchar la voz de Jennie. -¿Me llevas al cine? -me miró con ojos de cachorro.

-Vamos. -me levanté del sofá y tome las llaves de la mesa, ella abrió la boca sorprendida.

Llegando ahí estacioné el auto y se bajó.

-Sal, tu también. -fruncí el ceño.

-¿Y tu cita? -sonrió cómplice y suspiré con frustración al entender su propósito. -No, ve tu sola yo regresaré a casa.

-¿Y si me secuestran? -levanto su labio inferior.

-Diles que no, bye. -encendí el auto y cerré la puerta de su lado en su narices.