💎capítulo 15💎

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Me saqué la paleta de la boca- ahora que estamos teóricamente solos... responde a esto con sinceridad, por favor - me pasé la lengua por el labio inferior en el que me había quedado un poco de dulce - ¿te interesa mi amiga? -

El Danés me miró con los ojos como platos- eh... -

- porque he visto cómo se miran y te advierto que Minnie no es de las que se fijan fácilmente en los chicos, sí, es cierto que tiene una laaaaarga lista de novios literarios, pero... ¿quien no? -

-pues... La verdad es que sí que me gusta -

-¡Ahh! ¡Sí! ¡Wuhu! - festejé - a ver... Un nombre para el shipp... ¿Erinna o Minnick? -

-ehm... ehh -

-¿te comentó que su abuela es danesa? -

-¿sí? -

- ahá, por lo que entiende el idioma -

-Sí yo le dijera... Jag elsker dig ¿crees que ella entendería? -

-supongo que sí... normalmente me habla en danés cuando está muuuuy enojada conmigo y dice cosas como... mere idiot umulig o du er dum- el chico largó una risotada - ¿podrías decirme qué carajos significa? -

- mere idiot umulig significa que no puedes ser más idiota y du er dum está afirmando que eres estúpida -

- le he oído decir cosas peores, así que... Me quedo tranquila -

-¿a sí? -

-Sip - asentí - pero no te preocupes, solo da el primer paso con Minna y lo demás ya se irá dando solo - sonreí - no le digas que te dije, pero creo que le gustas un poco -

Erick se quedó parado frente a la tienda de regalos- esperame aquí - sonrió.

Miré la hora y miré hacia abajo dejando que el cabello me cubriese el rostro mientras que me colocaba unos lentes de sol espejados, había visto un grupo de asiáticos con sus celulares y cámaras observándome fijamente.

Por suerte Erick salió rápido de la tienda, sin mirarlo le susurré - camina hacia aquel banco y finge que no estamos juntos- le señalé con la cabeza un asiento que compartía respaldar con otro y comencé a caminar sin rumbo fijo, dí unas cuantas vueltas y al cabo de cinco minutos me senté en el banco de atrás al de Erick.

-¿que sucede? - susurró sin girarse

- cámaras, las fotos se podrían hacer virales y los reporteros nos comerían crudos - siseé.

-oh, mierda, ¿ahora que hacemos? -

- pues... - ví que uno de los chinos encendía su cámara y opté por la mejor opción para que no nos captase - a la cuenta de tres corre hacia la jaula de las mariposas, nos encontramos allí - saqué todo el aire de mis pulmones e inspiré- uno... Dos... ¡Ya! -

Me apresuré a huir en la dirección contraria a la del danés sorteando a las personas que estaban en la plaza central del Zoo, estaba siendo seguida por el grupo de asiáticos, al parecer el jodido chino había avisado a sus amigos.

Giré unas cuantas veces y cuando pude divisar la alta y florida jaula de las mariposas me metí en ella sin siquiera dejar que la mujer de la entrada me colocase el sombrero con flores artificiales que tenía agua azucarada para que los bellos insectos se posasen en mi cabeza.

Me escondí tras un bello arbusto florido y solté un suspiro, tomé mi celular y llamé a Erick.

-Scarlett, donde estás - solté un suspiro, pues podía oír su voz sin necesidad de comunicarnos por teléfono, levanté la vista y lo ví a unos metros, de espaldas a mí, colgué y muy silenciosamente me acerqué.

La princesa de Cristal [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora