Borrar y copiar

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El entrenamiento entre el asesino de heroes e Izuku había terminado tres años después, y el pequeño se había convertido en un adolescente de 16 años.

En los últimos 7 años Izuku se había echo un nombre en la ciudad, o al menos había creado una imagen, ya que nadie sabía quién se escondía detrás de la máscara. El chico podía encargarse de lo que sea, mientras hubiera dinero de por medio no había trabajo imposible.

- le tengo un trabajo - un hombre vestido de negro hablo sin voltear a verle.

- ¿A quien? - cuestionó con hipocresía.

- a Deku - contesta con firmeza.

Al escuchar esto, Tomura poso su bandeja en la mesa del cliente y al dejar su pedido en esta el hombre dejo un papel a un lado del vaso, se tomó la bebida de un trago, dejó dinero en la mesa y se marchó.

- es hora de cerrar - informo Kurogiri.

Izuku se acercó a la puerta, apagó el letrero de afuera y lo metió, cerró la puerta y la aseguro.

- tienes un trabajo - hablo Tomura mientras se acercaba a Izuku.

- déjame ver - dijo extendiéndole la mano, Tomura le dio el papel.

- ¿Quién es esta vez?

- no lo dice, solo hay una ubicación - no levanta la mirada.

- no deberías ir - opina el peliceleste.

Izuku solo se limita a regresarle la mirada - no es asunto tuyo - contesta con frialdad.

- es mi asunto si se trata de ti - reclama alzando un poco la voz - podría ser otra emboscada.

El peliverde se quitó el delantal de mesero, lo aventó hacia la cara del mayor y salió del lugar.

*****

- no debí tratarlo así - se lamenta el peliverde - el solo quiere cuidarme.

Suspira con pesadez y se aleja del borde del techo en el que estaba sentado, empezó a brincar de techo en techo con dirección al lugar indicado.

Al llegar desciende de un brinco y frente a él se encontraba un hombre, más específicamente una rata.

- ¿Tu eres Deku? - hablo el roedor

- ¿Y tú a quien tengo que matar? - saco una de sus katanas.

- no, te cité aquí para poder hablar contigo - la calma del roedor alteraba a Izuku.

- ¿Por qué está tan calmado? - piensa el peliverde - ¿realmente es un emboscada?

El chico no se lo pensó dos veces antes de atacar, pero al estar cerca de la rata un enorme puño cubierto de fuego impacto contra su rostro mandándolo a volar, por suerte el Dark Helmet logro recubrir el punto de impacto antes de que recibiera el golpe, salvando lo de un dolor inimaginable.

Cuando logro reincorporarse salió corriendo en un inútil intento de huida, ya que detrás de él se encontraban más héroes.

- genial, más idiotas disfrazados - se queja.

- si sabes que tú también estás disfrazado, ¿verdad? - una mujer de cabello azul obscuro (casi negro) le contesta con intriga.

- pero al menos yo no llevo objetos sexuales encima - responde el chico - vieja pervertida - susurra.

- ¿¡QUE DIJISTES!? - grito enojada - ¡Te escuché!

Izuku se encoje de hombros haciendo que la mujer enfurezca aún más.

PerdidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora