Muerte.

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Camila y Minei, luego de media hora, seguían esperando por Lauren. Los pocos asistentes que decidieron quedarse, ya que Britt les informó, que tal y como lo sospecharon al verla ingresar al comedor, Camila no iba a ser parte de "la diversión" en el jardín, ya se estaban impacientando.

De pronto la puerta del estudio de Lauren se abrió.

- Minei, cámbiate de atuendo y ponete esto. - Le dijo Britt, mientras le entregaba una bata con estampado de leopardo, y unos zapatos de tacón aguja rojos.

Minei agarró dicha prenda levantando la ceja izquierda.

- Es broma ¿no?

- Cuando venga Lauren, y no te vea con eso puesto, te va responder si es una broma. - Le dijo seria y amenazantemente Britt.

- Camila, esto es lo que te tenes que poner vos. - Le dijo mientras le entregó un conjunto blanco de corset y pantalón ajustado de cuero. - No te preocupes por mancharlo, incluso te aconsejaría que lo hicieras.

- ¿Por qué nos dan diferentes atuendos? - Le preguntó Camila mientras se comenzaba a quitar el vestido para ponerse lo que se le solicitó.

- Porque no van a hacer lo mismo. - Fue la respuesta de Britt.

Ambas se miraron por unos segundos, mientras Britt se acercaba al escritorio de Lauren y comenzaba a ver algo por el monitor de la computadora.

- ¡Mierda! - Dijo mientras salía apurada de la habitación. - No se muevan de acá. - Fue lo último que escucharon antes de que cerrara la puerta con llave.

En el ambiente había tantas energías juntas que se mezclaban y se revolvían entre sí, logrando una energía que se podía sentir, aunque no era agradable.

Los minutos seguían pasando, y Camila comenzó a desplazarse por la habitación. Lo primero que intentó al llegar al escritorio fue tratar de ver qué fue lo que había visto Britt en el monitor, pero se dio cuenta que necesitaba una contraseña, por lo que desistió.

Comenzó a ir rumbo al gran ventanal que estaba cubierto por una cortina roja pesada, la cual no dejaba ver absolutamente nada. Cuando puso su mano sobre la cortina, sintió ruido a su espalda. Miró y era Minei que estaba tomando del alcohol que Lauren tenía a un costado. Ella le iba a advertir que eso no iba a ser bien recibido por Lauren, pero de pronto sintió como "algo" se había hecho presente del otro lado de la cortina.

Lo pudo sentir.

- No abras la cortina mujer, que alguno de esos desgraciados puede estar por ahí. La puerta de la habitación está cerrada, pero los vidrios no nos van a proteger. - Le dijo Minei mientras vaciaba en su boca el vaso de whisky que se sirvió.

Camila la miró brevemente, y nuevamente vio como se servía otro vaso y se iba para el otro lado de la habitación a acostarse en uno de los sillones. Cuando vio que ella no le estaba prestando atención, comenzó a deslizar la cortina.

Ella sentía esa presencia del otro lado aun.

Lo que vio cuando abrió por completo la cortina fue a un ser de apariencia escamosa, parado frente a ella mirándola fijamente. El ser poseía un color verde claro, y en algunas partes algo más oscuro, debería medir por lo menos 2 metros. Pero lo que más le llamó la atención a Camila fueron sus ojos. Eran parecidos a los de Lauren... Ella los seguía contemplando, mientras se preguntaba si la apariencia de Lauren sería similar a la de ese ser, cuando estaba en ese modo.

Otra vez miró en dirección de Minei para ver si ella también lo estaba mirando, hasta que comenzó a sentir como algo frío se iba acercando a ella. Al mirar hacia la ventana, vio como la mano, o garra, de ese ser comenzaba a traspasar el cristal. No lo estaba quebrando, solo traspasaba su mano, la cual tenía como destino el cuello de Camila. Ella estaba completamente asombrada por ver aquello, tanto que no se movió en lo absoluto, hasta que sintió ruidos en la puerta producto de que alguien intentaba ingresar.

Reptiliana. (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora