Tiempo. Alessia quería más tiempo. Necesitaba que ese momento fuese infinito. El inquebrantable contacto, la fluida charla, el curativo aroma.
Percibía la risa de Eli como una orquesta de ángeles.
Ni bien llegaron al frente de la casa de la castaña, un chico de unos 9 años salió por la puerta corriendo.
-¡ALESSIA! ¡LLEGASTE!- gritó. Eli, viéndolo detalladamente, dedujo que debía ser un hermanito o primo de la joven en sus hombros, ya que sus rasgos se asemejaban bastante.
Alessia por su parte no estaba prestando atención; estaba enfocada en su nuevo descubrimiento: las pecas en los hombros de Eli. La mayor ese día llevaba una sudadera negra que contrastaba con su pálida piel y sacaba a la luz los interminables puntos.
La menor estaba hipnotizada.-¡Me terminé los honey comb! ¿Podrías comprarme más para la cena?- el niño pidió. Alessia finalmente saliendo de su mundo.
-¿Cenar cereales?-
-La abuela no cena con nosotros hoy, o sea que mamá va a cocinar.- argumento válido.
-Okay.- La castaña seguramente también se uniría al plan de cenar cereal. -Ah, Eli, el enano es Theo, mi hermano menor.-
-Hola, enano.- saludó la mayor. Con suma delicadeza, bajó a Alessia de su espalda. La falta de toque siendo notoria al instante.
-Realmente no sé cómo agradecerte por todo lo que hiciste. Puedo pagarte con cereales.- trató de bromear la menor. Eli tenía que reconocer que aunque sus chistes eran muy malos, los amaba.
-Mmh, no será necesario.-
Alessia besó el cachete de la ojimiel, el beso durando unos segundos. Benditos segundos.
-Gracias, en serio.- susurró. Una sonrisa expandiéndose en ambas.
La castaña entró a la casa. Eli procedió a irse.
Alessia recordó algo.
-¡Eli!- la aludida se dió vuelta. Ya llevaba unos cuantos pasos de distancia.
-¿Como sabias que le mentí a mi mamá sobre lo de volver sola?-Un casual levantamiento de hombros salió de la mayor. -Lo sentí.-
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~honey comb~
General FictionNi bien ella entró, lo sintió. Era como si se hubiese teletransportado a ese momento; A la constante brisa. La abundante nieve. Las resaltantes constelaciones. sus constelaciones. Bañadas en miel, intimidantes y reconfortantes a su vez: sus ojos. Co...