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Se sentó con mucha timidez, frente al chico apuesto, de quién aún no sabía el nombre. Por lo cuál sólo optó por esperar a qué el hablará. Lo cuál sólo tuvieron qué pasar unos minutos mientras el ordenaba unos papeles qué estaban sobre el escritorio. A la par qué carraspeaba.

-Bueno.- Llamó la atención de el Omega, quién se encontraba con la mirada gacha.- Me enteré por Yunho qué venías por el empleo.- Comentó, apoyándose en la madera oscura.- Pero primero qué nada, debemos presentarnos, ¿Te parece?.- Propuso, a lo qué Wooyoung asintió.- Bien.- Soltó un suspiro.- Soy Choi San, el Jefe de éste restaurante.- Se presentó.

Wooyoung no pudo evitar morder su labio. La voz del chico, la encontraba ni muy cargaba, pero tampoco suave. Simplemente era Perfecta. Sacudiendo su cabeza suavemente, procedió a presentarte también.

-Bueno, mí nombre es Jung Wooyoung.- Hizo una pequeña reverencia, creando qué San sonriera disimuladamente.

-Bien, Wooyoung...- Tomó un papel y un lapiz.- ¿Cual es tú edad?.- Preguntó, a punto de escribir.

-Tengo 24 años, señor.-

-Eres menor qué yo.- Murmuro para sí mismo.- ¿Fecha de nacimiento?.-

-26 de noviembre...-

-¿Eres de Seúl o eres de algún otro lado?.-

-Vengo de las afueras.- Estás preguntas sinceramente no las encontraba necesarias, pero más no dijo nada.

-¿Haz trabajado anteriormente con público?.- Miró expectante a Wooyoung, quién más se cohibia por aquella mirada felina.

-Yo...sí. Dónde vivía anteriormente ayudaba a mí Noona en su floreria.- Comentó, bajito, temiendo de hacer algo mal.

Unos segundos de silencio, fue suficiente para escuchar nuevamente la voz de San resonar en las cuatro paredes qué les rodeaban.

-Bien, lo último qué necesito, es tú número de celular, para llamarte cuándo hablé con el grupo.- Comentó, haciendo qué el Omega asintiera y anotara su número en el dicho papel, para seguido pararse, siendo copiado por El Alfa.

-Te llamaré de aquí a dos días más de seguro.- Le comentó, tan de cerca, qué le dio un escalofrío al de más baja estatura.- Así qué no te preocupes mucho.- Le dijo antes de qué quedará afuera.- Fue un gusto, Wooyoung.- Terminó, estrechando la mano con el mencionado, más una sonrisa.

Una maldita sonrisa qué derritio hasta lo más profundo del Omega.

Algo nervioso, soltó de golpe la mano de el Señor San e hizo una reverencia, para próximo casi salir corriendo del restaurante. No sin antes despedirse de sí no mal recordaba al cajero quién se llamaba Yunho.

Al ya estar afuera, soltó de un golpe todo el aire acumulado en sus pulmones. Estúpido lobo qué se pone a dar vueltas cómo loco por estar cerca de una persona qué vería siquiera una vez.

Rodó los ojos y se dispuso a caminar hacía el parque dónde se supone estaba Yeosang con su pequeño Puchi.

Los buscó por todo el extenso de el parque y ni señales de vida había de ambos. Hizo un puchero, sí su mejor amigo le había perdido a su bebito y había salido corriendo para no morir, iba a estar en grandes problemas.

Sacó su celular de el bolsillo trasero y le marcó, dos tonos fue todo para escuchar la voz del otro Omega a través de la línea.

-¡Dónde estás y dónde está Puchi!.- Le dijo totalmente enojado.

❝Between Glasses❞ 🥀; Woosan 우산 || Omegaverse© ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora