Nuestro hilo rojo [Cole Sprouse] √TERMINADA

15. Incomodidad

Capítulo quince

Nunca había sentido tanta vergüenza en mi vida, que tu crush actor te encuentre en toalla es bastante vergonzoso, pero ya las cosas no se pueden regresar y ahora tendré que lidear con los momentos incómodos que me esperan.

Salgo de la habitación una vez que ya me cambie, camino lento hacia la cocina, Cole esta sirviendo la comida y su cara estaba roja como un tomate, y debo decir que cuando se giró y me vió, su cara se tornó más roja todavía.

— Cole yo... Siento que me hayas encontrado en esa situación.

El se sienta frente a mi en la barra — En realidad fue mi culpa, ya que debí tocar antes de entrar... Yo soy el que lo siente.

Suspire y puse mi cabeza en la barra — Se que será incómodo después de eso, pero espero que al menos tratemos de llevarnos igual.

— Será igual.

Después de comer, y limpiar la casa, decidí ir a caminar un rato, Cole quizo quedarse en el departamento a esperar a KJ ya que el pelirrojo aún no aparecía.

Caminaba por el parque mientras miraba a las personas pasar, como soy una persona muy distraída tuve que chocar con alguien y caer al suelo como de costumbre.

— Lo siento tanto — me pongo de pie gracias a su ayuda y al fin logro verlo a la cara.

— Esta bien, yo fui la tonta — me sobe el trasero disimuladamente, ya que siempre mi trasero es el que sufre los golpes.

— No, no, debí verte, pero también estaba distraído — su linda cara reflejaba preocupación y pena y eso me daba ternura.

— Bueno es culpa de los dos — ambos reímos — Soy Circe... Mucho gusto — le doy mi mano y el la toma sonriente.

— Mucho gusto Circe, soy Luke — era una chico muy atractivo y muy simpático y increíblemente se me hizo conocido, como si lo hubiera visto antes — Quisiera compensarte por lo de la caída.

— No es necesario Luke.

— Claro que lo es... Por favor dejame compensarte — juntó sus manos en un gesto de suplica y me miró con cara de perrito.

— Esta bien — sonrió ampliamente y metió las manos a los bolsillos de su abrigo.

— Entonces vamos a un café, por que con este frío lo único que quiero es algo caliente — asiento y comenzamos a caminar, minutos después llegamos a una cafetería y nos sentamos cerca de la ventana.

— ¿Quieres un café? — hizo la seña para llamar a la mesera.

— Prefiero un chocolate caliente — la mesera anota y luego mira a Luke sorprendida, y yo me quedo confundida por su acción.

— Y yo quiero un café — la señora asiente y se va sin decir nada — Entonces... ¿A que te dedicas?

— Soy maestra de una secundaria, aunque pronto me van a promover hacia una preparatoria — digo orgullosa por la noticia que me acababan de dar hace unos días.

— Me alegra mucho — su teléfono en la mesa comenzó a vibrar y el lo tomó rápido — ¿Si? — aguardó unos segundos — No papa, ya te dije que no iré a dar la conferencia... es mi decisión y te pido que la respetes, estoy ocupado, adiós.

Colgó la llamada y yo me sentí incómoda al no saber que decir — Disculpa — dice con la mirada fija en su teléfono — Mi padre es muy terco.

Solo pude sonreír y sentía las miradas de todos los presentes en la cafetería — De pronto me siento como un extraterrestre, siendo observada por todos.