Nuestro hilo rojo [Cole Sprouse] √TERMINADA

18. Momento magico

Capítulo dieciocho

Era un sueño echo realidad.

Tenía demasiados sentimientos encontrados en ese momento, mi cerebro no lograba captar o entender aún lo que estaba pasando.

Si, Cole y yo nos estábamos besando.

Pero... ¿En que momento pasó de ser mi crush platónico a la persona que estoy besando?

No lo se, pero me gusta.

Nos separamos un poco juntando nuestras frentes, había cerrado mis ojos, no los podía abrir ya que tal vez me sentiría avergonzada ¿Y si se arrepintió?
Sentiría una gran incomodidad.

— Abre los ojos — susurró aún pegado a mi frente.

Negué levemente con la cabeza y el volvió a decirlo: — Por favor, mirame.

No tuve otra opción, abri mis ojos lentamente y me encontré con el azul verdoso de sus ojos, una sonrisa ladina reinó su rostro — Eres muy hermosa.

Sentí mis mejillas enrojecerse, lo bueno era que el lugar estaba semioscuro, solo por las luces rosas y rojas que apenas se notaban.

— Cole yo... — el me interrumpió dándome otro pequeño beso en los labios.

— No digas nada, solo dejame disfrutar de este momento.

Volvió a juntar sus labios con los míos, sentir ese tacto suave y delicioso me estremecia y me hacia sentir la mujer más afortunada del mundo.

Sus suaves labios sabor a cereza se movían a un ritmo impresionante con los míos. El beso se intensificaba cada vez más, sus labios succionaban los míos, su lengua abría paso para encontrarse con la mía.

No sabía que Cole besara tan bien.

Me sentía en las nubes, a pesar de que no era mi primer beso, sentía que lo era. Me sentía de nuevo como una adolescente, besando fotos y posters de Cole que tenía en mi cuarto. Me sentía de nuevo como una chica de 15 años, enamorada de una estrella que sabía que jamás conocería... Y ahora MÍRENME.

Besando a Cole Sprouse.

Besando a una super estrella.

Besando al chico del que siempre estuve enamorada.

(...)

Una vez que salimos del túnel, el ambiente entre nosotros se tornó un poco incómodo. Espero y no se haya arrepentido de lo que pasó. Por que yo no lo hago.

Caminabamos aún en silencio entre las personas, se escuchaba la música del parque.

A lo lejos pude notar a Luke platicando con una chica rubia, por un momento quise acercarme y preguntarle por que se había ido sin decirnos nada, pero no quiero dejar a Cole solo, y menos después de lo que pasó. Pensaría que no me importa y eso es mentira.

— ¿Y... Quieres comer algo? — quería romper el silencio, no quiero sentir esta incomodidad.

— No lo se, no tengo mucha hambre — a pesar de la oscuridad de la noche, podía notar perfectamente sus facciones. Estaba avergonzado. Su rostro emanaba una gran ola de calor que se podía notar en sus mejillas rosadas.

— ¿Estas bien? — pregunto sin siquiera pensarlo.

— ¿Eh? — estaba perdido en el planeta pensamiento. A veces suelo ir ahí muy seguido — Si, estoy bien.

Dejé de darle más vueltas al asunto y gire mi cara hacia otro lado. Continuamos caminando hasta llegar a un puesto de juegos llenó de peluches gigantes.