17

122 14 6
                                    

—Señor.

Jungkook levantó una ceja— ¿Jimin?

—¿Has dormido bien? —el guardaespaldas principal le ofreció una pequeña sonrisa.

—Sí, supongo. ¿Qué estás haciendo aquí? ¿Pensé que te había dado un descanso?

—Solo para decirte que un pajarito me dijo lo fuerte que estabas anoche —Jimin se encogió de hombros casualmente, los ojos no aburrían ninguna emoción en particular. No esperaba una respuesta de su joven maestro. Pero tampoco esperaba que un libro volador se dirigiera directamente hacia él. Por reflejo, Jimin impidió que el libro le golpeara la cara con los brazos— ¡Señor!

—¡Jodidamente reformúlelo ahora mismo! —rugió Jungkook, con la cara sonrojada mientras golpeaba su taza de café sobre la mesa.

Más que nada, Jimin sonrió, apreciando la forma en que su joven maestro estaba hirviendo con algo que no es enojo. Su joven maestro estaba avergonzado. Levantando los brazos en señal de rendición, Jimin suspiró—. Quise decir que estoy seguro de que la pasaste muy bien con Taehyung-ssi y-

—¡Jimin!

–Quiero decir-

—Dios mío —como en el momento justo, Taehyung entró en la sala del complejo del presidente con facilidad, sosteniendo las persianas con la mano– ¿Es tan temprano y ustedes dos ya están peleando?

Volviéndose hacia Taehyung, Jimin saludó alegremente— ¡Taehyung-ssi! ¡Buenos días!

Jungkook puso los ojos en blanco, cruzando los brazos contra su pecho con aire sarcástico— ¿Desde cuándo se han acercado tanto?

—Lo harías cuando tengas que trabajar con ellos —respondió Taehyung, mirando alrededor de la habitación—. Guau. Pensé que elegirías las salas VIP.

—Nuestro Joven Maestro lo haría, pero escuché que se mojó realmente anoche, así que solo quería un lugar rápido y fácil, ¡Ow! —Jimin no tuvo que esquivar un golpe directo en la cabeza.

—¡Dije reformular! ¡Cuidado con tu puta boca! —el joven maestro miró, la cara sólo se quemó más y más rojo por segundo.

Taehyung suspiró, sacudiendo la cabeza con desaprobación—. Deja de abusar del pobre niño.

—Cállate. No me digas qué hacer.

—Por eso no le agradas a la gente. Eres tan hostil y grosero.

—Taehyung-

—Muy bien —intervino Jimin—.
Digamos que es una mañana y todos vamos a desayunar, ¿sí? Vayamos antes de que me derrumbe bajo toda esta tensión.

El agente sacudió la cabeza y se puso las gafas—. No puedo. Solo pasaré para registrarme y luego tendré que irme.

—¿A dónde vas? Pensé... —Jungkook hizo una pausa, mirando hacia abajo por un segundo—. Pensé que habías dicho que querías... —levantó la cabeza y miró al agente, cuyos ojos ahora estaban cubiertos por esas sombras oscuras. Jungkook ya no podía leer esos ojos sinceros.

Jimin miró sospechoso entre su joven maestro y Taehyung. Algo está raro... El aire contenía mucha más tensión de lo habitual.

—Sí —dijo Taehyung—. Pero no puedo. De todos modos, como Jimin está aquí, no estoy tan preocupado. Iré ahora —con un breve asentimiento hacia el Presidente, Taehyung giró sobre sus talones, listo para alejarse.

—¡E-Espera! —inmediatamente, Jungkook agarró el brazo de Taehyung. La acción los sorprendió a los tres. Especialmente al propio Jungkook. Sus ojos siguieron la línea de visión de Taehyung hasta donde su propia mano se aferraba al brazo del agente con tanta firmeza. Como si le estuviera rogando al agente que no se fuera—. Al menos desayuna antes de irte.

₊်⸼̥🧷꒱ Operación: Odio | taekook  ࿓᪶٬⸼°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora