13 BEACHES

Capítulo IX

Poché se resignó a levantarse de la cama y salir de la habitación ya que Daniela no emitió ninguna palabra
“Poché espera no te vayas”.

“No hagamos esto más Daniela, tu estas con Jackosn y yo solo regrese a hacer mi trabajo, además estoy con Amy”

Daniela no lo podía creer su cara lo decía todo, estaba sorprendida por tal noticia.

“Wow y tu dices que no te amaba, tan rápido me olvidaste” dijo Daniela que inmediatamente se puso a la defensiva era algo que hacía cuando se sentía amenazada o herida.
“No lo hagas Daniela, ni siquiera me dijiste que estabas casada y ahora quieres reclamarme que este con Amy. Al menos a ella la conozco a ti nunca te logré descifrar ”

“Ok lo siento no quise sonar molesta, al menos dame una oportunidad para explicarte todo” Daniela tomo de la muñeca a Poché para que no saliera de la habitación, con ojos de súplica intento hacer que Poché le diera una oportunidad para explicarse. “Por favor Poché solo escuchame te dejaré pensarlo y si dices que si te veo mañana después de que termines con tus asuntos, estaré en este café esperando todo el día si es necesario” Daniela saco una tarjeta de un local de café, en cuanto le dio esa tarjeta dejo salir a María José.

El transcurso del día resultó tranquilo, preparación de vestuario, unas cuantas fotos y videos hizo que el día pasara rápido, antes de que oscureciera ya habían salido para ir a su hotel.

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“¿Nos vemos en el lobby para cenar?”
Pregunto Kim a sus amigos.

“Vayan ustedes chicos, pienso quedarme a editar y cenar en la habitación” dijo Poché

“¿Segura?” una vez más pregunto Kim a su amiga. “Puedo quedarme a hacerle compañía” esta vez hablo Amy dándole una sonrisa a Poché la cual solo asintió con la cabeza.
“Bien creo que solo seremos Mario y yo”

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En el ascensor iban muy tranquilas las dos chicas haciendo un silencio que casi parecía incomodo.
“Poché, ¿te encuentras bien? después de que saliste de la habitación con Calle parecías distante con todos en general, tu no sueles ser así normalmente te encanta tomar la cámara y se te ve muy tranquila y concentrada en lo que haces, hoy solo se te notaba incomoda quizá.
Un sonido incidió que habían llegado a su piso, María José no emitió ni una sola palabra después de todo lo que dijo Amy, estaba analizando sus palabras antes de hablar. Amy tenía razón, esta situación la estaba sobrepasando.
Caminaron por ese largo pasillo hasta entrar a su habitación.
“Tienes razón he estado un poco incomoda con esta familia, con uno de sus miembros en particular” dijo María José mientras colocaba su bolso en el centro de mesa.
“Todos sabemos que Jackosn es un idiota a mi tampoco me cae muy bien, Poché” dijo Amy.
“No, no se trata de Jackosn es su esposa” dijo esta última palabra con la voz casi sin volumen como si de repente se le hubiera ido la respiración, era una palabra que pensaba que ella utilizaría con Daniela, y no Daniela con alguien más.
“¿Que pasa con ella?” preguntó con curiosidad Amy, sabía que Poché la conocía de tiempo atrás antes de que comenzarán el proyecto, lo supo por la conversación que escucho de Mario y Kim, solo que ella no quiso indagar más. Quería que su amiga fuera quien le dijese.
“La amaba, Cuando amas a alguien como yo la amaba a ella, se vuelve parte de ti como si una cuerda invisible nos uniera y aunque estés muy lejos aún puedes sentirla y ahora cuando busco esa cuerda no hay nadie al otro lado y es como si estuviera cayendo a la nada. Siento como si hubieran arrancado una parte de mí”
Y de pronto Poché se desmoronó se había sincerado frente a Amy, ella la tomó de los hombros y la sentó en la mesa donde antes había puesto su bolso.
“Linda no llores” Amy le quitaba el cabello que tenía en la frente y le limpiaba las lágrimas que caían por sus mejillas.
“No se toda la historia entre ustedes dos, pero se que no merece tus lágrimas Poché” los ojos azules de Amy miraban con compasión y tristeza a Poché, y su mano descansaba en su mejilla.
“Todo estará bie...” María José no dejó que siguiera hablando y le dio un beso, pero Amy se hizo a un lado.
“No Poché estas herida, te quiero pero no así”
“Oh, perdón no se que paso solo quería, lo siento” dijo Poché, en realidad no sabia lo que quería fue un impulso que tuvo en el momento de ver cómo Amy se preocupaba por ella sus ojos le traían paz en un momento de caos.
“Esta bien, entiendo que estés confundida. Haremos esto pediré la cena y veremos una película para distraerte” dijo Amy de lo más calmada mientras se levantaba del piso y ayudaba a incorporarse a la peliazul.

Y así fue cenaron sushi y vieron monster inc una de las películas favoritas de Poché, todo lo incomodo que pudo haber sido esa noche Amy supo cómo manejarlo una vez que terminaron ella dejó a Poché en su cama y le dio un vaso de agua fría, sabía que eso la tranquilizaba.
“Gracias por todo Amy últimamente soy un desastre de persona” dijo Poché.

“Oye no pasa nada todos hemos pasado por algo así y la próxima vez que intentes besarme asegúrate que ya no tengas sentimientos por nadie más” dijo Amy con una sonrisa en los labios pero con una mirada triste, a pesar de ser amable con Poché y entender por lo que la chica estaba pasando aún así dolía, dolía ser la segunda opción.

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Al día siguiente Daniela despertó muy temprano, había quedado con Poché o al menos había quedado en esperar por ella en la cafetería. No había podido dormir y lo noto al mirarse frente al espejo que a pesar del baño de agua fría aún se le notaba cansada.
“Eres un zombie Calle” se dijo a sí misma. Se apresuró en cambiarse, optó por un atuendo sport no tenía cabeza para pensar que combinar. Tomó las llaves de su mustang blanco y fue al lugar acordado.

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Poché después de pasar gran parte de la noche llorando despertó más tarde eran las 11:27 am cuando miro su celular pensó en ir a corre un poco para distraerse. Amy le había dejado una nota en su mesita de noche.

“Te miras linda cuando duermes, no quise interrumpir fui a desayunar con Mario y Kim.” -Amy

Poché no pudo evitar sonreír ante aquella nota. Estaba lista para ir a correr solo faltaban sus audífonos que no los encontraba. “La bolsa” dijo, mientras rebuscaba entre sus cosas, y sacó sus audífonos pero en la bolsa había algo más, era aquella tarjeta que Daniela le había dado la noche anterior. La tenía en sus manos pensando en que hacer con eso.
Puso google maps en su celular sin pensarlo tanto tecleo el nombre de la cafetería y lo volvió a bloquear.

Salio del hotel, puso su música en aleatorio y empezó a correr. Una tras otra canción le recordaba a ella.
“Para de pensar en ELLA” grito y varias personas se le quedaron viendo. Se detuvo en una banca para amarrar sus agujetas y cuando levantó la vista vio la cafetería.

Esto debe ser una jodida broma pensó Poché, inconscientemente había llegado corriendo hasta ahí ella era muy mala para las direcciones pero de algún modo llegó hasta ahí.

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Daniela había estado en la cafetería desde las 8am, esperando a Poché y cuando finalmente vio a la chica atravesar esa puerta no lo podía creer pensó que aún estaba dormida.

“Tienes 1 hora” dijo Poché mirando a su celular y antes de que Daniela intentará decir algo ella levantó su mano en señal de que no dijera nada. “Ahora” puso su celular en la mesa con un cronómetro y se sentó enfrente de Calle.

“Esto es ridículo Poché” dijo Daniela.

“Puedes decirme lo ridícula que soy durante 1 hora Daniela pero es lo único que obtendrás de mi” dijo María José.

“Cuando te dije que te amaba, lo dije en serio aún lo hago y no quiero nada se interponga en lo nuestro. Si cometí un error Poché pero tengo tanto en juego” dijo Daniela.

“Calle eso no fue un error, un error es confundir un delfín con un tiburón, un error es correr hasta una persona que no le importas una mierda y si un error es pensar en que podía confiar en ti” dijo Poché a Daniela, sonaba mucho peor de lo que imaginaba.

“Entiendo todo tu enojo Poché, pero mírame a los ojos y dime que ya no sientes nada por mi, por que si fuera así ni siquiera te hubieras aparecido hoy”.