未来 [mirai] (BORRADOR)

CAP 5

Ser capaz de aceptar la realidad es un defecto que aborrezco de mí. La gente que me rodea vive el día como si fuera el único e inigualable. Sin miedo de que algo o alguien perjudique su visión. Esos seres humanos son todo lo contrario de mí. Vivo mis días ante la conciencia de que, en un abrir y cerrar de ojos, mi vida acabe por mera causa. Me siento frustrada de pensar tan negativamente pero me siento mal de mi misma de no poder tener el control de mi propia vida.

- Soy una tonta.

¿Que es lo que busco? ¿Que es lo que necesito con tanta desesperación? Respuestas. Pensé, pasando página al enorme libro de leyendas Japonesas.

- Veo que ya estas mejor, Aine. -Alcé la mirada y observé a Mie sentarse a mi lado. La muy descarada, con la sonrisa ancha, pinchó mi cachete con su sucio dedo- Tus mejillas tienen más color que la vez anterior. -Suspiré con más frustración sobre mis hombros, deseando un poco de paz en medio de esta manada de animales.

- ¿Que quieres?

- ¿Sucedió algo interesante el fin de semana? -Ella sonrió y afiné la mirada- ¿Qué?

- Muérete. -Solté y ella se echó a reír.

- ¡Aine, mi bebé!

- ¿Ahora que bicho les pico? -Yohuka, sin importarle mi cara de fastidio, apareció de la nada y me apretó las mejillas como tal pan de almidón que me consideraba. Me quejé y le puse mala cara cuando me dejó libre- Mírate, tus ojos hasta brillan. Te vez viva, ¡es un milagro!.

- Exageras. -Aparté su cara con la pasta del libro, a lo que Yohuka se quejó- Solo me decaí, no fue nada del otro mundo.

- Pues Jung nos contó que estabas agonizando. -Xiao se sentó frente a nosotras, pasando sus brazos por detrás de su cabeza. Yo rodé los ojos y dejé caer mi espalda y cabeza sobre el respaldo de mi silla.

- ¿Agonizando?, ¿Es enserio?.

- Sí, hasta Emy dijo que Ryu te dio respiración boca a boca. -Comentó su gemelo y mis ojos se abrieron par a par. Me levanté de golpe. Jey, asustado por mi reacción, retrocedió cuando  impacté mis manos sobre mi pupitre- ¿A-Aine?

- ¿Qué Kurosawa hizo qué?

- ¿E-Eh? -Me incliné hacía el menor, agarrando su corbata bruscamente- ¿Q-Que...?

- Jey. -Fui brusca- Re-pi-te.

- ¡No soy yo nadie para saber lo que paso! -Exaltó, moviendo sus manos, mostrando pánico- Ya conoces a Emy, exagera en todo los sentidos. ¡Ahora suéltame porfavor! -Lloriqueo, tomándome de la mano con la que lo agarraba.

- Aine. -Yohuka me tomó de los hombros, intentando separarme del menor para apaciguar mi enojo- Ya conoces a Emy. Deja al pobre de Jey, lo estas asustando. Además...

- Voy a matarlos. -Solté a Jey y salí hecha una furia del salón.

- ¡Aine!

Es extraño, pero la sensación de paz que me transmitía ese bosque, la añoraba desesperadamente. Aunque sé sin mis sentimientos los que  necesitan de su inestable presencia.

- Jimin...

- Aquí estoy. -Susurró, visualizandolo a mi lado, mostrando una mirada perdida y una expresión culpable- Perdón. -Sus ojos brillaron- Perdóname, Aine. -Soltó, tomando mi mano al mismo tiempo que se dejaba caer sobre mi regazo. Mi cuerpo, ante un lago de emociones, tembló. En mi regazo tenía al hombre que intentó matarme por alguna razón que él consideró justa. Tenía miedo pero mi corazón se sentía triste- Quédate a mi lado. -Se aferró a mis piernas- Porfavor, no vuelvas a irte.