Junto a la reciente llegada de Gilbert Blythe aparece una nueva familia, los Winter, alemanes que buscan una nueva vida alejados de costumbres tan conservadoras de su país natal. ¿Habrán llegado al lugar correcto?
Capítulo 1 "Tal vez podamos encontrar un lugar para sentirnos bien y podamos tratar a la gente con amabilidad"- Treat people With Kindness- Harry Styles.
La llegada a nuestro nuevo hogar fue bastante tranquila, pese a que en el camino los transeúntes nos observaban y susurraban entre ellos, tal parece que es bastante extraño que una familia decida abandonar la ciudad. Baje de un salto de la carroza una vez esta se detuvo, estaba realmente ansiosa por descubrir y explorar cada centímetro de mi nuevo hogar.
— Love, cariño, no seas tan brusca —Habló mi padre reprendiéndome—, Sabes perfectamente que si te lastimas no podrás ayudarme con la cosecha.
— Tranquilo padre, tendré cuidado, si me permiten me gustaría ir a recorrer el lugar —Respondí— ¡Estoy segura que podré pintar y recolectar muchas plantas nuevas para mi investigación! creo haber visto una Erigeron canadensis* de camino.
— Será después de desempacar y ordenar la casa, sube tus cosas a tu habitación —Mencionó mi madre y luego sonrió—, Luego podrás pasear e investigar lo que desees.
Asentí y procedí a llevar mis maletas al cuarto, se encontraba en el segundo piso, era bastante espacioso la cama estaba en el medio y frente a ella había un pequeño escritorio donde deje una variedad de pinceles, tubos de óleo, pastillas de acuarela y otros materiales, soy una aficionada a la pintura. En una esquina de la habitación había una cómoda y junto a la puerta dos pequeños estantes con libros, las paredes eran de color blanco listas para ser pintadas.
Una vez que termine de acomodar mi cosas tomé un cuaderno, una pluma, algunos bocadillos y salí de mi hogar. Eran cerca de las 11 de la mañana por lo que tendría bastante tiempo para recorrer el lugar, si mi memoria no me falla, tardaré varios minutos antes de encontrar la planta que ví, tiene propiedades astringentes y puede ser usado para el catarro o resfriado común, al ser originaria de canada solo la había visto dibujada en libros.
Luego de caminar 30 minutos la encontré, pequeña, pero servira de todas formas, escribí unas cuantas anotaciones y desenterré la planta para poder plantarla en mi hogar.
(...)
Una vez llegando a mi casa fui rápidamente a la cocina, me entretuve bastante por lo que llegué a las cinco de la tarde, lamentablemente, por las reglas que tenemos, quien no llega a la hora de la comida tiene que preparar la cena así que me dedique a preparar una sopa de verduras y un pie de manzana.
— ¡Madre, Padre Está lista la cena! —llamé una vez la mesa estaba servida, cuando llegaron nos sentamos y les comenté de mi día—, Recuerdan que les hable sobre una planta hace unas horas? pues efectivamente se trataba de ella, tomé una y la planté en el jardín... Saben algo, mientras volvía a casa, como ya me conocen, me desvie un poco y me tope con una señora bastante extraña Rachell, creo, me miró espantada diciendo que parecía un chico con mi atuendo y que hablaría con ustedes por ser tan "inmorales"—Solté una carcajada recordando la cara de la señora—, pensé que este sería nuestro lugar.
— ¡Por dios! ¿Cuándo dejará la gente de meterse en la educación de una familia que no le interesa? —bufó mi padre sirviendo el postre—. Recién estamos llegando y ya comenzarán a juzgarnos, pero claro, solo te tratan bien si concuerdas con su tan arcaica sociedad.
— Bueno cariño, veamos el lado positivo —Habló tranquila mi madre—, creo que de momento no hay ninguno... Pero tendrán que acostumbrarse en algún momento, no estarán veinte años utilizando únicamente vestidos, aunque llevan siglos, pero no es el punto, el mundo y sobretodo las mujeres estamos cambiando —mencionó con "superioridad"—, solo esperemos que venga y le daré una extensa charla sobre feminismo con la cual, si no aprende algo, dejara de molestarnos con tal de evitar otra.
— Dejando el tema, ¿mañana empiezo la escuela cierto?
— Claro! No podrías estar tanto tiempo sin estudiar —Dijo burlona mamá—, vamos, ve a lavarte y a la cama, mañana tendrás que levantarte temprano.
Me despedí de mis padres mientras ellos recogían los platos y subí a mi habitación a preparar mis cosas para la escuela, sin duda será un día entretenido, o eso espero.
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¡Hola! Aquí tienen el primer capítulo, espero que les guste, nos leemos próximamente.
