Capítulo 3

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Our destiny


Desde aquel día jamás se han visto, no desde ese 'Gracias' mutuo.

Ha pasado un tiempo desde que Nezuko ha aceptado la decisión de Giyuu, de dejarla atrás y seguir con su vida, no lo culpa, ahora lo entiende más que nunca, un demonio y un cazador, ¿juntos? parecía una mala broma, por eso anhela ser humana, para poder preguntarle seriamente si puede caminar a su lado.

Todos los días un nuevo objetivo, nuevos enemigos, nuevos descubrimientos de su cuerpo, de ella como demonio, de habilidades, ha visto morir a sus colegas, y vio morir a muchos demonios que intentaban matarlos. Y aún si ocurría todo eso y más, su visión de la vida, que acaba en un abrir y cerrar de ojos le hizo reconsiderar muchas cosas. Un día lo comprende, y al otro día lo odiaba porque no es capaz de verla a los ojos otra vez, lo odia porque otra mujer beso sus labios y nada ha hecho al respecto, lo odia porque le demuestra que esa noche fue nada, y lo odia porque hace su corazón latir de una manera tan caótica y sublime que necesita en verdad oxígeno para poder seguir viviendo. Y el oxígeno para ella es él.

Púdrete, muere maldito destino.

Había aprendido esos insultos gracias a Inosuke, Nezuko insulta al mundo, al maldito destino que puso a ese hombre nuevamente en su camino. Sus lazos se cruzaron nuevamente, los dos estaban bajo el mismo techo, un par de ancianos que recibían a cazadores. Por lo que oyó de él estando en la caja, había completado su misión con éxito y se desvió del camino, tenía heridas y debía descansar, pero aún así quería irse, Nezuko se preocupó, pero su odio dominó sobre ese, pues seguramente Giyuu no deseaba estar bajo el mismo techo que ella. Comenzó a gruñir, pero se detuvo al ver que su querido hermano le insistía para quedarse, pues sería un descuido que no se cure esas heridas. La oji violácea deseaba hacerlo por él, sus mejillas se sonrosaron, y tiene la loca idea de acariciarlo, abrazarlo, decirle que lo quiere, que le acaricie la cabeza con sus manos ásperas y gruesas, que incluso Giyuu se tome el atrevimiento de unir su mano con la suya, y que por fin, la bese.

La noche llegó en un suspiro, luego de una guerra de almohadas entre Zenitsu e Inosuke, esos dos se rindieron en el suelo acabados, al igual que su hermano, espero un tiempo y abrió la caja con cuidado, un futon aislado se encontraba vacío, y no debía ser muy lista para darse cuenta quien era el faltante.

Él estaba listo para irse, pues estaba en la entrada, pero se mantuvo quieto, —Sabes... que no podemos estar juntos... —comenzó a decir cuándo sintió que ella estaba detrás suyo—es lo que dijimos, "la primera y última vez", así que aléjate de mi demonio.

Pero tan pronto como dio el tercer paso sintió que tiraban de su kimono, intentó seguir caminando ignorándola por completo, y ante la terquedad del hombre ella se coloca delante ya no tan niña, ya no tan pequeña, —Sería un hermoso sueño que fueras humana... pero seamos realistas, y apártate.

No podía sacarse el bambú, porque estaba tan ajustado que lo único que podía hacer era romperlo para que pudiera escucharla, pero su garganta ardía,
y no quería arruinar lo único que ese hombre le había obsequiado, aunque ella no necesita eso, porque Giyuu es lo primero que recuerda al despertar, antes de dormir, en sus sueños o cuando admira la nieve, lo ama, y sus sentimientos son tan fuertes que los detesta, porque sabe que él no le corresponde.

Giyuu debía romperle el corazón, pues la vio a los ojos, y se atrevió a rematarla diciendo, —Ve a molestar a alguien más con tus sentimientos.

To be continued...

Pensé que nunca iba a actualizar xd

Este capítulo es corto, pero decidí dejarlo así para dar como un avance de lo que quiero escribir. Me voy a basar un poco en el manga, y lo voy a modificar para ver los destinos de Nezuko y Giyuu. ¿Se entrelazan o no? ¿Por qué Giyuu la trata así?

Gracias por esperar y leer. 🖤

𝐒𝐞𝐝𝐮𝐜𝐞 𝐚 𝐇𝐮𝐧𝐭𝐞𝐫 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora