1° - Destiny, la nueva Winchester(SPN Fanfic)

Capitulo 3

Destiny

Ha pasado un mes desde que llegamos a mi casa de Albuquerque, y me la he pasado de lo mejor. No ha habido nada sobrenatural a mi alrededor, pareciera que al llegar al lugar donde nací, todo se desvanecía y parecía normal.

Pero sabía que un día acabaría, puesto que cuando tiendo a tener algo bueno por presumir en mi miserable vida, algo pasa y lo derrumba. Todavía me quedaba un mes de vacaciones de las cuales quería disfrutar como nunca.

Aunque todo parecer normal, Josh sigue yendo con migo a todas partes, como de costumbre, pero eso no me molesta. Crowley ha estado de lleno en su trabajo y en este mes solo le visto como tres veces.

No me extraña que sea así, dura una temporada en el negocio y luego agarra vacaciones para pasarla conmigo y Josh. Y eso me hace demasiado feliz porque, después de todo, nadie creería que un demonio ha cuidado de mi como si fuera mi propio padre. Eso lo hace especial igual que a Josh.

Y hablando de Josh, está descubriendo que puedo hacer otras cosas aparte de lo que se supone que daba hacer. Y no era mi intención mostrarle. Pero estando cocinando se cortó un poco en la mano, y sé que los demonios curan por si solos, pero en un momento de torpeza al verle cuando ocurrió, corrí a ayudar y sucedió. Al tocarle la mano que tenía herida, una luz apareció en la mía y BAM!! Estaba curado. Me miro con asombro y preocupado a la vez, y no sé porque, pero después de rogarle como por unas tres horas le convencí de que no le contara nada a Crowley.

Dean

Un mes. Ya había pasado un mes desde que Cas nos contó que Crowley tenía una hija. Y aun no lo puedo creer porque es algo difícil de imaginar. Castiel regreso a Jericó y como lo sospechábamos ya no había nadie en esa casa y tendríamos que rastrearle de nuevo desde el principio y era un fastidio, porque sabía cubrirse. Y todo iba normal, por así decirlo, ya que en esta vida nada es normal. Pero luego tuvimos un caso de nido de vampiros, que nos costó un poco desaparecer de la faz de la tierra. Y al final, el alfa de los vampiros nos dejó pensando demasiadas cosas...

... - Córtale la cabeza de una buena vez – le dije a Sam ya un poco fastidiado, porque teníamos demasiado cansancio en sima -

– Puedes acabar con migo no hay problema en eso – ríe y con una sonrisa en su rostro continua – exterminas a los vampiros cazador, y ni siquiera te has dado cuenta de que la peor bestia esta en algún lugar no muy lejano de aquí -

- ¿A que te refieres? – pregunta Sam

- El híbrido tiene varios años entre nosotros, y nadie ha dado con el – ríe de nuevo – creo que es la peor cosa que una vez se pudo crear.

- ¿Y eso por qué? - pregunto

- Pronto lo descubrirás – fue lo único que dijo. Si, después de eso le corte el cuello al maldito degenerado, demasiada habla y nada de acción - ...

Después de ese incidente, más preguntas de las que ya teníamos en mente se instalaron en nuestras cabezas, y es que no era coincidencia que justo cuando sabíamos que Crowley tenía una hija, el vampiro dice que hay un híbrido entre nosotros. Y lo peor es no saber de qué clase de híbrido.

Destiny

Crowley estaba en el infierno y requirió de Josh para unos asuntos de los cuales ninguno de los dos quiso decir de qué se trataba. Así que me quede sola en la gran casa que me cargaba.

Escuche música por un largo rato en la mañana, y me aburrí. Le cambie a cada canal de la televisión, y me aburrí. Camine y jugué con mis nuevas mascotas del jardín: perros del infierno, y me aburrí. Aun no era ni el mediodía y ya me estaba muriendo del aburrimiento, no había más remedio que salir un rato forzosamente. Sé que Crow me matara, literalmente, cuando se entere, pero es una buena excusa la que me cargo entre manos. No pienso morir aburrida, soy demasiado joven para que me pase eso.

Abrí la gran reja de como unos cinco o seis metros de alto que estaba tapizada exageradamente de símbolos protectores. O es grave el asunto de "te quieren para algo" o es que Crow se está pasando de sobre protector, una de las dos. Al salir de ahí solo había un camino frente a mí. Lo demás era solo bosque, ¿y que creen? Me encanta la naturaleza, toma eso Crowley. Necesitaba explorar.

Camine por lo que me pareció unos veinte minutos al bosque de la derecha y me encontré con un pequeño arroyo. Por toda su orilla había flores de un color lila lindo y parecía un hermoso lugar para descansar y pensar. Y si, ahí estuve un largo rato, sin detenerme a pensar solamente en que tenía que irme antes de que Crow y Josh. Estaba feliz por mi poco espacio de paz, y estaba a punto de irme cuando me di cuenta porque, lo llegaba a sentir. Y me fui con cuidado para que el ángel que se suponía que estaba vigilándome no supiera que sabía que estaba hay.

Castiel

La estuve buscando por un mes. Un mes que se me hizo interminable. Después de que les contara a los chicos de la hija de Crowley. E igual que ellos no lo podían creer. Ella era hermosa como la más hermosa flor del más hermoso jardín y su alma tan pura como la más pura alma del más amable ángel que jamás se haya visto, ¿cómo era posible que fuera hija de un demonio? Era una pregunta sin respuesta por ahora.

Había regresado a Jericó al día siguiente de que llegue a verla, pero como era de esperar, ya no había nadie en esa casa. Busque en los hoteles y no encontré nada. Hasta que decidí ir a cada ciudad o pueblo cercano. Hasta que llegue a Albuquerque. Algo me decía que lo que buscaba estaba en ese lugar.

Y así fue como comprobé que mi instinto no me fallaba, estuve persiguiendo una esencia extraña por el bosque, hasta que la vi sentada en la orilla de un arroyo. Una extraña sensación se apodero de mí, empezaba a sentir cosas raras en mi estómago y una felicidad inexplicable. Todo era nuevo para mí. No quise interrumpir su tranquilidad por lo que me quede escondido entre los arboles observándola. Y pasaron horas, hasta que decidió irse y la seguí.

Sam

Algo raro estaba pasando en el mundo y no era el apocalipsis de eso estaba seguro. Todas las criaturas que cazábamos decían las mismas tonterías. Todos hablaban de una nueva criatura que podía acabar con el infierno, el cielo y la tierra en sí mismo. Pero eso eran mentiras, no había tal cosa.

Llegábamos al cuarto de hotel para comer algo cuando apareció Castiel en medio de la habitación.

- Hola Cas – saludo Dean

- Los encontré - dijo sin más. Pero debo decir que se veía raro o ¿diferente? -

- ¿Y en donde esta Crowley ahora? -

- Están en Albuquerque, Nuevo México.

- Vaya, quien lo hubiera pensado – dijo Dean con un poco de sarcasmo

- ¿Pasa algo? - pregunte

- Tengo una pregunta que hacerles – dijo muy serio el ángel

- De acuerdo – conteste

- Cuando vez a alguien y sientes algo raro en el estómago y sin ninguna razón aparente te sientes feliz...

- Para... - interrumpí – ¿porque preguntas eso?

- ¡O vaya! - dijo Dean riendo – creo que nuestro ángel está enamorado.