00:02

34 5 1
                                    

— Bienvenidos sean todos a esta noche tan bonita. — hablo la líder de los lobos mientras se encontraba encima de una tarima a la vista de todos los presentes.

— Es un placer para nosotros dar inicio a esta semana de Floración. Por favor disfruten y pásenla bien, no olviden dar sus rosas a sus omegas. — hablo el alfa sonriendo hacia los presentes y de fondo se escucharon ruidos artificiales. Dando inicio de aquel modo a la tan esperada floración.

Las cinco manadas estaban reunidas en el Jenuw, anfitriones de esta floración repartían pequeños ramilletes de rosas luego de que los líderes bajarán del escenario, la música estaba a un volumen moderado debido a que los gatos montes tenían un sensible oído.

Las floraciones eran muy esperadas por todos — al menos por la mayoría — Y es que aquella semana servía para muchas cosas. Los cortejos eran más grandes — más que nada para conseguir la atención de los desendientes líderes –, También estaba el hecho de agradecer a la luna por las prosperidades en el año y los nuevos enlazados solian presentarse ante todos en aquellas fiestas, por otro lado se usaba para agradecer las nuevas camadas de cachorros o en todo caso para pedir por ellas. Y lo más importante; era una manera de dejar en claro el pacto sellado de paz entre las manadas.

YoonGi amaba las floraciones, no porque pidiera algo de eso, ni porque le gustará que le cortejaran. Más que nada era porque le daba hermosos recuerdos de su infancia, además Siempre fue muy amante de las flores y se sentía tan bien comer dulces de jalea o algodón de azúcar.

Este mismo sonrió, viendo alrededor mientras que en sus manos portaba dos pequeños ramilletes de rosas– regalo de dos pequeños cachorros cría de la manada lobos–. ¿Como podía negarse? Claro que no lo haría, eran sólo unos bebés.

Diviso a su madre junto a su padre hablando con los líderes Jeon y suspiro notando a su pequeña hermanita con rostro neutro. No era para menos, la pequeña lisa se agobiada más rápido que hasta su propia madre, los únicos de la manada Min que nacieron con doble naturaleza habían sido Lisa y él. Él un Gato-Conejo mientra su pequeña hermanita Un Gato-Hánster. Estaba en su Naturaleza ser algo tímida, notó como su pequeña naricita se movía buscando un aroma conocido y luego como esos ojos grises lo miraron, le sonrió a lo que la pequeña puchereo mientras se acercó a paso tranquilo y notó como esta estiraba sus bracitos hacia el.

Lisa era muy pegado a él,  a tal punto que podían confundirse como su propia cachorra por la mezcla de aromas, la omega desprendia el olor de su madre junto a un olor habitual a leche materna además de su olor vainilla. Y todo debido a que fue la ayuda en el parto de su madre ya que su padre había estado de viaje a una reunión con los líderes del consejo justo el día del nacimiento de la pequeña bestia.

—¡Yogi!— el chillido de la omega lo hizo reír y llamar la atención de los líderes presentes.

—Joven Yoongi.— saludo Suhem dándole una sonrisa encantadora, esa omega era puro encanto. La mujer era digna de un Jeon, pero con ese matiz genético de los zorros, siempre tan encantadora e imponente. A Yoongi le aterraba cuando era un cachorro pero también le hacía sentir como en casa, con esa aura y mirada maternal que su madre poseía. Portaba un vestido color rosa pastel con detalles dorados y una enorme rosa en el pecho como símbolo de liderazgo. — hace tanto que no te veíamos cariño, estas muy grande.

— Líder Jeon.— hizo una reverencia a ambos líderes y estos rieron.

— Oh vamos Yoonie, te cambiamos los pañales.— el omega se sonrojo.— ¿Cómo haz estado?

— Bien.— el chillido de su hermana le llamó la atención y este la miro para tomarla en sus brazos. — la llevaré por agua de rosas, permiso.— y sonriendo se alejo de los líderes. Suspiro sintiéndose algo tenso, hacia mucho que no veia a los Jeon's, a los lideres en general, evitaba a toda costa las floraciones y las visitas a territorio Jeon.

♡ 𝐷𝑒𝑠𝑡𝑖𝑛𝑎𝑑𝑜 𝐴 𝑇𝑖 ♡ ( 𝐾𝑜𝑜𝑘𝑔𝑖 )  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora