2- Fugitivo (Adam Driver)

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-Narra rayis -

Caminaba por el monte, sin prisa ni rumbo, ya que no tengo a donde ir. Mis padres me abandonaron cuando era pequeña en el bosque, y lo único que tengo es una caperuza azul para cubrirme del frío y una lanza que me había fabricado para conseguir mi comida.

La noche se avecinaba, y aún no tenía nuevo refugio, ya que el anterior lo había destruido la tormenta. Suspiré y seguí caminando hasta un pequeño cúmulo de árboles, dónde hice una pequeña cabaña /estilo tipi/ algo improvisada.

Entonces escuché el sonido de un disparo, y me sobresalté. ¿Cazadores?! Hace años que no veo ninguno, o más bien escucho. Fui a ver ya que si me encontraba seguramente pensaría que soy un animal salvaje y me mataría.

- ¿Hola...? - pregunté algo asustada, no obtube respuesta, solo escuché el sonido metálico del arma -  Soy una persona... No dispare... -

- ¿Y como sé que no me entregarás a la policia? - dijo inseguro detrás de un árbol.

- ¿Policia? Sal de ahí, no te haré nada. - susurré quitándome la capucha de la caperuza.

- Más te vale, sino te volare los sesos. - amenazó saliendo de aquel arbol, era alto, de ojos oscuros y el pelo largo y rizoso.

- Confía en mi, ningun seso volará hoy excepto el del animal de la cena... ¿Me ayudas a cazarlo? - pregunté sonriente, el tipo se acercó y me miró fijamente.

- Vives sola en el bosque... Claro, te ayudaré. Si me dejas quedarme contigo. - extendió su mano y yo la estreché, formando un pacto.

- Ahora, dime tu nombre. - susurre sin querer soltar su cálida mano.

- Adam, Adam Driver.¿y tu? - preguntó de vuelta, sonreí tristemente.

- Soy Tn... Solo Tn. - solté finalmente su mano y me puse en camino hacia el refugio.

- Haré un fuego, tu ve a cazar. ¿Sabes disparar? - dijo Adam tendiendome su pistola.

- Si, no estoy tan desentendida. - me hice la indignada mientras recogía el arma y me retiraba hacia el bosque.

Aviste rápidamente a un ciervo despistado y le disparé, atinando a darle en la cabeza. Lo cargué y lo llevé al pequeño campamento, donde Adam aguardaba, iluminado por la luz tenue pero poderosa de la hoguera.

- ¿Lo has cazado tu solita así de rápido? Eres muy hábil mocosa. - empezó a decir él mientras me ayudaba a prepararlo para cenar.

(...)

Ya habían pasado unos meses desde que vivimos bajo el mismo techo, el es algo agresivo y sádico a veces pero ya estoy acostumbrada. También hace poco me di cuenta de que sentía algo por el, mas fuerte que cualquier otro sentimiento.

-Adam, ¿Donde te has metido? - pregunté desperezandome al no notar su presencia a mi lado. La pequeña cabaña se había convertido en un buen refugio, acogedor e impermeable.

- En el rio, ¿por qué? - gritó desde fuera, me rei y salí para verle semidesnudo bañandose en el agua cristalina y pura, estaba simplemente espectacular. Y el agua tampoco tenía mala pinta.

- Creía que me habías abandonado. - suspiré revelando mis inseguridades, tomando asiento cerca del flujo de agua.

- ¿Abandonarte? No creí que me apreciases tanto. - sonrió de lado mientras me salpicaba.

- Más de lo que imaginas - dije y me tiré de bomba con el.

- Eres una pequeña traviesa - susurró para luego salpicarme. Me agarré a su cuello entre risas y quedamos frente a frente, yo sibre el agua ya que Adam estaba enclinado sobre la misma.

-Eh... Esto es raro - susurre mirando esos preciosos pero fríos ojos oscuros que me habían cautivado.

- Solo si pretendes que lo sea. - contestó acercando nuestros rostros, pero a lo lejos se escuchó un disparo y nos sobresaltamos.

- Me han encontrado - volvió a hablar Adam, ahora nervioso.

- No te preocupes, huiremos. - susurré y tomé su mano, dirigiéndonos al lado contrario del que venia el disparo.

- ¿A donde? Vamos a abandonar el refugio... ¿Verdad? - habló con dificultad entre jadeos, pero yo no respondí, solo seguí el camino.

- TN! Suéltame... Si nos encuentran tu sufrirás las consecuencias de lo que yo hice... - Me gritó con algunas lágrimas en sus preciosos ojos. 

- Me da igual, no puede ser tan horrible lo que hiciste, ¿Cierto? - contesté al fin sin mirarle, solo no podía parar de huir. Le quiero demasiado como para perderle.

- ¡¿AH NO?! ¡¿TE PARECE POCO AYUDAR A ESCAPAR A UN ASESINO, VIOLADOR, PSICOPATA Y QUE PIENSA TODOS LOS DIAS EN TI DE FORMA SEXUAL?! Soy una persona más que horrible. Y antes... Era incluso famoso... - me confesó, haciéndome parar en seco, no pensé que fuese tan horrible.

- Adam... ¿Por qué no me lo dijiste antes? - pregunté en un susurro, confusa y asustada.

- Porque no quería perderte, yo... Yo te quiero. - murmuró avergonzado, algunas lágrimas caían de sus ojos.

- Yo... También te quiero... - sonreí débilmente, mirándole a los ojos.

-¿Incluso sabiendo que hice todo eso?- dudó con la voz quebrada.

- Si, Adam. Te amo...- dije antes de juntar nuestros labios en un suave beso, después del cual cogí un cristal roto del suelo y le corté el pelo con el, luego le manché la cara de barro y rasgué su ropa.

- Me gusta lo loca que estas, pero esto es un poco pasarse - bromeó con su típica sonrisa, y yo se la devolvi.

- Para que no te reconozcan. - murmuré algo distraída mirando sus ojos oscuros y profundos.

- Tn, vete... Me reunire contigo en el siguiente claro - me susurró acariciando mi mejilla suavemente.

- No.. Adam... Sabes que no me iré sin ti... - repliqué adoptando un rostro triste.

- Ya he hablado, haz lo que te pido por favor. - me tomó de las manos y nos besamos de nuevo, luego salí corriendo de aquel lugar con lágrimas en los ojos.

Esperé en el claro que me dijo, muy insegura y preocupada por Adam.

¿Sería ésta la última vez que le viese?

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One shots~ //Kylo Ren-Adam Driver//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora