Un juntos. [Kookmin]

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Por la mañana Jungkook lo lleva a sus clases con un vehículo a disposición de empleados sin ninguna mención incómoda durante el trayecto. Al contrario, Jimin actúa tan apático como él lo hizo todo este tiempo con su asexualidad. De cierta forma, su hermano puede compartir la comprensión ante situaciones que para otros serían totalmente anormales y es bueno descubrirlo.

La sorpresa llega el viernes cuando Jimin toca a su puerta un poco antes del mediodía.

- Hola hyung, ¿Podría quedarme hasta mañana? -había preguntado, explicando luego que el sábado tendría una entrevista de trabajo por aquí cerca y eso facilitaría sus horarios.

Claro que Jungkook accedió, sin embargo, Jimin tomó el sillón sin permitir que fuera de otra manera. Siempre tan minucioso.

Es cuando la hora de su turno llegó que no supo cómo despedirse. Un "nos vemos más tarde" sería mentira, "hasta mañana" demasiado predecible y "estaré en el motel" suficiente informativo. Por lo que, tomando su papel de anfitrión y hermano mayor siguió ese camino:

- Llámame si ocurre algo.

Jimin asintió con una pequeña sonrisa desde la cocina y fue suficiente para Kook.

Los clientes de hoy son como de costumbre, pero aún con la primera locura de la noche (un cuarteto) se siente aburrido.

En los primeros tiempos tuvo muchas preguntas por parte de Yoongi, pero una siempre destacó. "¿Qué sentía ver sexo sin quererlo?" y Jungkook respondería a la par de "absolutamente nada". No había excitación, asco, curiosidad o el más mínimo estímulo natural.

Entonces, cuando ese sentimiento soso llega a él, se sorprende bastante, pero entonces también recuerda todas las emociones que meditó después de su ayuda con el masaje prostático en Jimin y no le gusta. ¿Es eso? ¿Su hermano logró dejar una impresión tan fuerte que sus nuevos clientes no podrán superar?

A decir verdad, sus preguntas tienen motivos sólidos.

A la madrugada llega su receso de veinte minutos y cuando, por lo general, sale al patio a tomar aire fresco. El lugar está ambientado con palmeras exóticas y enredaderas que rodean una piscina y tientan a cualquier cliente en días calurosos, pero hoy es una noche fría y el lugar está vacío y perfecto para tomar asiento en una de las sillas playeras.

Ser un hombre vivo y mantener desinterés en una de las actividades más consumistas de energía cobra lo suyo. Debe gastar esos ánimos en actividades tales como ejercicios o proyectos de larga duración, lo que trabajando dentro de una habitación no logrará.

Quitándose la máscara, masajea su cien y por primera vez en muchas noches desea estar en otro lugar.

Sin ningún propósito principal toma su celular, pero luego piensa en Jimin. Se pregunta si dormiría, si el sofá le estará dando buenos sueños o si, quizás, habría decidido entretenerse con una película y cuando nota su error es tarde porque ya lo está llamando con una entrevista importante a horas.

- ¿Hyung?

Oh, oh, Jimin contesta al tercer tono.

- ¿No dormías? -su curiosidad gana.

- Salía de una ducha.

- ¿A las dos de mañana? -otro error cuando no debería importarle las horas en que su hermano desea tomar un baño- Perdón por la hora -expone de prisa-, pero sabes que no volveré en toda la noche y... - su cambio de tema no es mentira porque ha estado pensándolo desde su almuerzo juntos- Puedes dormir en mi cama. No -se corrige- Me gustaría que lo hagas, me sentiría un mejor anfitrión -hasta que la risa del rubio no llega, Jungkook no puede relajarse totalmente en la silla.