Capitulo 2

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Sigo detallando la pared, suspiro y giro mi cabeza hacia la izquierda

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Sigo detallando la pared, suspiro y giro mi cabeza hacia la izquierda. Sonrio de lado.

Soy tan buena que lo dejo exhausto.

No mentira, tiene un poco de magia. El me deja exhausta.

Me siento y me quejo al sentir dolor en mis caderas, al igual que mi cintura. Apoyo mi cabeza en el respaldo y cierro los ojos.

Maldición, soy tan masoquista que quiero que vuelva a hacerlo con la misma brusquedad. Pero no, tengo que salir de aqui.

Aun estoy algo sorprendida porque me atrapó, por primera vez logró alcanzarme en el aeropuerto. Pero bueno, de los errores se aprenden.

Me levanto de la cama y luego de encontrar mi vestido, me lo coloco.

Estoy tranquila porque se que no despertara, aproveche esta situación para distraerlo y dormirlo del todo. Pero suponiendo que es un Alfa, no durara mucho.

Me dirijo a mi bolso y tomo mi telefono. Marco el numero de Nicolas, mientras miro mis uñas.

— Señora.

— ¿Los aviones ya funcionan?— Busco mis zapatos

— Me temo que no, señora.— Bufo y le doy una mala mirada, al lobo dormido

— Bien. Consigueme un micro o robale un jet a mi hermano, pero sacame de aqui.— Casi gruño, terminando de colocarme los zapatos

— De acuerdo, señora. ¿La espero en la frontera?— Acomodo mi cabello

— Como siempre.

Corto la llamada y miro al lobo unos segundos. Me esta empezando a dar un poco de lastima, el creia que ya me tenia.

Sonrio y camino hacia la puerta.

Para que mentir, me encanta cuando eso sucede.

Es lindo, atractivo, y folla bien. Pero no puedo estar atada a alguien, esta en mi naturaleza.

Ya te superara.

Me aseguro de ser silenciosa al caminar hacia la puerta, la abro y miro hacia todos lados. No hay nadie, bien.

Salgo y a puntitas camino por el pasillo. Es extraño que no haya uno de esos hombres vigilando. Parecen ogros.

— ¿Señora?— Me detengo, cuando una de las de servicio cruza el pasillo— ¿Qué hace despierta?

Me coloco derecha, mientras sonrio.

—Tenia hambre.— Me encojo de hombros — Ya sabes, sexo.— Levanta las cejas y sonrie, algo incomoda — Ire a la cocina. Oh, ¿quieres acompañarme y te cuento los detalles?— Ladeo la cabeza

— Bueno, de verdad me gustaría, señora. Pero tengo que limpiar el cuarto de huéspedes.— Frota sus manos

— Lo entiendo.— Le resto importancia, aun sonriendole. Sonrie una vez mas y luego se aleja, pasando por mi lado

Señora del Alfa (ACTUALIZACIONES LENTAS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora