Entro en la habitación que me asignaron. No hay nadie aun, así que la miro detenidamente. Es pequeña-lo que me parece raro- suficiente como que para dos personas entren un poco apretadas. Pero para mi esta bien, aquí solo dormiré.
Dejo caer mi bolso y mi valija al costado de la cama y me tiro sobre ella. El viaje fue demasiado largo para mi gusto y no pude dormir demasiado ya que como tenía detrás de mí a Julián y a Franck me molestaban. Christian sólo me hablaba y me contaba algunas cosas de Francia, ya que el ya vino muchas veces aquí.
Saco mi celular y veo la hora. 8:30 am. Aprieto la pantalla para desbloquearlo y aparece una foto graciosa de Julián como fondo de pantalla. Sonrío. Es un pesado, pero lo quiero igual.
Cuando estaba por guardar mi celular, la puerta se abre y una chica de cabello negro hasta la cintura, piel blanca con pecas y ojos celestes entra.
-Hola, soy Katy.-me dice con una sonrisa. Deja caer sus cosas al costado de donde se encuentra.
-Hola-le devuelvo la sonrisa. Parece ser buena chica-Soy…
-Amelie Wealey. Ya lo sé. De hecho, todo el colegio lo sabe. Se rumorea que el bombón de Julián Zanclett rompió con la zorrita de Aylen por tu culpa.
Hago una sonrisa estúpida.
-¿De verdad?-Katy me mira extrañada.
-Si… ¿Un momento es cierto que rompió con ella por ti?
-No, claro que no.-Digo mientras me pongo seria.
-Lo que tu digas, me voy a dar un baño. El viaje me agoto y quiero estar relajada para la excursión. ¡Nos vemos!
Cuando ella abre la puerta hay un chico parado ahí, a punto de tocar.
-Hablando de Roma.
-Literalmente estamos en Paris Katy-responde el estúpido de Zanclett. Katy se hace un lado para que pase y mientras rueda los ojos.
-Lo que sea. Me voy, hablen de su amorío en privado.
Ambos soltamos una carcajada al mismo tiempo.
-¿Ven a lo que me refiero? Hasta están coordinados.
Me sonrojo. Julián se acerca y se sienta en mi casa, demasiado cerca de mi.
-¿Por qué saliste corriendo de esa forma?
-¿Cómo rayos encontraste mi habitación Julián?-el sonríe de costado.
-Yo hice primero la pregunta.
-Mmm…no lo se, ¿Tal vez porque todos nos miraban?
-¿Y? ¿Desde cuando te importa que la gente te mire? Todo el mundo nos mira todo el tiempo. Es porque somos hermosos-me sonríe ampliamente.
-Me pareció mas intenso que otras veces. Aparte, ¿Qué rayos le haz dicho a Aylen?-el se encoje de hombros y se queda en silencio. Mirando la habitación.
Agarro mi celular nuevamente y pienso en poner la foto graciosa de Julián en su contacto. Pro otro número me da una idea.
-Mis padres. Puedo visitarlos, ellos ya están aquí en Paris.
-Pues llámalos.
-Eso hago.
-No, no lo haces. Estas hablando conmigo y me miras. De hecho, me miras mucho últimamente.-me pongo tan roja como un tomate y maco el numero de mi madre.
-Hola querida-su voz es entrecortada, como sin aire-¿Cómo estas?
-Bien mamá. Podrás comprobarlo por ti misma. Estoy en Paris. ¿Cuándo podemos encontrarnos?
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Horrible coincidencia.
Novela Juvenil-Conocerte fue mi peor error, pero de los errores salen cosas buenas. Ya que me hiciste ver la mierda que era mi vida, y ahora pude arreglarlo, comenzar de nuevo. Y créeme tu estas incluido. Esta no es una típica historia de amor. Así que si buscas...
