Dinastia: Los Leones Del Desierto...

El Sha regresa.

El poderoso Sha Peroz asesino a su propio hermano en batalla, un ataque envolvente debió ser el final, el.debía haber muerto asesinado con sus hombres,  pero se levantó y lanzó a miles de sus hombres en una carga suicida, atraveso lineas y lineas defensivas con una espada en cada mano seguido de su guardia personal aplastando a cualquiera qu se interpusiera entre el y su hermano, luego de que sus hombres se unieran en la demencial carga, llegaron ante su hermano.

Pero antes asesino a todos los que se pusieron en su camino, varios guardias de elite que destrozo con sus espadas, el era fuerza pura, sus manos no se detenian y mataba izquierda o derecha, su hermano lo miro en esos ojos llenos de terror, los mismos de cuando alguna ves pelearon uno contra otro en un duelo de espadas de madera en su infancia, el traidor intento huir con su caballo pero el no permitiria eso, lanzo su espada hacia el caballo, las 2 piernas del majestuoso corcel se encontraban en el suelo, el jinete caido en el suelo y se acerco lentamente, sus hombres mataban todo lo que encontraban en su camino.

Se acerco paso a paso ante su hermano que intentaba levantarse aunque un genio tactico no tenia la fuerza y el poder brutal de su hermano Peroz, que se acerco paso a paso, degustando el momento, un hermoso momento para aniquilar a un hombre que se llevo una parte del Imperio que legitimamente le pertenecia.

Tomo al traidor del cuello, alzandolo para verlo cara a cara, lo levanto observo el horror y el temor de su hermano, que intento escapar de su mano, se agitaba y miraba alrededor buscando hombres pero ahora todos tenian sus batallas personales, se miraron a los ojos.

-Perdoname hermano...- fueron sus ultimas palabras antes que la espada le atravesara el estomago y luego alzo al hombre agonizante hacia el cielo, era tan facil para su increible poder herculeo, una ves viendo a su agonizante Kan los hombres de su hermano comenzaron a perder cohesiòn y lanzarse en la huida desesperada, esto era la victoria, un territorio muy rico entraba de nuevo a su poder.

Los soldados enemigos se rindieron y sus hombres pudieron lanzar ataques de conquista, en realidad entradas triunfales en varias ciudades que se rindieron, muchas juraron lealtad y otras prefirieron huir al norte, unas màs fueron masacradas y destruidas, los ejercitos de Peroz ponian las banderas y el poder de Persia en todo este Khanato y la cabeza de su lider traidor cortada y recubierta en brea, y puesta ante la vista de todos junto con sus oficiales y comandantes màs cercanos, esto era un recuerdo de que el Imperio Persa era implacable.

Peroz se detuvo en la capital de Qarajanidad, en Bujara, sus hombres se lanzaron en rapiña, quemando, asesinados y destruyendo todo, los templos chamanicos del norte, destruidos para regresar a las viejas costumbres imperiales de la adoracion a los Dioses de Pars, cada m de Bujara tenia sangre, tenia muertos y se extendian los lamentos, mujeres violadas, niños en el suelo incapaces de màs acciòn, hombres asesinados o mirando impotente el destino de su familia, los soldados saqueando a placer y los oficiales observando con calma el castigo de una naciòn que nunca debio revelarse, por supuesto Peroz no era tonto, habia familias que mantenian largas tradiciones comerciantes con el Imperio Qin  las perdono pero ejecuto familiares suyos y en otros casos exigio rehenes.

Por supuesto las hijas de nobles y comerciantes que recibieron el beneplacito de la piedad, entregaron sus hijas  a Peroz, que no dudo en tomar como suyas a las màs hermosas, violo a cada una de ellas claro las màs asustadas, despues las chicas sabiendo que no podrian escapar de su destino se acercaron a el dispuestas a todo, y mucho màs dispuestas que quedo claro que el era el poderoso Sha de Persia.

Las chicas se tomaban su tiempo, pero el estaba cansado, eran tan exigentes como las chicas de su harem, compitiendo y tratando de ser la unica, harto señalo a las siguientes 2.

-Haganlo entre las 2- una y luego la otra intentaron meter la cosa gigante de su señor, pero les fue imposible, al final optaron por usar sus lenguas de arriba a abajo.