𝕲𝖆𝖙𝖆 𝖆𝖑𝖎𝖊𝖓𝖎𝖌𝖊𝖓𝖆. | Gohan.

Capítulo 17.

Gata alienígena.

Capítulo 17.

Hoy presentamos...

"Gobierno"

—¡No pienso ser tu mascota! —Gritó con ira contenida— ¡No! ¡No lo voy hacer! —Se levantó sobre sus piernas para después acercarse muy molesto hacia la felina pero al instante recibe una descarga eléctrica que le hace gritar de dolor por lo intenso que es. Una vez que termina cae sobre sus rodillas para después caer boca abajo en el suelo.

—¿Ahora entiendes por qué debes obedecerme? Soy tu reina.

No entiendo donde se encontraba sus amigos. Su padre, el Sr. Vegeta, Trunks, su madre, Goten, el Sr. Piccoro... ¿Donde estan? ¿Que hicieron esos gatos? ¡Ellos no son nada comparados a los guerreros!

—¿Do-dónde está mi padre? —Alzó con dificultad su rostro para poder ver las patas de la peliazul— ¿Donde esta... Mi familia?

—Están bien. No te preocupes por ellos, están muy felices teniendo un profundo y largo sueño.

—¡¿L-los has matado?! —Pregunto muy exaltado sintiendo como la ira recorre su cuerpo entumecido.

—¿Que? Nunca mancharia las patas de mis soldados en hacer algo así. Solo están dormidos, ¿Acaso no te lo dije? —Suspiro intentando mantener la paciencia intacta— Tengo que bañarte, han pasado dos meses desde que estuviste dormido.

—¡¿Do-dos meses?! ¡¿Por que me has dormido tanto tiempo?! —Intenta levantarse cosa que logra pero de manera muy lenta ya que aun sentía su cuerpo muy extraño.

—Los collares al estar en funcionamiento drena toda tu energía y alrededor de dos meses regresa, pero sigues sin poder utilizar tus poderes extraños. Solo eres un humano ordinario. Ven...

Le desabrochó la correa desconcertando al ex-investigador, ¿Le tenía tanta confianza como para dejarlo 'suelto'?

Al abrir la puerta del baño esperaba que Gohan entrara sin embargo no paso irritando ligeramente a la muchacha.

—¿Que esperas?

—No me vas a bañar, no me vas a tocar, ni me vas a ver... Estoy muy furioso contigo. Me utilizaste haciéndote pasar por Videl cuando me podrías haber dicho: "No soy ella" pero claro poco te importa, ¿Cierto? Por tu gente, todo era un plan bien elaborado.

No dijo nada al respecto, solo lo observaba en silencio hasta que su expresión cambió a uno de sorpresa al ver las lágrimas salir de sus ojos.

—Todo... Todo lo que te di... Te brinde un calor familiar junto con Pan, te di cariño, mimos y demás y a ti solo te valio mierda. ¿Cierto? Pe-pero, ¿Sabes? —Alzó su rostro con una sonrisa aun derramando lágrimas— Te agradezco que no le hayas hecho algo malo a Pan. Haz lo que quieras conmigo pero por favor a ella no le hagas daño, es solo una bebe.

Cerró sus ojos como si estuviera meditando lo que ese azabache le había hablado de manera sincera. Al abrir sus zafiros dijo lo siguiente— Yo nunca lastimaría a una pequeña cría inocente. Si no lo hice antes menos lo hare ahora que soy una reina. Vamos a bañarte.

Se acerco para depositar su mano en la cabellera negra y acariciarla pero el de cicatrices aparto su cabeza rápidamente para después retroceder.

—¡Déjame! —Se alejo de ella secándose las lágrimas— ¡Aunque sea dame algo de ropa! ¡Odio estar asi!

La de orejas de gato suspira cansada. Para complacerlo hace lo que él pide para que no este a su ofensiva. Pensando seriamente sabía que este muchacho no se abriria mas a ella a no ser que haga algo al respecto, tal vez drogarlo sin que se cuenta, incitarlo u otra cosa.