Theria Volumen 7: El torneo de Virelia

Duelo de prueba.

(¡Hola! ¡Feliz San Valentin!)

 (Por cierto aviso que el volumen 2 de Theria ya está disponible, aunque solo en Amazon.com. Pero la versión Kindle ya esta en todos los otros países. Ahora sí, disfruten el capitulo)

Aria

El coliseo mayor, ahí es donde en algunas semanas se celebrarían las finales del torneo, mientras tanto estaría cerrado. Exceptuando por esa ocasión, pues se celebraban los duelos de exposición que abrirían el torneo de forma especial.

El edificio era el más grande que hubiese visto jamás, más aun que la academia de caballero. Era redondo y por dentro se encontraba una arena rodeada de filas de cientos o incluso miles de asientos de piedra, que iban ascendiendo conforme avanzaban sus treinta filas de alto.

—¡Es increíble! —se admiró Minerva una vez ingresamos dentro de la arena.

Ahí se encontraba un maestro de ceremonias sobre un pequeño podio de madera, colocado ahí solo por ese momento. Tras él, en la primera fila se podían observar a los jueces, entre los que estaban dos de los dieciséis de Virelia: Zonya y Xartos.

—¡Estamos aquí reunidos para que den comienzo las festividades! —gritó el maestro de ceremonias desde elpodio—. Mañana comenzará el torneo real, las reglas les serán dadas en sus habitaciones más tarde, mientras tanto hoy empezaremos con un duelo de exhibición. ¿A qué me refiero con esto?

"Tres duelos. Una persona al azar será escogida entre todos los que estén en la plaza, ya sea acompañantes, público o participantes y esa persona tendrá derecho a retar a alguien más, quien sea. O también puede declinar, aunque no sé quién haría eso...

Esto era lo que esperaba y en mi mente ya estaba haciendo una estrategia para vencer a ese tipo tan arrogante que era Asmodeus.

—¡Ahora los que no deseen participar por nada del mundo y los menores de dieciocho hagan el favor de subir a las gradas! ¡El resto, prepárense!

—¿Menor de dieciocho? —dijo minerva, extrañada—. ¿Por qué?

—Es una regla nueva impuesta por Xartos —le respondí—. No tengo idea de porqué.

Pero sin duda era algo que no hacia felices a los que se tenían que retirar, pues lo hacían enojados, muchos de ellos con edades de entre quince y dieciséis. Pero en realidad era extraño, pues antes se dejaba participar desde los doce años, cosa que había cambiado en años recientes, más concretamente cuando Xartos se hizo con el control completo de Virelia.

Otra de las reglas que fueron cambiadas para ese año era que los títulos nobiliarios ya no eran dados a los miembros de los dieciséis, se consideraba que con el título era suficiente, ya si un rey quería dárselo a su ganador era otra cosa.

—¡Muy bien! —gritó de pronto el maestro de ceremonias—¡Empecemos con este show!.

De una de las puertas laterales del coliseo salieron tres mujeres cargando una pequeña caja de madrea cada una, que luego dejaron justo enfrente del maestro de ceremonias.

—¡Ahora n estas cajas criaturas mágicas conocidas como caliens! ¡Son pequeños aun, así que no deben preocuparse por ellos! ¡Estas criaturas cuentas con una habilidad especial que es transportarse a un área cercana y están entrenados para hacerlo sobre personas que estén en esta zona, las primeras tres que sean escogidos por ellos ganaran el concurso!

Todo era cuestión de suerte, pero mi suerte era buena, o al menos lo era lo suficiente para mantenerme viva en mi línea de trabajo.

—¡Aquí vamos! ¡1, 2 y 3!