No fue casualidad

Capitulo 4 Sueños...

"...Has venido a levantarme...iluminando mi camino en medio de la oscuridad....trayendo alas donde aprendí a volar...para tener esperanzas para mi futuro..."

"Que difícil fue seguir siempre hacia adelante, cuando tanto de mis recuerdos me atan a un pasado tan tortuoso que se hace tan difícil vivir.

Algunas cosas se van, pero el corazón no olvida, haciendo que muchas veces sienta que no hay salida, dejando ese vacío que insiste que no existe un motivo por el cual vivir, fue hasta que tu calidez volvió a enviarme a un mundo de magia, creando sueños donde sigo anhelante el sonido de tu voz, esa sonrisa que me hizo sentir que puedo ir mas allá, ahora se que es por ti, llegaste en el momento justo, para decirme con tu silencio que el cielo puede esperar."

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Por favor, no— suplicaba en un oscuro rincón.

—Va a gustarte, te lo aseguro— le decía el chico tocándola mas de la cuenta —Hinata...— su respiración empezaba a cortarse por la excitación— Me vuelves loco, cada vez que entras por esa puerta me haces perder la cordura, han pasado días desde que desee poseer tu piel— le susurraba tan seductor que la hacia tiritar, desvaneciendo lentamente cualquier rastro de cordura en ella.

Hinata deliraba nerviosa entre los brazos del Hokage, al entrar a la oficina no se esperaba ser recibida de esa forma tan abrumadora, el la beso desde que cerro la puerta, aprisionándola con su cuerpo contra la pared, todo fue tan rápido que ni siquiera logro detener nada, para su mala suerte esas caricias y besos en su piel, empezaban a provocar una reacción nueva en su cuerpo, quería mas, pero se avergonzaba por lo que sentía.

Su piel se crispo al sentir las manos del Hokage sobre la suya, entre besos no supo en que momento el le desato el Obi, para deslizar las manos bajo la blusa y acariciarle la espalda, empezaba a remover su cuerpo bajo la imponente figura del hombre que en segundos logro seducirla y someterla a su voluntad.

—Por favor...— suplicaba con dificultad, la locura del momento estaba acabando con ella

Un gemido salio de su boca sorprendiéndola ante la experiencia de sentir las manos inquietas de él acariciarla sobre la prenda entre sus piernas.

El se separo un poco, dejando a la vista su torso muy bien trabajado, cubierto solo por ese sombrero que lo acreditaba como el Hokage, trago en seco, deseando poder tocarlo. Una ladina sonrisa se dibujo en el rostro de él, era cuestión de tiempo, para que ella estuviese gritando y gimiendo su nombre y ella también era consiente de ello.

Como un cazador a su presa el se posiciono sobre ella, devorándola con la mirada, haciéndola estremecer con tan solo el roce de su cálido aliento sobre esa blanca piel que empezaba a desear ser devorada con vehemencia.

...Ring... sonó la alarma, haciéndola sobresaltarse y casi saltar de su cama.

¿Que había sido eso? Toco su pecho sintiendo como latía con fuerza, seguía nerviosa, aquello fue solo un sueño.

¡Debo estar loca! Se dijo a si misma, al darse cuenta de la humedad entre sus piernas, asustada por ese extraño sueño, el cual aun seguía sin entender el porque, se bajo a prisa para ducharse, ella era una señorita con buena educación, era algo casi imperdonable que experimentara esa clase de sueños ¿Es algo que les pasa solo a los chicos? Se preguntaba, sintiéndose sucia, pero el haber sido ese sueño con el Hokage le avergonzaba aun mas.

—Definitivamente, leer ese libro fue muy mala idea... ahora mi mente me traiciona con esa clase de sueños— se reprendía al verse en el espejo.

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