Afraid (WooSan)

XIV

San finalmente llegó a la casa de sus padres, luego de calmarse claro, ya que no quería que se preocuparan por el, les dijo solamente que los extrañaba y que quería estar con ellos unos días, ellos claramente le dijeron que no había problema y lo invitaron a que cene pero San prefirió irse a su cuarto.

Al cerrar la puerta, cayó rendido tras esta, comenzó a desahogarse, a botar ese sentimiento de mierda, esa congoja, esa pena, ese dolor que le había causado quien para él, era el amor de su vida, comenzó a llorar tan intensamente que comenzó a tener problemas para respirar pero no le importó, ojalá se muriera en ese instante para no tener que vivir ese dolor tan espantoso, pensó.

Comenzó a apretar su pecho con sus manos, pensando que de ésta forma el dolor disminuiría, claramente no fue así, sólo el pensar en Wooyoung, hacía que la punzada apareciera con más fuerza.

San empezó a recordar todos sus momentos con Wooyoung pero más en su sonrisa, en sus labios, en sus ojos que lo observaban todos los días con tanto cariño, que no podía creer lo que le había hecho, que le había mentido, que esos ojos no eran sinceros, que sus caricias no eran ciertas, que quizás hacía todo eso imaginándose a otra persona.

San había tenido un día pesadisimo por lo que entre llantos y sin darse cuenta, cayo dormido al suelo, en forma fetal.

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Wooyoung por su parte no había podido parar de llorar, sabía que había dañado a San, sabía que quizás no lo perdone pero necesitaba explicarle por qué no le contó antes, aunque sonara a excusa, el quería decirle que nunca pretendió nada, que San le enseñó que el amor no tiene género, que sólo hay que entregarse, él quería estar con San hasta el final pero la impotencia de que este último no le dirijiera la palabra nunca más, le partía el corazón.

Pero sabía que se merecía este sufrimiento, después de todo, mentir en este tipo de temas es de lo peor, era su karma, aún así jamás pensó que dolería de esta manera.

Wooyoung no detuvo sus lágrimas y el gran arrepentimiento que sentía, hasta que salió de nuevo el sol, siendo que el se podía quedar dormido en cualquier lugar, el sólo pensamiento de San sufriendo, hacía que sus ojos llenos de lágrimas mirarán al techo de su cuarto, el lado de la cama que estaba vacío y sentir el olor que estaba impregnado en esta.
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* 5 días más tarde*

- Oye, San, ¿qué le pasa a Wooyoung?. Preguntó Seonghwa.

- ¿Por qué?

- ¿por qué? Porque no ha venido a comer como en una semana, ni a ensayar, ni a nada, ¿está enfermo?

- ... ¿Por qué debería saber?. Preguntó un San que trataba de ocultar sus sentimientos.

-... Son compañeros de cuarto ¿no?

- He estado con mis padres, no sé la verdad, y no me interesa.

- ... Ok. Respondió un extrañado Seonghwa.

Así San dejó la mesa de sus compañeros, y fue a los baños, cerró la puerta y trató de calmarse. -¿qué mierda te pasa Wooyoung?. Se preguntó a si mismo pero no iría hasta mañana a la habitación a  buscar sus cosas, para irse con otro miembro.

No podía negar que estaba preocupado pero sólo se lavó el rostro, tomó un poco de agua y salió como si nada.

- Oye, San, ¿qué te parece si vamos al centro, hoy? Sólo tu y yo. Le preguntó un animado Hongjoong.

- Mm, no lo sé Hyung, no tengo muchas ganas. Dijo San un tanto deprimido.

- Oh, vamos no seas así con tu hyung que te quiere tanto, ¿si?. Pidió Hongjoong con un poco de aegyo.