➳ᶠᵃᶰᵍᵇᶤˡˡ ϟ ❝Aмηєѕια❞

︙ஓீ͜͜͡͡ ✎...Ｔｈｒｅｅ

Ya había pasado una semana, a Bill ya le habían dado de alta y estaba descansando en casa. Tenía la ventana abierta al igual que las cortinas para ventilar su habitación, el pelirrojo se encontraba recostado en su cama durmiendo pacíficamente, pero aquella paz se vería interrumpida cuando Fangbone entró de golpe por la ventana, aterrizando en el suelo y luego despertar al que dormía, a pesar de ser las cinco de la mañana y ni siquiera el sol había salido.

- ¿¡Ah!? ¿¡Que te pasa!? ¿¡Porque entras así!? -Gritó Bill, aterrado al ver al azabache en su habitación, por el susto, sintió una fuerte punzada en su cabeza, se volvió a recostar, luego de aquel dolor.

- Siempre entré así, Bill, además, es hora de que te despiertes... - Dijo, acercándose al contrario, tranquilo, como si eso fuera algo cotidiano.

-Ni siquiera a salido el sol y el doctor dijo que debía descansar bien... Y no tener sustos fuertes...-Le respondió, con seriedad, abriendo los ojos para mirar al bárbaro que estaba frente suyo en ese instante.

-Uh... Lo siento... -Se disculpó, sintiéndose levemente apenado, ladeando su sonrisa mientras mostraba sus curiosos dientes, Bill solo rodó los ojos y volvió a descansar, esperando que cuando vuelva a despertar ese bárbaro ya no esté ahí

Pasaron un par de horas y el pelirrojo despertó, lo primero que vio fue a Fangbone, quién aún estaba presente en su habitación, husmeando entre la ropa del closet del pelirrojo.- ¿¡Que estás haciendo!?- Exclamó Bill, levantándose rápidamente, algo alterado, alejando al contrario de su ropa.

-Estaba buscando algunas Footos nuestras, también algunos trofeos que te regalé.–Respondió, con calma, sin insistir en seguir buscando ahí.

- Escucha, Fangbone ¿No?. Estás conmigo casi todo el día, todos los días; por favor, un día ¿podrías dejarme descansar tranquilo, sin tu compañía?.- Dijo, de una forma directa, para que aquel bárbaro comprendiera.

-Yo...Solo quiero ayudarte a recordar...–La mirada de Fangbone empezaba a dejar de brillar, al parecer el comentario del pelirrojo le había dolido.

- Tal vez quisiera no recordar, ni siquiera me agradas ¿Que querría recordar de ti?. -Atacó el pelirrojo, usando su dedo índice para apoyarla en el pecho del azabache, como queriendo empujarlo con este. Por el estrés de aquel momento, volvió aquella punzada en su lóbulo temporal, debilitando y cayendo sobre Fangbone, este último por suerte pudo sostenerlo y así no se lastime.

-Bill... No tienes que estrésarte tanto...–Recomendó el azabache, levantándolo para llevarlo a la cama y recostándolo en ésta.

-Esto fue tu culpa.-Acusó, recostándose, apoyando su cabeza en la almohada.- Si no estuvieras aquí no estaría con este dolor...- Dijo, dándole la espalda en ese momento, ese no era el Bill que Fangbone conocía, está claro.- Vete, quiero descansar... Y no te vallas por la ventana.- Avisó, cerrando los ojos.

El azabache soltó un pesado suspiro y abrió la puerta, cerrándola tras de sí cuando salió de la habitación del pelirrojo, sin darse cuenta frente a él estaba la señora Goodwin.- ¿Fangbone? ¿estabas aquí? ¿Cuando llegaste? ¿Entraste por la ventana otra vez? Oí gritar a Bill ¿Que pasó?- Preguntó la mujer de la familia, mientras tenía un pequeño platito con waffles y un vaso con jugo de naranja, el desayuno para el pelirrojo.

-Bill está bien, se alteró porque entré sin avisar... -Respondió, un poco decaído.

-¿Estás bien? Te noto un poco triste...-Dijo la mayor, poniéndose de rodillas para poder ver a los ojos al azabache, Fangbone sentía una leve opresión en su pecho, quería decirle lo que pasó.

-... Quizá... Yo no soy de ayuda en hacer que Bill recupere sus recuerdos...-Comentó, con la mirada baja, negando rotundamente las ganas de llorar, no era el momento.

- ¿Que dices? Siempre están juntos, además, en este momento Bill te necesita más que nunca, tu lo conoces casi como tanto como yo, no dejes que ese pensamiento te haga sentir mal... ¿Bien?-Le dijo, con un tono maternal, acariciando su mejilla, logrando que Fangbone sonriera con cariño.-Ven, voy a entregarle el desayuno a Bill, podrías acompañarme.-Aun sabiendo que él acababa de salir de ahí, sabía que Fangbone con gusto aceptaría volver a entrar, y así fue.-Bill, tu desayuno está listo.-Dijo sonriendo la pelirroja, dejando la comida en la mesa de noche a lado de la cama.

-¿Mm? Está bien, gracias...-Dijo, sonriendo levemente, sentándose en la cama para comer hasta que vio a Fangbone.- Había dicho que me dejes descansar.-lo miró con seriedad, hiriendo al azabache, la señora Goodwin al notar aquella actitud no dudó en regañar a su hijo.- Bill, no está bien que digas eso; él es tu mejor amigo y solo quiere hacerte compañía y ayudarte.

-Hace rato estuvo removiendo mi ropa.- Refutó, con seriedad.- y... Y él... Me irrita, siempre hablando de su mundo ficticio y no me deja de hablar desde que llega hasta que se va.-Reclamó, cruzándose de brazos.

-Bill, estás—

-Señora mamá de Bill, él tiene razón, nunca lo dejo en paz, y siempre termina con dolor en su masa pensante...-Dijo el azabache, saliendo de la habitación, sin decir a donde.

-... Bill, luego hablaremos de esto, desayuna y luego me ayudarás con los deberes, no todo el día estarás aquí.-Dijo la mujer y salió de la habitación.

Bill soltó un pesado suspiro y empezó a desayunar, hoy quizá iba a ser un día muy largo.
Y así fue, un día largo y aburrido, sin la compañía del azabache, Bill volvió a dormir, empezando a tener otro sueño.

Se encontraba en un salón lleno de espejos, pero todos estaban rotos exceptuando uno. Se acercó a ese espejo, con una leve curiosidad, se oían ecos, voces familiares.
Apenas llegó al espejo, sintió una leve opresión en su corazón, podía ver un paisaje, rojizo, tres soles, aquel paisaje le era familiar.
Se vio a si mismo, hablando con el azabache en un autobús, no podía oír nada de lo que decían, pero sentía que era algo muy hiriente, sentía tristeza por si mismo.

Aquel sueño no duró mucho, repentinamente despertó, algo agitado y parecía que inconscientemente había derramado algunas lágrimas.

-¿Qué me está pasando?... ¿Estaré recordando...?-

꧁ Fιи dεl cαριтυlσ 3 ꧂

MarcoBONkun.