Like me🏹Roger Taylor¹. AU

Capítulo 7.

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Jennifer terminó su exámenes finales, finalizó su segundo año, su profesor de Anatomía humana mencionó que si seguía con su actual promedio podría graduarse el próximo año. Ella estaba muy emocionada. Su profesor favorito le había dicho eso.

-Te daré una recomendación. ¡Eres una alumna excepcional!-comentó. Se acomodó su gafas y la miró directamente a los ojos-. ¿Sabes a quién me recuerdas?

-¿A quién, señor Roscue?-preguntó, mirándolo con un brillo de curiosidad.

-A mí-respondió sonriéndole.

La ojos miel sonrió, sus mejillas se acalanbrarían. Su profesor también dijo que hablaría con un par de colegas para que también le escribieran una carta.

Roger no la ha visto desde una semana, pero hablaron por teléfono un par de veces. Para él le bastaba.
Y Jennifer tampoco ha visto a Lisa Javal. Eso hacia que se deprima.

Suspiró mientras agarraba un papel, anotó el número de la casa de Roger, él siempre la llamaba, pero hoy sería la excepción.

Vio a Candy.

-¿Hola? ¿Jennifer?-habló él.

-¡Candy!

La menor rodó los ojos y la ignoró, Jenn soltó el teléfono y corrió para alcanzarla.

La agarró de los hombros para detenerla. Chistó malhumorada.

-¡Vamos, Jenn!-se quejó-. Déjame en paz.

-Necesitamos hablar.

-¡Mierda, Jennifer, no quiero!-gritó.

-¡Sólo quiero saber que está pasando!-gritó de vuelta, enseguida se sintió mal, jamás le había gritado a alguien-. Candy, dime, por favor-suplicó. Su vista se comenzó a nublar.

Candy suspiró. Y negó enojada.

-¡Ella está enamorada de ti!-gritó enojada-. ¡¿Eso querías saber?! ¡Sólo me usó para ponerte celosa!-se apoyó sobre el muro y se deslizó hasta el suelo, tapó su rostro con sus manos.

Jennifer la imitó. Frunció el ceño tratando de asimilar lo sucedido. Alargó su brazo y lo colocó sobre los hombros de la menor, la acercó hacia su pecho.

Comenzó a arrullarla.

-Ella me usó-lloriqueó-. Creí que habíamos tenidos una conexión, Jennifer, jamás había sentido eso por una persona.

Acarició su cabello.

-Candy, todo estará bien. Pronto dejará de doler-suspiró-... con el tiempo.

La castaña se alejó, miró unos segundos a Jenn y la besó impulsivamente.
Jennifer la alejó enseguida.

-O-

Negó la cabeza.
Él tomó su mano.

Poco después de lo sucedido, Roger llegó, sabiendo que era ella quien llamó y decidió saber como estaba, se encontró a Candy llorando desconsoladamente sobre el regazo de Jenn en el pasillo.

Ahora se encontraban en la habitación de Candy, la menor dormía.

-Eso ya lo sabía.

Jennifer frunció el ceño. Quitó la mano de la mesa.

Él suspiró.

-Esa chica ebria, me lo dijo, ese día en el bar. Que sólo se acercó a mí para poner celosa a una chica dijo-confesó. Luego se encogió de hombros al ver la cara de sorpresa de la chica-. ¿Quieres que te invite a comer?-cambió de tema-, por lo que dijo tu profesor.

Sonrió de labios y asintió, él también sonrió, se acercó a ella y besó su nuca para luego levantarse.

-Déjale una nota a la niña.

Rodó los ojos, tomó una hoja del escritorio junto con un lápiz.

«SALIMOS A COMER. YA VUELVO.
-JENN»

-Su nombre es Candy-reprochó. Al pasar por el marco de la puerta, él colocó su brazo sobre los hombros de ella y cerró la puerta.

Iban llegando a la entrada del edificio, hablando felizmente, pero la chica Lincoln notó como una rubia de ojos castaños la miraban desde el pasillo.

Entreabrió su boca.

Jennifer se apartó bruscamente del chico quiso caminar hasta la chica, pero ella retrocedió dando a entender que no quería que se acercara.

-Lisa...-su voz sonó quebrada. Sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas.

-No-negó con la cabeza-. No quiero hablar contigo-susurró. Dio la vuelta y desapareció de su vista.

Roger se acercó a ella y tomó su mano, luego colocó su mano la cabeza de la chica y la acercó a sus labios para besarla, volvió a colocar su brazo sobre sus hombros para continuar caminando.

-O-

-¿Sabes? Sería bueno que vinieras-murmuró sobre el micrófono del teléfono-. Sería lindo ver una cara agradable y familiar.

-¿Por qué de pronto quieres verme, hermanita?-preguntó Bradley-. Sé que me extrañas mucho y querrás decir una linda cara-fanfarroneó. Ella rodó los ojos divertida.

-¿Para cuándo tienes los pasajes?

-Para unos treinta minutos, ¿por?

Abrió la boca sorprendida.

-¿Qué? ¡No puede ser! ¡Estoy malditamente emocionada!

Su hermano rió.

Jennifer volvió a mirar al final del pasillo, Lisa estaba allí, soltó el teléfono y se levantó del suelo.

Tuvo que correr para poder alcanzarla.
Agarró su hombro para detenerla.

-Jennifer, tienes que entender que no quiero hablar contigo-su tono de voz era calmado y frío. Eso la paralizó.

-Pero debemos hacerlo.

-Aún no.

-¡Lisa, vamos!

La chica frente a ella ni se inmutó, mantuvo su rostro frío, sólo desvió la mirada.

-Estoy enamorada de ti, Lincoln.

-¿Q-Qué?-tartamudeó. Que lo dijera ella era diferente-. Pero... ¿y todos eso chicos?

-Jamás me acosté con ellos-interrumpió con fingida diversión-. Sólo lo hacia para llamar tu atención.

-¿P-Pero y ese tal Steve? Te fuiste con él la última vez...

-¡Jamás me acosté con algunos de esos, Jennifer!-volvió a interrumpir-. Él sí es mi amigo.

La mencionada sólo apretó los labios, aún no lo podía creer. ¿Lisa enamorada de ella? Una locura, pero estaba pasando.

-Lisa, todavía tengo preguntas.

-¡Mierda, Jennifer, no puedo estar aquí frente a ti!-gritó.

-¿Qué? ¿Por qué?

-¡Duele saber que no me correspondes y estar parada frente a ti lo hace peor!