The Strongest System [Volumen 1]

Capítulo 141: El trabajo en equipo de Zhang Ergou y Feng Bujue

Los discípulos del pabellón externo de la Montaña Danding se miraron entre sí con curiosidad. El Joven Maestro Lin fue tan amable que perdonó a Li Shun con el gran corazón que tenía, sin embargo Li Shun lo odiaba profundamente. ¿Entonces porque ahora los dos estaban entrando en una casa?

¿A no ser que… a no ser que…?

Los discípulos de inmediato echaron a la basura lo que habían pensado. ¿Cómo pueden pensar en algo tan sucio? ¡Si el Joven Maestro Lin lo supiera, les arrancaría la piel!

Pero, justo en el momento en que estaban entrando en pánico, un espantoso grito atravesó los cielos.

¿Ha sucedido algo?

Las caras de todos se pusieron blancas. Pero justo cuando estaban a punto de ir a ver qué era lo que había pasado, Lin Fan salió de la casa.

“*Suspiro*… Es una pena que no él no haya sido…” Lin Fan suspiró con tristeza.

Parece que todo fue sólo una ilusión que él tuvo. ¿Cómo es posible que en este mundo tantos sucesos devastadores le hayan sucedido en tan poco tiempo?

Para el discípulo menor debe ser muy difícil. Soportar un golpe tan duro dos veces en su vida. Me temo que tanto su ser físico como mental ya deben estar completamente destrozados.

Los discípulos miraron fijamente al Joven Maestro Lin. Cuando recordaron el trágico grito que oyeron, sus rostros se volvieron pálidos, y retrocedieron unos cuantos pasos temiendo ser la siguiente lamentable víctima.

Lin Fan movió suavemente su cabeza, y luego caminó hacia adelante.

El hermano mayor Li una vez más había recibido un golpe.

En ese momento, Li Shun sintió como si los cielos se hubieran hundido. Estaba todo oscuro enfrente de él. Su vida… había perdido toda esperanza. A pesar de que podía decir que ya conocía ese dolor de antemano, eso sólo sirvió para que se intensificara el dolor.

“¡Joven Maestro! Yo, tu discípulo menor,… nunca se atreverá… otra vez…” El adolorido Li Shun se rindió. Nunca más se atrevería a ser insolente en esta vida. En un comienzo, el Joven Maestro Lin se portó muy bien cuando entró en la casa con él. Pero de algún modo, dijo un discurso ridículo, que Li Shun no pudo entender en lo más mínimo. Y justo después de eso…

La pierna de él pasó volando como un rayo. En ese momento, Li Shun se dio cuenta de que no tenía salvación. Y de hecho, la tragedia le atacó una vez más.

…

Lin Fan recogió un gran número de hierbas medicinales de la Montaña Danding. Incluso los de buena calidad, los barrió con mucho entusiasmo. Mirando aquellas miradas de dolor que los discípulos tenían, Lin Fan sólo podía reír. Jeje, tu Anciano Mayor me lo ha permitido. Aunque estés herido, no hay nada que puedas hacer.

Y por fin, Lin Fan volvió a su casa satisfecho.

Mañana era el día en que se marcharía con el grupo de la secta. Necesitaba preparar algunas píldoras especiales por si ocurriera algo inesperado.

En esta expedición, Lin Fan ya se había planteado un objetivo. Si pudiera llegar a la mitad de la etapa postcelestial sería bueno.

Y sería aún mejor si pudiera llegar todavía más lejos.

…

Se hizo de noche, pero las luces en cada una de las casas en la Montaña Sin Nombre estaban brillando. Aunque no había casi nadie allí arriba, las luces hacían que uno no se sintiera tan solo.