Inocencia...
Soledad...
Cariño...
Felicidad...
Para muchos este cuarteto de sentimientos tiene un gran remarqué en sus vidas, no soy la excepción.
A pesar de mi vida llena de lujos, gracias a mi familia, entendí que el dinero no lo es todo. Tú dices quién quieres ser, no el mundo o sus integrantes.
Prosigamos...
Inocencia...
A pesar del sinfín de alagos que posee este sentimiento yo tengo un pequeño problema con este, principalmente su requerimiento primario....... la ignorancia.
Siempre e sido y seré fanática de la investigación, la lectura y demás actividades académicas que disgustan a la mayor parte de los niños de mi edad. A pesar de mi relativa falta de "sabiduría" a mis 4 años, el hecho de que mi quirk dependiese de si sabia o no la composición atómica de un elemento del mismo provocó en mi un afán único de conocer todo.
En parte por ello perdí mi inocencia, saber que el mundo no era un cuento de hadas acentuó en mi una actitud un tanto seria o más bien...
Solitaria.
Soledad...
El simple hecho de saber mas a una temprana edad te convertía en un erudito (una características un tanto rechazada) y si sumamos que mis estudios hayan sido impartidos en casa, solo seria como echarle leña al fuego.
No le tengo desprecio a esos recuerdos, todo lo contrario, en principio me encantaba la "soledad", pero con mi crecimiento también crecieron las responsabilidades de mis figuras paternas creando hací mi verdadera soledad.
Madrugadas, tardes completas o hasta incluso noches en vela sin tener contacto con mis padres, quienes ponían una sencilla escusa.
-"Lo siento cariño, papa yo estamos muy ocupados por él momento"- respondió de manera tranquila y comprensiva mi madre.
-"Comprendo"- respondí con poco animo.
Era un poco desilusionante ver como él extenso tiempo que pasaba con mis padres desapareció en cuestión de meses. Una niña de 6 años sola en una mansión de casi 5 mil metros cuadrados, vaya experiencia.
-"¿Por qué no sales a hacer amigos? Solo no vayas sola, pide le ayuda a Frank"- ofreció mi madre con amabilidad.
Simplemente era eso, una propuesta fácil de aceptar, nada de protocolo, solo decirle a el mayordomo que quería salir y listo.
-"¡Gracias mama!"- respondí emocionada.
-"Denada, no mas no te exedas y si conoces a un chico lindo me cuentas"- respondía entre risillas mientras se escuchaban unos pequeños gritos por parte de su padre.
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How I couldn't be thank for meeting you? -IZUMOMO-
Fanfiction-SOLICITO LEER LA DESCRIPCION- Esta historia sera un tanto complicada de desarrollar. Les solicito su ayuda para corregir cualquier error. Tambien acepto sugerencias de trama y predicciones. Plenamente me intentare dedicar al desarrollo de personaje...
