Sin S.O.S

CAPITULO 4: ESTE

Después de lo que paso en la ferretería, ya saben lo del sujeto, han pasado 3 semanas y la verdad esperaba que Maryfer tuviera estrés o algo por lo que había sucedido, pero al parecer no le afecto en nada, solo el hecho que todos los días insiste en que le cuente cosas cuando le ayudo con la tarea o a estudiar, sinceramente se volvió un poco molesto el que supiera de donde venia yo, aunque ahora mi prioridad no era ella ni la ferretería si no los sujetos que había visto, estuve investigando y encontré algo que se dice objetos fuera de tiempo, que de hecho ya conocía pero ahora tenía mucho más sentido que antes, ya solo me quedaba volver a encontrarlos, la forma más fácil que al parecer funcionaria seria ir con mi yo del pasado directamente a hablar con él, a pesar de que no tenía intención de hablar enserio, tenía que hacer como si de verdad quisiera hacerlo, así que en cuanto Sali del trabajo me dirigí hacia allá, baje a la avenida, tome el camión y mientras estaba sentado pude ver por el rabillo del ojo una silueta obscura en los asientos que estaban hasta atrás del camión, me puse firme y solo estaba esperando a mi parada, hice como si estuviera volteando hacia afuera, en cuanto eche la vista hacia atrás ya no había nada, solo un camión vacío en el que yo y otras dos personas habían tomado, se siente incómodo pensar que te están observando aunque tu no los puedes ver, que puedan aparecer o desaparecer cuando tienen ganas es algo que jode mucho la mente, al final me baje, mientras voy caminando para con mi yo pequeño puedo notar un ambiente de pesadumbre como si las personas no me quisieran ahí, yo solo sigo caminando, lo último que quiero es toparme con las personas menos adecuadas como los de la gabardina, creo que mejor les diré HG como hombres gabardina ya que no los conozco, estoy a menos de 10 metros de mi casa, me quito la gorra para dar a conocer que realmente planeo ver a mi yo pequeño y a mi familia, pero en cuanto hago eso puedo ver al HG Negro encima de mi antigua casa, como si me estuviera advirtiendo que no lo hiciera, tiene la cara de disgusto total pero yo no tengo ni idea de que está pasando y no planeo estar 12 años en el pasado ni esperando nada, necesito confrontarlo:

URIEL- ¡Cabrón!

El HG negro desapareció de donde estaba como si se lo tragara el viento y apareció justo detrás de mi sin que me diera cuenta.

HG Negro - Deberías cuidar tu lengua niñita.

URIEL - ¡¿PERO QUE PUTAS MADRES?!, COMO VERGAS HICISTE ESO.

HG Negro-(Burlón)- Si te lo dijera te explotaría tu pequeña cabeza al intentar comprenderlo.

URIEL- Era pregunta retórica no es esperaba respuesta imbécil, parece que el de pequeña cabeza es otro.

HG Negro - Como ya te dije niño deberías cuidar tu lengua, si no es que quieres terminar en la era paleozoica.

URIEL - Me vale madre si total no me vas a regresar a mi tiempo no me estés amenazando.

Y al parecer esto no le gustó para nada al HG negro, ya solo me quede callado esperando y no pasaron ni 2 segundos el saco una especie de dispositivo que parecía ancestral como un reloj antiguo de cadena, todo se volvió, ¿Azul?, pero que rayos está pasando, bueno creo que el HG Negro tiene todo que ver, pero comenzó a oler a azufre y si señores estábamos en lo que el mundo llama la era precámbrica, aunque... yo no lo llamaría precámbrica, mis ojos no podían creer que fuera cierto, eso que yo pensaba era imposible de probar pero sin embargo sabía que tenía que haber pasado tal cual, la civilización, ¡LA PRIMERA CIVILIZACION!, civilización cuya tecnología rebasaba los niveles de entendimiento de lo que yo conocía como la era moderna, podía sentir como corría agua por mi cara, pero, no era agua, eran lágrimas de felicidad, de, de, no se solo tenía los ojos abiertos y una sonrisa en el rostro que parecía creada por un espasmo muscular, no podía creerlo, aunque parecía suspendida por tecnología antigravedad, sin contaminación con energía totalmente limpia usando lo que parecía ser la teoría de tesla, aquel salto al 9 que solo el descubrió tenía que haber salido de algún lado el HG Negro solo comenzó a reír a carcajadas, yo voltee sorprendido mientras tenía cara de idiota