One shots Taegi [CANCELADA]

Otaku (Parte 1)

Min YoonGi odiaba a Kim TaeHyung, le daba asco por un simple hecho, el chico joven era otaku. Así es, TaeHyung con ya 24 años era un otako de primera, ¿lo peor para Min?, era su compañero de oficina, y siempre estaban discutiendo, mientras él ponía música hiphop o clásica para la concentración, TaeHyung ponía sus openings de anime o algu a tontería, también pasaba que la oficina ahora estaba llena de figuras, fotos y mercancía de anime, por si fuera poco, estaba todo totalmente obscuro.

—¡Mierda ponte los audífonos!—gritó harto Min, como siempre.

—¡Ya te dije que si quieres que nos acostumbramos a trabajar juntos debes de aprender a respetar mis gustos!—gruñó.

—¡No se mi maldita culpa que me haya tocado con un otaku hediondo (de mal olor)!—

—¡¿Qué dijiste?!—

Los gritos se escuchaban por todo el edificio, también el como nuevamente se agarraron a golpes, por lo que tuvo que intervenir el jefe. Les costó separarlos pero no querían cambiarlos de oficina, ya que no había disponibles y debían de acostumbrarse al otro.

—Si siguen peleando los voy a despedir, desde ahora cada vez que peleen tendrán que tomarse de la mano y dar un paseo por la oficina, ¿entendido?—frunció el ceño.

Ambos arquearon la ceja pero el hombre iba completamente enserio, era humillante que tendrían que hacer eso, así que ambos rodaron los ojos y asientieron.

[°°°]

Más tarde finalmente iban saliendo, otra vez mala suerte pues YoonGi y TaeHyung tenían que tomar el autobus juntos, y ambos vivían en el mismo edificio, solo diferentes departamentos.

YoonGi simplemente guardó silencio, mientras TaeHyung era un hablador, y él no le prestaba atención en lo absoluto, se le hacía molesto, como si él entendiera la palabra "sharingan" o "Lolis". Salió lo antes posible para evitar a TaeHyung y fue a su departamento a encerrarse.

El menor fue por su parte, yendo directamente a su cuarto. Terminó por sentarse en la silla y suspirando, él no odiaba a YoonGi, es más, le gustaba YoonGi, y mucho, pero su mayor le llamaba otaku todo el tiempo y le molestaba que estuviera discriminandole de alguna manera. Simplemente encendió la computadora para ver algo de anime, o comprar cosas por Internet que fue eso lo que hizo primero, topandose con un vestido de sirvienta, uno muy lindo, con volá y orejas de gato incluido. Casi estaba babeando al imaginarse a YoonGi con el vestido puesto, y suplicandole por qué le marcará.

—Oh...mierda—compró el vestido, llegaría en unos días.

Directamente fue a ver porno gay con muchachos disfrazados con ese tipo de trajes, si, ese era su más grande fetiche y que quería ver que YoonGi usara por supuesto.

[°°°]

Unos cuantos días después YoonGi estaba tranquilo leyendo un libro con su mascota Holly en sus piernas, estaba tranquilo, era domingo, su único día de descanso, además de que estaba harto de tener que tomar la mano de TaeHyung cada que se pelearan y dar un paseo como si fueran algo.

Escuchó que llamaban a la puerta, se extrañó al ver a un chico del correo.

—Buenas tardes, este es su paquete, firme aquí por favor—

YoonGi se confundió, arqueando una ceja, él no había comprado nada.

—Disculpa, creo que te has confundido de casa o dirección—

—Uhm, no señor, está es la dirección, usted ordenó compró esto, Señor Kim TaeHyung—

YoonGi casi le estaban saliendo canas.

—Espere un poco por favor—dijo.

Tocó mil y una veces la puerta hasta que TaeHyung abrió la puerta, a quien le dio un golpe.

—¡Auch!—

—¡Ordenaste un p*to paquete y lo entregaron a mi dirección!, ¡deja de mandarme tus cosas!—gruñó claramente molesto.

Sinceramente, YoonGi nunca había revisado lo que habían dentro de esos paquetes, solamente iba y los dejaba en la habitación de TaeHyung o se los tiraba a la cara.

—Ah, eso, lo siento—dijo lo de siempre y tomó la mano de YoonGi para llevarlo de nuevo y firmar por el paquete.

Resuelto todo, YoonGi se disponía a irse, pero él rápidamente le tomó de la muñeca.

—Lo compré para ti—por fin se atrevió a decir, pues había comprado todo tipo de trajes y juguetes para YoonGi.

—No quiero tus mierda de otaku—escupió con rabia.

TaeHyung rodó los ojos, ¿qué pensaba YoonGi?, ¿que le iba a dar la edición limitada de Jonjou romántica o algo así?. Le empujó dentro de la casa, entrando con él, donde luego le cargó de costal, claramente YoonGi se quejó y pataleo, pero finalmente le dejó en la cama.

—Quítate la ropa, ahora—ordenó el más alto.

—¡¿Qué mierda te pasa?! ¡¿Acaso vas a violarme?!—trató de lanzarle una patada, no contaba conque el otaku era de rápidos reflejos y más fuerte.

Inmovilizó su cuerpo teniéndolo boca abajo. YoonGi comenzó a alarmarse al sentir que el menor comenzaba a quitarle la ropa.

—¡Para, no soy gay!—gritó alarmado.

—Relajate—susurró al oído del mayor.

Eso provocó una corriente eléctrica por el cuerpo del mayor, sonrojadose y maldiciendose porque eso le pareció jodidamente caliente. Trató de forcejear pero ya era tarde pues estaba desnudo. Literalmente sentía la clavada mirada de su menor recorriendo y escaneando todo su cuerpo, en especial su trasero, y sólo pudo liberarse para cubrirse con las mantas.

—Eres un maldito pervetido—

—Se ve que te gusta—sacó el vestido del paquete—quiero demostrarte que soy más que un otaku.

YoonGi sintió nervios cuando TaeHyung se acercó y trató de quitarle la manta de encima. Sus manitas no tenían tanta fuerza y le quitó la manta, por lo que inútilmente cubrió su cuerpo.

—Pontelo—le entregó el traje y los accesorios de gato.

YoonGi negó aunque TaeHyung no tuvo de otra que vestirle por su cuenta, y ahí estaba sonrojado, sintiéndose expuesto, y totalmente extraño, su cuerpo se sentía raro, es como si le estuviera gustando usar medias y ese traje provocativo, también el hecho de que TaeHyung le devoraba con la mirada.

—Levanta tu falda—dijo sentado en aquel pequeño sillón del cuarto.

—S-Se verá todo...—desvió la mirada sosteniendo su corta falda para evitar que se viera sus bragas apretadas por una leve erección—Mierda, eres un otaku pervertido—

TaeHyung sonrió de lado.

—Levantala—repitió.

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Fantasías que tengo