20- Situaciones

555 47 4
                                    

— No que, no me ibas a dejar —se burla él rizado.

— Mejor callate Emilio, que me voy a arrepentir de dejarte ir solo

— Ya mamá, perdón —se escucha que llaman a su vuelo— Debo irme, te amo mamá y gracias —le da un beso y se va

Aborda su avión, y se acomoda en su asiento para un vuelo, algo largo, siente su celular vibrar.

"¿Recuerdas que paso anoche?"

Abre los ojos al ver el mensaje, y contesta con un simple "no ¿Qué paso?"

" Ay Emilio, pronto lo sabras"

Decide ignorar, los mensajes y se dedica a intentar descansar durante el vuelo. Algunas horas después, aterriza el avión en Uruguay, luego de hacer todo el papeleo necesario, sale del aeropuerto, iba a tomar un taxi, pero no sabe la dirección a si que decide marcarle a eli

— Bueno ¿Emilio?

— Hola Eli y perdón por molestar, pero me preguntaba si sabia la dirección de dónde se esta quedando Joaquín

— ¿Pará que la necesitas?

— Digamos que vine a ver a Joaquín, pero no me sé la dirección.

— Te la puedo dar, pero no hay nadie. Mejor ven al hospital general de Uruguay, te veo aquí

— Espere, esta en Uruguay. Y ¿qué pasó? ¿por qué astan allá?

— Solo ven, acá te explico.

La llamada termina y Emilio toma el primer taxi, que encuentra. Mas de veinte minutos después llega al hospital. Se baja de inmediato y al entrar busca a Eli, en cuanto la ve se acerca de inmediato.

— ¿Qué paso?

— Solo se que Joaquín salio a caminar y después su papá me marco que Joaquín iba rumbo al hospital y pues vine lo mas rápido posible. No nos han dicho nada y Uberto acaba de ir a preguntar.

— Pero esta bien, dime que esta bien.

— No lo sabemos Emilio —en ese momento llega Uberto— ¿Cómo esta Joaquín?

— Me dicen que se dio un golpe muy fuerte en la cabeza y que se rompió un brazo, pero de ahí en fuera todo esta bien.

— Ay, que alivio —habla Emilio— Pero ¿qué le paso?

— Supongo que eres, Emilio ¿no? —asiente— Mucho gusto Uberto bondoni

— Emilio Osorio, mucho gusto.

— Pero que no se supone que estabas en México

— Si pero, tuve una pequeña discusión, y cómo no me contestaba las llamadas decidí venir a arreglar las cosas.

— Mhh, bueno solo queda esperar a que despierte y podremos pasar a verlo —habla Uberto

— Si y muchas gracias por avisarme y estar al pendiente —agradece Eli

— Es lo menos que puedo hacer, es mi hijo y tú me importas —la abraza.

Esperan, mas de una hora, cuando les avisa que acaba de despertar y pueden pasar a verlo

— Pasen ustedes, yo paso después. —ofrece Emilio

Ambos asienten y caminan a la habitación de Joaquín, una vez que entran ven al castaño, sonriendo mientras observa el yeso que tiene en el brazo.

— ¿Mamá que haces aquí?

— Tú papá me aviso, y vine de inmediato, pero dime que te paso

Lo Difícil De Amar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora