Tres días era lo que había pasado, ninguno mostraba símbolo de tristeza, ya sea con otras personas, ni solos; pareciera que no les dolía el hecho de ya no ser pareja. Pero si extrañaban algo, que aún no quieren admitir, pero ¿en algún punto serán sinceros consigo mismo? Por más que quieras evitar, no te puedes engañarte a ti mismo.
Joaquín se encuentra en su habitación, escuchando algo de música, mientras canta; gracias a eso no logra escuchar como tocan la puerta y como también es abierta; no nota la presencia, hasta que le arrebatan el celular. Entonces se gira y en vez de reclamar da un grito de sorpresa, al ver a su amiga meli; de inmediato se levanta de la cama y corre a abrazarla.
— ¿Por qué no me dijiste que vendrías de visita? —chilla de la emoción— Tengo tanto que contarte, ¡dios! Te extrañe tanto —la vuelve a abrazar, ambos gritan de nuevo, hasta que son callados por Elizabeth desde el piso de abajo.
— Mi papá tuvo que ir al trabajo por unos días, así que decidí venir a visitarte por un par de días. —sonríe tiernamente— También te extrañe, ahora así cuéntame.
— Anda ven siéntate —palmera la calma, logrando que la chica pelinegra se siente junto a él.
Pasan la siguiente hora platicando de lo que pasó desde que se fue; claro incluido lo que pasó con Emilio, mientras que su amiga lo escuchaba con toda la atención posible, en algunas ocasiones daba cortos comentarios, nada más, se resguardo sus opiniones para cuándo terminará la historia.
— ¿Qué te digo Joaquín? —da un gran suspiro— Siempre he sido totalmente honesta contigo y esta vez no será diferente. No me gustaría que te ofendieras, pero no has pensado ¿que lo que sientes por Emilio no es amor? Piénsalo un poco, si lo fuera de verdad no estarías al menos un poco triste. —ante esas palabras, Joaquín se encoge de hombros, al no tener ni idea de que responder— Mira Joaquín, se que no es fácil, pero piensa las cosas, ¿recuerdas que me pasó con Manuel? —el castaño asiente— Confundimos el cariño de amigos con algo más, piensa en él ¿qué pasó?, sin presión alguna. —el castaño solo asiente, meli decide salir de la habitación, para dejarlo pensar.
Mientras Joaquín está unido en sus pensamientos; en una cafetería no muy lejana, se encuentra un chico rizado, disfrutando de un café, mientras se hundía en sus pensamientos; los cuales fueron interrumpidos en el momento que su mirada se posó en una cabellera roja, que recuerda luego de unos segundos, de inmediato se levanta y corre a donde se encuentra la chica, le toca el hombro llamando su atención.
—¿Si? —dice una vez que lo voltea a ver, Emilio iba a hablar, pero no sabe ni que decir, no es como que le fuera a preguntar así nadamas, si se acostaron en la fiesta, una vez que iba a hablar la chica lo hace— ¿Emilio? ¿No? —el joven asiente.
— Me gustaría llamarte por tu nombre, pero ni siquiera lo recuerdo —admite honestamente.
— Creo que lo suponía, estabas demasiado ebrio.
— Hablando de eso, si no te molesta y claro si tienes tiempo me gustaría preguntarte de algo. —la chica asiente, van a la mesa donde ya se encontraba el rizado y se sientan— Bueno, tal vez te suene directo o extraño, pero esa noche tu y yo tuvimos ya sabes...sexo.
— Oh no, claro que no.
— Ay gracias, sin ofender —la joven solo ríe.
— No, ten por seguro que no pasó nada, cuando me acerque fue a preguntarte si estabas bien, te notaba muy ido y no pude evitar preocuparme; al no verte bien decidí llevarte a una habitación, donde no dejabas de murmurar el nombre de ¿José? o algo así, junto con otras cosas sin sentido.
— No era ¿Joaquín? —pregunta, la joven asiente— ¿Me podrías decir como que cosas decía?
— Algo como que lo extrañabas, y cosas así, no lograba entenderte muy bien.
— Oh claro, disculpa pero tengo que irme, espero verte después —deja dinero en la mesa y sale corriendo.
Tras correr más de diez minutos, de detiene, con la respiración sumamente agitada, como puede toca el timbre de aquella casa, espera algunos momentos y la puerta es abierta, intenta sonreír, toma un poco de aliento para hablar.
— ¿Está Joaquín Eli? —pregunta aún jadeante, recibe un asentimiento como respuesta — ¿Me deja pasar a verlo? —ella vuelve a asentir, sin más entra a la casa yendo directo a la habitación del castaño, una vez ahí toca la puerta, escucha como gritan un "pase" y lo hace, al momento que se ven, solo se quedan plasmado, viéndose uno a otro.
— ¿Qué haces aquí? —pregunta rompiendo un poco la tensión que se había creado.
— Quiero hablar contigo, solo necesito que me escuches.
— Siéntate —indica, el rizado se sienta junto a él en la cama
Emilio suspira y comienza a contarle lo sucedido en la cafetería el día de hoy; Joaquín sólo escucha atentamente cada palabra, en ningún momento de la historia cambia su expresión; al finalizar la historia, la habitación se queda en un silencio total.
— Emilio, estuve pensando y tan solo míranos —señala a ambos— Creo que estamos intentando arreglar, algo que no puede ser arreglado o incluso pienso que tal vez no existió. —admite, con la mirada consentida en el piso.
— ¿Por qué piensas eso? —pregunta totalmente extrañado.
— Es que tan solo piénsalo, desde que terminamos ninguno, se vio afectado, pareciera que no pasó nada. Que tal si solo confundimos nuestra amistad, con algo más.
— Joaquín, no se de donde carajos sacaste esa idea, yo te amo y tu a mi. Eso no se va a cambiar, tal vez nuestro comienzo no fue el mejor, pero hemos pasado grandes momentos juntos.
— Ya no se ni que pensar —admite, sinceramente— Me alegro que no me engañaras, pero siendo honesto, no se si estoy seguro de querer regresar contigo.
Emilio lo toma del mentón, logrando que se miren directamente a los ojos, le sonríe— Bonito, entiendo tus inseguridades, pero sabes también quiero que me entiendas, quiero estar contigo y no implica que tenga que esperar a que dejes de dudar o que tenga que volverte a enamorar. —entrelaza sus manos, aún manteniendo el contacto visual.
— No merezco que aceptes mis dudas y me esperes, no me... —es interrumpido, por los labios contrarios, besandolo.
— Lo mereces y lo haré aunque no quieras.
Joaquín sonríe y lo toma de las mejillas, cuidando su mano aún fracturada, para volverlo a besar.
-----------------------------------------------------------
5/6
El capitulo final lo subiré más tarde, primero debo acabarlo.

ESTÁS LEYENDO
Lo Difícil De Amar
FanficEmilio y Joaquín vivirán lo complicado que es amar a alguien Ambos se conocen desde hace mucho tiempo, se concideran mejores amigos pero uno en especifico está seguro de que quiere al otro y aquél no está seguro de nada en este momento REDES SOCIAL...