De amor y sangre.

Ella en vez de ti.

Estaba de espalda cuando entró a mi cuarto y me abrazó, el frio de sus manos traspaso mi piel y toco mis huesos.

A pesar que por mucho tiempo la amé antes de conocerte, hoy no la quería ni ver, sabia que esto significaba que ya no te tendría más, aunque muchas veces te traicione con ella, sus besos hoy me sabían a hiel, y su presencia perforaba mi alma, no quiero ni ver su rostro aunque antes pensaba que era la más bella, y no quiero oír sus palabras mientras me dice: estoy de vuelta.

En el momento que ella entró, supe que te había perdido, por mis malos ratos, por mis descuidos, nunca te supe valorar y hoy me toca estar con ella y llorar.

Me pregunto si aun piensas en mi, en el día en que nos conocimos o la primera vez que el amor hicimos, me pregunto si la luna que te prometí alguien más la baja ahora para ti, me pregunto que hubiera sido si no te hubieras ido, y mientras lo hago ella guarda sus maletas en mi armario, ¿cómo estás? - me pregunta, ¿me extrañaste? ¡Tanto tiempo me olvidaste!, mientras me acuesto en mi cama la miro a los ojos y lo acepto hoy no estás tu aquí y por un tiempo ella si. Soledad es su nombre.