¿Pueden hacer silencio?

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Mientras sus padres estaban sentados en el comedor con una tasa de café enfriándose, Katherine de diez años aprovecha el silencio que reina en su hogar para dejar fluir el arte.

Amante de la lectura y la redacción, sueña con escribir un libro y algún día ser famosa, le gusta leer de misterios y muerte, aunque también lee poesía y novelas románticas de vez en cuando.

Sus padres eran diferentes a ella, ellos amaban los cigarros matutinos y los tragos de ron por la noche, tenían una relación disfuncional, peleando todos los días como parte de su rutina. "Amor" no era una palabra de su léxico, pero parecían disfrutar emborracharse juntos hasta no poder pronunciar su nombre.

La inspiración había abandonado a Katherine, eran ya dos meses de intentos fallidos, de poemas sin rima y de historias sin relevancia. Hace mucho tiempo que no había paz en la casa que le permitiera escuchar sus pensamientos y está noche se sentía inspirada.

Mientras escribe un capítulo más de su novela de terror, el rio de ideas se detiene tras un grito, diferente al de todos los días, esta vez es su abuelita, quien llego de visita y no parece querer guardar silencio.

Katherine baja corriendo a la cocina y mira que su abuela está llorando, de inmediato la abraza en señal de consuelo y luego la apuñala repetidas veces en la espalda.

El silencio anhelado por ella había vuelto. Sube a su cuarto para intentar terminar el último capítulo de su novela de terror, ya luego se preocupará por limpiar el desastre y esconder los cadáveres.

De amor y sangre.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora