Azul [KiKasa]

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Mis sentimientos por sempai comenzaron gradualmente..

Tan despacio que cuando me di cuenta ya estaba hundido en sus ojos azul marino.

Todo comenzó a tomar forma en el partido contra Touou, el mismo día que conocí la verdadera derrota. Pensé que ya había superado a Aominecchi, luego de haber competido tantas veces contra él comprendí que nunca lo vencería en el basket si continuaba admirándolo y recurrí a una última esperanza: copiar a Aomine.

Sólo lo conseguí en el final del juego, el esfuerzo que hice hasta conseguir copiarlo fue increíblemente duro. Pero ni siquiera eso sirvió, el as de Teiko me ganó. Le ganó a Kaijou y lloré sin consuelo en medio de la cancha.

Cuando giré mi vista atrás nuestro capitán no estaba con nosotros. Moriyama sempai dijo que debíamos darle un minuto, entonces entendí el grado de aquella derrota.

Me dolió el corazón, no por haber perdido sino por no haber podido darles la victoria a mis compañeros. Algunos días más tarde Moriyama sempai dijo que fuéramos a buscar algunas chicas para disfrutar nuestra juventud, incluso nos roció a mi y a Kasamatsu sempai un perfume a cítricos para ser mas "atractivos", claro que yo no necesitaba ir a buscar chicas en grupo, con mi trabajo de modelo puedo tener a quien quiera sólo con un guiño, pero Yoshitaka me dijo que él lo hacía para levantarle la moral a Kasamatsu.

Como sempai se muestra tan duro y fuerte durante los partidos y las practicas, necesita una manera de liberar toda esa tensión de alguna manera. Sonreí y pensé que eran buena idea.. Pero al cabo del tiempo.. Me di cuenta.. ¡Moriyama sempai sólo quiere ligar! ¡No tenía nada que ver con Kasamatsu sempai!

Uno a uno intentaron invitar a salir a algunas desconocidas en el centro pero a todos les iba mal. Una y otra vez.. Ellos eran pésimos en eso.

Al final lo intenté, entonces me detuve en medio de la calle y comencé a notar que las chicas caminaban una y otra vez a mi alrededor. Estiré un índice y grité.

-La que quiera salir conmigo que toque mi dedo!

En dos segundos una multitud de chicas tomó mi mano como depredadoras, tuve que decirle a las primeras cinco que ellas eran las afortunadas. Consiguiendo parejas para mis amigos y para mi fuimos por unos refrescos a un restaurante, fuera una egoísta idea de Moriyama o no, estaba feliz de ver como sempai se distraía un poco.

Aunque al girar a verlo..

-Wuo! Sempai está temblando! Respira!

Sus ojos azul marino giraban como tornados, su temblorosa mano hacía que su jugo se volcara de a gotas en la mesa, estaba pálido como una hoja.

-Él realmente está nervioso! ¿Que nunca hablaste con una chica?

-Si pero.. Siempre respondo con monosílabos -respondió preocupado.

Al final las chicas vinieron luego de retocarse el maquillaje y demás, Kasamatsu sempai dijo que la de la derecha era la que más le gustaba, o sea, la que tenía el busto más abultado. Me dio intriga ese gusto en sempai, su aspecto tan serio nunca habría hecho pensar que le gustaban las oppai*.

Decidimos brindar por aquél encuentro y Kamasatsu sempai acabó teniendo que hacerlo, alzó su vaso con firmeza, los temblores y nerviosismo habían calado tan profundo en él que acabó sin sentir nada.

Miró a la que dijo que le gustaba y exclamó en lugar de kampai*:

-Oppai!

...

-No te rías idiota! Estaba nervioso! -gritó y me golpeó pero eso no detuvo mi risa.

-La cara de esa chica! No imaginas su decepción! -exclamé sujetando mi estómago. Me sentía muy alegre, había sido tan incómodo que ellas pretendieron no notarlo pero al final quedó excluido en toda conversación y acabamos pidiendo disculpas antes de irnos, claro que Moriyama sempai no estaba contento con eso.

Sólo mirame.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora