Desde cuándo había actuado así?
Ah.. Claro. El día en que le preguntó si gustaba de él.
Kagami no había dejado de actuar extraño, evitándome, apenas teníamos pases como los de antes, casi parecía que el volvía a querer llevar al equipo a la victoria por si mismo, sin pedir ayuda del equipo.. Pero sólo era conmigo.
Pasaba, driblaba y sonreía con los demás como si nada hubiera ocurrido. ¿Por qué? ¿Por qué sólo a mi me da esa mirada evasiva y sus tartamudeos tan tiernos?
No es que no me parezca lindo, sólo que desearía que todo fuera como antes. Cuando me miraba con sus cejas raras emocionadas, cuando sonreía con arrogancia al oír de algún oponente fuerte con el que jugar.
Una vez me dijo que cuando regresó a Japón, todos sus contrincantes ni siquiera se esforzaban al verlo hacer esas clavada de película, todos parecían dolorosamente faltos de espíritu, y Kagami lo sufrió hasta que supo de la Generación de los Milagros.
¿Quién diría que un equipo que hizo tanto daño, que se burló de tantos oponentes, que consiguió que muchos abandonaran el deporte que amaban.. Fuera la esperanza en la vida del pelirrojo?
Porque incluso Ogiwara san fue víctima de la crueldad de Akashi y los demás milagros en la cancha.
Hasta ahora hemos derrotado a tres de ellos, aunque con Kise kun fue una práctica. Pasamos por derrotas y dolor, lágrimas y sufrimiento, pero todo lo hicimos juntos.. ¿Qué debería hacer para acercarme a Kagami kun de nuevo?
¿Por qué me duele que me deje así de lado?
Entonces fuimos a nuestro arduo entrenamiento en las montañas.. Kagami kun no estaba. Riko san dijo con muy mala cara que se había ido a Esados Unidos. No le avisó a nadie, ni a la entrenadora, ni a sus compañeros.. Ni a mi.
Kagetora san me habló de la pared que iba a encontrar sino comenzaba a hacer tiros además de pases. El tiempo pasó mientras todos entrenábamos con ahínco, pero la ausencia de Kagami kun me estaba inquietando.
Incluso aunque no habláramos durante las clases, o no hicieramos jugadas en conjunto en el entrenamiento.. Yo sabía que él estaba ahí. Sólo debía girar el rostro para ver al enorme pelirrojo de doble cejas.
Extrañaba su presencia, sus estupideces, su enorme sonrisa, su apetito insaciable.. Extrañaba verlo.
Por qué tuve que preguntarle si gustaba de mi? Todo se arruinó en cuanto lo hice.
Pero por qué?Llegó el día de inauguración de la Winter cup, Kagami no estaba por ningún lado. De pronto me llegó un mensaje para encontrarme con mis viejos compañeros de Teikou.
La entrenadora casi me arranca los pelos cuando dije que debía irme un momento, al final aceptó pidiéndole a Furihata kun que me acompañara. Al llegar vi a cuatro de los milagros, podía notar la inquietud en mi compañero de Seirin, pero para mi no eran sólo súper estrellas, sino también mis viejos compañeros de equipo.
Pude ver la rigidez en sus hombros, su ligero temblor y su cara de pánico. Sonreí, imaginando que yo mismo me había visto así de asustado cuando fui admitido en el primer equipo de Teiko. Entonces llegó el que nos había llamado en primer lugar, Akashi hizo aparición en lo alto de las escaleras, no podía ver con claridad su rostro pero su voz fue clara y demandante.
-Lamento hacerlos esperar. Me alegra volver a verlos, que estemos aquí reunidos es muy conmovedor. Pero hay alguien que no debería estar aquí, ahora sólo quiero hablar con mis compañeros, perdona pero podrías retirarte?
Me giré hacia mi compañero, él estaba con una clara expresión de pánico. La voz de Akashi era muy intimidante a pesar de ser tan educado, su aura gritaba peligro.
-Vamos, podrías ser un poco más amable, no lo trates así.
Miré de inmediato al alto pelirrojo que sostenía por el hombro a Furihata kun, Kagami le daba su apoyo y fuerza con sólo ese pequeño roce.
-Con que tu eres Akashi, mucho gusto -dijo con una sonrisa de lado, esa sonrisa era embriagadora, pero su arrogancia podría ser mal vista por el antiguo capitán de Teiko.
Confirmando mis temores, Akashi le pidió prestadas sus tijeras a Midorima, su lucky ítem del día, bajó las escaleras con elegancia y atacó a Kagami con una fiereza atemorizante.
-Kagami kun! -grité desesperado, un rasguño dejaba caer una gota de sangre en su mejilla.
-Je, buenos reflejos, por moverte así te voy a perdonar esta vez, pero no va a volver a pasar, si te digo que te vayas, vete. En este mundo a los ganadores se le da la razón en todo, y a los perdedores se les quita. Hasta ahora nunca he perdido en nada y nunca lo haré, y como siempre ganó siempre tengo razón.
Habló con aquella voz soberbia y segura de sí mismo mientras recortaba su flequillo.
-Si alguien se opone a mi, sea quien sea le mataré.
Cuando miré a Furihata kun vi su terror, aquello había sobrepasado incluso mis temores.
..
Pronto enfrentamos a Touou, vencimos gracias a que Kagami kun llegó a la zona, él realmente era así de especial.. A pesar de que no estuvo en Japón durante la generación de los milagros.. Él podría ser uno sin dudarlo. Su talento aún en bruto es como un diamante, y ninguno de nosotros sabe hasta donde llegará su brillo.
El brillo de su luz.
Me recuerda a Aomine cuando aún no estaba defraudado de sus rivales, cuando aún sonreía al ganar.. O al marcar algún punto.
Al final de esa revancha confié en ambos, en que Kagami alcanzaría el balón y en que Aomine la robaría. Antes de que volvieran a contraatacar yo ya estaba tras el balón, pero al final, Kagami era el dueño de mis esperanzas.
Se la pasé, ambas luces saltaron, Kagami estiró el brazo y la alcanzó. Faltaban segundos para acabar el partido, Aomine estaba perplejo y recordé cuando le dije que algún día habría alguien mejor que él.
El punto valió y acabó el tiempo.
Ganamos nuestro primer enfrentamiento.
Pude sonreír apenas, me maree por el esfuerzo del partido y Kagami me atrapó, rodeando mi cintura con su brazo. Ambos estábamos cansados y sudados, pero su cercanía era agradable.
Al fin pude chocar puños con Aomine, le habíamos ganado con mi estilo de juego y mi nueva luz.
Fuimos a casa de Kagami para festejar. La entrenadora cocinó dejando frutas dentro de la mezcla.. Para sorpresa de todos.. Sabía bien.
Fui al balcón por un poco de aire, cuando Kagami salió también mi corazón brincó y él brincó literalmente al verme de pronto.
-Kagami kun gracias por lo de hoy..
-Ja, que te pasa?
-No lo sé. Mientras cenábamos de pronto sentí eso.. Que fue bueno haberte conocido. -Lo vi sonrojarse y me llenó de alegría.
-Idiota siempre dices esas cosas.. Como sea es muy pronto para hablar de eso, la WC recién empieza.
Mi vista se nubló y lo oí gritar antes de que sus fuertes brazos me sujetaran. La entrenadora nos había envenenado.
Pero yo estaba feliz de sentirlo así de cerca de nuevo.
Hace rato no actualizaba ésta, para hacerlo más dinámico voy a agregarle otras parejas como AkaFuri.
Gracias por leer! Saludos!.
ESTÁS LEYENDO
Sólo mirame.
FanficLa vida de los milagros al entender que están enamorados. "-Porque temí quemarme en tus ojos, Kagami kun." "-Creí que serias mi sombra para siempre. " Todas las historias están entrelazadas pero puse la pareja principal en el titulo en caso de que s...