Caminos desconocidos 3

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En esta historia, no contare hechos importantes ni 3ros involucrados durante mi trayectoria, debido a las consecuencias que estos podrían traer en algún futuro, y como dicen por ahi, es mejor prevenir que lamentar... Antes de salir de la parada, minutos después de recibir el mensaje, había llegado el bus que iba a mi casa, pero no me podía ir así, era esa noche o nunca, Esa noche recorrí (20,0 km) aproximadamente y llegue al lugar a las 11:00 pm. Mientras esperaba, pensaba en lo increíble y lo desesperante que puede ser la necesidad de ver a alguien y no solo eso si no de tener las ideas claras, ya no quería tener duda, ya no queria tener miedo, no me importaba el peligro que podría pasar en el camino o lo que la gente decía de aquel lugar, mi mayor miedo era vivir con el hecho de no saber nunca como mi mundo se vino abajo aquella noche y no pude hacer nada para evitarlo...

Miércoles, un día atravesado como cualquiera, habrían pasado unos cuantos meses desde la noche de ella... Al salir de clases me quedo conversando cerca de los edificios que arropaba el lugar donde me encontraba, y al pasar la hora y pico decido salir con retorno a mi casa que ya de por si quedaba lejos, y bastante...

Tras un trayecto previo, llegó al sitio donde tenía que esperar mi trasporte, algo realmente agobiante, pero el esfuerzo lo valia, amaba lo que hacía. Después de unas horas, ya había oscurecido, la neblina se dejaba venir desde el borde de las montañas de enfrente, sentado en mi skate en una de las ceras, moria del frio que habia empezado hacer, las personas de la cola de espera, empezaban a protestar debido a las largas horas que llevaban ahí, yo sin mas nada que hacer y como por necesidad decido enviar un mensaje, algo para distraer mi mente y olvidar el estrés de aquel lugar, por cosas inexplicables y después de tanto tiempo, recibo un mensaje; era ella, después de mucho y como si nada, trazamos una conversación nuevamente.

Las horas pasaron y la policía había trancado el lugar, todo apuntaba a un caos en el lugar donde me encontraba esas noche, pero yo estaba suspendido en un mensaje de texto, ya al percatarme de la situación, empiezo a buscar alternativas, estaba muy lejos de casa, empezaba a desesperarme aunque muy dentro de mi trataba de guardar la calma, pero fue inútil porque en eso, mi celular apuntó al 1% de batería, quedaría varado y sin nadie que lo supiese.

Su mensaje no fue casualidad, fue la salvación"-vente a mi casa." 9:30 pm (HLV)

La vida que nunca tuveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora