Naruto en Kimetsu no Yaiba

Capítulo 10

NT: Bien, bien, bien, seguimos con esta parte, tarde mucho más de lo esperado, pero como siempre todo tiene un pero, aunque en este caso es mas bien una explicación.

Pero al final siempre disfruto escribir un nuevo capítulo de esta historia, sin más que decir, los dejo... ;3

Bueno, más tarde tendré que sacar un mini resumen de lo que eh pasado y las razones del porque estuve inactivo por tanto tiempo.

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Cuando Nezuko y Naruto se bañaron con los primeros rayos de luz no notaron cuando la chica de la temaris se desvaneció, mientras que Tanjiro estaba muy cansado para eso; al sentir el calor los chicos fueron a la casa en ruinas directo al sótano, cuando pasaron vieron a Tamayo cerca de la mujer que había llevado Nezuko antes a ese lugar mientras que el señor convertido en demonio estaba en una celda pequeña, buscando con la mirada Nezuko los vio e inmediatamente se acercó y directamente le dio un abrazo a Tamayo, acto que la sorprendió en gran medida mientras que Yushiro la mataba con la mirada a la vez que todo su cuerpo temblaba de enojo, tanto fue asi que la venas de su frente se veían a plena vista, cosa que claramente no afectó a Nezuko.

- Vaya, esto es una sorpresa, aunque ya todo está bien... -fue que en medio del abrazo miro a Yushiro y aunque ella viera que Yushiro le dirigía un mirada llena de cabreo de mala leche extendió su brazo y lo empezó a acariciar como lo hacía con sus hermanos fallecidos, claro que Yushiro se desesperó más al intentar quitar la palma de Nezuko de su cabeza.

Cuando Naruto bajó las escaleras, Tanjiro ya se había despejado en buena parte de los efectos de la técnica de Tamayo, por lo que cuando vio que Nezuko abrazaba a Tamayo no pudo evitar sonreír mientras le pedía a Naruto que lo bajara para poder hablar con Tamayo y Yushiro.

- Veo que Nezuko se encariño con ustedes, eso es muy bueno.
- Pero nosotros solo somos demonios, ¿crees que esté bien eso? -cuando Nezuko escuchó eso, paro de acariciar a Yushiro y miro fijamente a Tamayo cuestionándola con su mirada.
- Ustedes no son demonios, con lo poco que nos hemos conocido ustedes demostraron que están dispuestos a dejar su seguridad para poder apoyarnos en nuestra pelea, ustedes no son demonios y nunca lo van a ser...yo estoy dispuesta a protegerlos cuando sea, incluso si mi vida se va en ello.

Tamayo al escuchar las palabras de Nezuko solo la estrujó entre sus brazos mientras lágrimas caían por sus mejillas a la vez que intentaba esconder su rostro, cuando Tanjiro vio como las lágrimas de inmediato se exaltó y pensó que su hermana había tocado un punto que no debió.

- ¡Nezuko! ¡Nezuko! ¡estas siendo bastante irrespetuosa, aléjate de ella un poco! -gritó un poco histérico al acercarse a las mujeres, en su intento de alejar a su hermana.
- Gracias Nezuko...muchas gracias... -pero Tanjiro jamás se esperó escuchar esos murmullos que detonaban tanta emoción, fueron esas mismas pequeñas palabras en voz baja lo que hizo que Tanjiro se detuviera mientras se sentía estúpido y muy avergonzado.

Pero no era el único que estaba viendo la situación de las dos mujeres, Yushiro viendo todo eso le dio una mirada a Tamayo llena de ternura mientras su mente viajaba por sus recuerdos hasta llegar a ese día, volviendo a escuchar las preguntas que le había dicho la mujer mayor momentos después de haber escuchado las noticias de su inminente muerte a causa de su enfermedad.

- "Se que es una situación difícil, ¿pero en verdad quieres seguir viviendo? ¿incluso aunque no puedas continuar viviendo como humano? Sin embargo...la vida no humana es muy difícil y dolorosa, no se la deseo a nadie, aún asi... ¿estás seguro?" -retumbaban esa pregunta una vez más en su cabeza.