Capítulo 91

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07 de Marzo del 2018

Dicen que como médico cada día estas estudiando, nunca terminas de hacerlo y precisamente _____, lo estaba comprobando, leía atentamente los reportes médicos de Isabella, al igual que todos los estudios recientes que le habían realizado, quería hacer hasta lo imposible para que aquella hermosa y alegre chica, volviera a ser ella; a todo en aquella casa les dolía ver como poco a poco se marchitaba al estar atada a esa silla.

-Buenas noches princesa-le dijo su eterno enamorado al verla en el despacho

-Jay, amor, te extrañé tanto-se levantó de su lugar para después besarse dulcemente-¿Me extrañaste?

-Con locura-comenzó a besarla apasionadamente-Te extrañé, a tu cuerpo, tus besos-comenzó a besar su cuello lentamente

-Jay por favor-habló en un susurro-Necesito acabar de estudiar ese caso

-Déjalo, puede esperar-siguió besandola-Solo seremos tú y yo...

-Es de Isabella

-¿Qué pasó con mi hermanita?

-Ella está bien-fue a sentarse en el escritorio-Solo que me asusta pensar que no lograremos nada, es muy difícil y en todo este tiempo su columna y vértebras no han desinflamado

-Tranquila, yo confío en ti y sé que lo lograrás

Jacob se acercó a ella y la beso lentamente, al separarse la envolvió entre sus brazos y simplemente se dedicaron a disfrutar su compañía; paralelamente el australiano veía con amor a la chica que dormía su lado, la vida le había hecho dar tantas vueltas por el mundo, intentando encontrar el amor para hacerle ver al final de cuentas que el verdadero amor de su vida, estuvo siempre a su lado, ¿Se enamoraría sabiendo todo lo que conlleva hacerlo? Nadie en esta vida nos advierte que el enamorarse duele pero también te da alegrías, más sumas que restas, pero cuando llega el momento de restar es lo más doloroso que cualquier persona.

La vida de Luke había sido muy marcada por la cantidad de restas que a tenido que vivir, llegó a pensar que simplemente había nacido con mala estrella, pero cuando hizo que su suerte comenzará a cambiar fue sorprendente, porque la vida le estaba entregando aquello que había añorado desde pequeño; actualmente no podía pedir más, tenía su novia y una hermosa hija, por la que daría su propia vida, pero a pesar de eso, su corazón seguía lastimado, una pequeña parte no había superado a la que fue su verdadero amor.

Eso no quería decir que no amaba a Isabella, claro que la amaba y con locura, pero aquellos sueños que había realizado con Stephany, eran tan difíciles de olvidar y hacer de cuenta que nunca existieron, pero sabía que teniendo a su lado a la pequeña Elorid, nuevos sueños se formarían y poco a poco irían tras de ellos.

-Buenas noches Luke

-Buenos noches princesa, hasta que despiertas

-Perdón me sentí cansada y no supe en que momento me quede dormida

-No te preocupes guapa-la beso lentamente-Te ves preciosa-acarició su enmarañado cabello

-Quisiera tanto poder moverme y abrazarte-los ojos de ella se cristalizaron-Extraño tanto moverme, el sentir mis piernas y tus caricias sobre ellas-una lágrima escurrió por su mejilla

-Tranquila princesa-limpió la lágrima-Te prometo que pronto vamos a solucionar esto, Chris y _____ están estudiando tu caso junto con otros especialistas, estamos haciendo todo lo posible para que recuperes tu vida

-Si yo no recupero mi movilidad, quiero  buscar una forma de morir-habló sin mirarle a los ojos

-¡¿Qué?! ¡¿Qué locura estás diciendo?!-su corazón se rompió al escuchar eso

Por favor, olvídame   (Jacob Elordi y _____)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora