—¡Estoy tan cansado! —se queja el pequeño Omega sentándose sobre la tierra.
Joel le extiende un vaso de limonada que recibe gustoso y casi se la acaba de un sorbo.
—Descansa un poco —sugiere el rizado —yo terminaré esto.
—Gracias, Joey —pronuncia con una sonrisa y rubor en sus mejillas —Eres tan comprensivo. Un grandioso Alfa.
—No me adules tanto que aún tienes que limpiar la casa mientras voy al pueblo.
—Limpiare muy bien, así que ¿podrías comprar dulces?
—Entonces me adulabas por eso —dice el Alfa entre cerrando los ojos —Eres un interesado.
—No es así —reniega cruzando sus brazos y formando un puchero.
—Y también eres como un cachorro.
Abre la boca ofendido —¡Claro que no!
Joel ríe y camina hasta donde está Erick para darle un corto beso en la mejilla —Iré a comprar semillas, volveré pronto —le dice en forma de despedida y se va sin esperar alguna reacción del ojiverde.
Erick sin embargo siente un montón de mariposas enloquecer en su interior.
El camino es largo y silencioso, ideal para ponerse a pensar en la razón por la que le dió ese beso a Erick.
—Estoy dejándome llevar por mis impulsos —se lamenta —¿Debería poner una distancia entre nosotros?
Suspira cansado al no encontrar una respuesta en cuanto llega al pueblo.
El lugar está sorprendentemente vacío, solo algunas personas deambulan por los escasos puestos del mercado.
—¿Podría venderme semillas? —le pide a la señora que parece un poco asustada al mirarlo.
Ella asiente y alista rápidamente las semillas que el Alfa le indica y cuando Joel está por irse ella habla —Vete corriendo a tu casa.
El rizado no entiende a lo que se refiere y la mira un poco desconfiado —¿Disculpe?
—Es mejor que te vayas rápido —explica agitada —los soldados del reino saldrán a las seis de la tarde hacia el reino del norte. El rey declaró que cualquiera que esté por las calles después de esa hora será aniquilado.
—¿Qué está pasando?
—Hubo una gran pelea entre los dos reinos porque los príncipes no lograron comprometerse. Ahora en vez de la unión que teníamos que celebrar, intentarán desatar una guerra.
Joel se despide rápido de la señora agradeciéndole la información.
Toma su forma de lobo y corre hasta su cabaña.
El nombre de Erick es lo único que repite en su cabeza.
"Erick no quiso casarse con su Alfa."
Abre la puerta de la cabaña torpemente y busca al Omega hasta llegar al patio de atrás.
Erick está ahí sosteniendo una rosa violeta.
—Mira, Joey —dice en cuanto lo mira con una sonrisa —significa, "cree en mí".
Este capítulo está dedicado a lanathtupatrona Gracias por el apoyo y por participar en la dinámica.
Recuerden que todo es ficción así que aquí existen rosas de todos los colores del arcoiris. xD
Las actualizaciones van lentas, lo siento.
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El día después de mañana >Joerick<
Fanfiction-Te prometo que mañana volveré. Y estaremos juntos el día después de mañana y el siguiente día y el día después de ese y todos los días de nuestra vida. No se permiten copias, adaptaciones ni homofobicos.
