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El camino al aeropuerto me recordó a cuando íbamos a Miami. Cuando las cosas con Gus estaban bien. Me recordó a cuando Gus y yo éramos casi hermanos. Era un viaje de amigos, porque éramos los mejores amigos. Pero también fue un viaje a la destrucción de nuestra amistad. Y lo peor es que no se había disculpado. Llegamos una hora antes de lo que salía el vuelo. Lo bueno de todo esto es que el boleto de avión lo pagaba la escuela. Y no necesitábamos hospedaje o pagar un hotel porque era un campamento, y ahí mismo dormíamos.

-¿Cómo se sienten chicos? –dijo mi padre

-Normal –dijo Nacho –El año pasado ya fu. Creo que no me emociona mucho.

-¿Y tu Pau? –dijo Meghan

-Me siento un poco nerviosa. Pero sé que estaré bien. Estará Nacho para cuidarme

-No soy niñero –dijo sonriendo

-La debes de cuidar, es tu hermana menor –dijo Meghan

-Diecisiete años y es pequeña.

-Muy pequeña –sonreí

Llegamos al aeropuerto y tuvimos una corta pero emotiva despedida con nuestros padres. Meghan lloro, y mi papá también. Nunca había visto llorar a mi padre, era... raro. Después de despedirnos rápidamente Nacho y yo pasamos por las bandas y el detector de metales. Y cuando pasamos al otro lado, donde estaban las salas de abordaje, vi a Gus. Estaba sentado cabizbajo.

-Creo que deberías hablar con él –dijo Nacho

-¿De verdad crees que lo tenga que hacer? Yo no fui la que lo arruino. –dije un poco molesta

-Los hombres solemos ser muy estúpidos –me sonrió –Ve y habla con él.

Lo pensé por un momento y después asentí.

Camine hasta llegar a su lado. Se miraba aburrido, sin nada que hacer, quizá un poco cansado y deprimido, se miraba mal. Y aunque tal vez no estuviera así por lo de nuestra relación, me incomodaba verlo así. Cuando tono mi presencia miro hacia arriba. Y yo tome aire

-Hola Gus –dije en un susurro -¿Podemos hablar?

-Hola –dijo –Si.

-Bueno, ya sabes que hablo mucho. Y quiero que me escuches sin interrumpirme, puede que diga un montón de babosadas pero lo más importante es que te quiero –dije y el asintió –Yo me enoje porque sentía que no pasábamos mucho tiempo juntos, como antes. Me puse celosa, lo admito, pero es que te veías muy feliz con ella, y me dijiste cosas de ella que jamás habías dicho de mí. Nunca estuviste conmigo, más que el primer día. Tal vez fui un poco dramática con lo de "para mi estas muerto". Pero considero que aun así me debes una disculpa.

-Tú también me debes una disculpa –dijo mirándome

-Dámela tu primero, por favor

-¿Cuando vas a madurar? Eso es lo que me molesta de ti. Siempre te portas como una niña que hace berrinches y quiere que todo se haga como ella dice. Debes madurar Gatti. Odio a las personas infantiles.

-Solo te diré una cosa. La personas que conservan un poco de su infancia son las que más triunfan. Y personas cómo tú, siempre serán viejitos cascarrabias. Por cierto, estamos peor que antes. Te volveré a hablar hasta que te disculpes.

Y después me fui hacia donde estaba Nacho. No hable, y el no pregunto. Unos minutos después Nacho diviso a Alicia y fue con ella. Y ahí estaba yo, parada en la sala del aeropuerto donde llegaría el avión. Sola y con muchos pensamientos negativos hacia Gus. Sentí unas manos en mi cintura y después escuche un "Hola linda" en mi oído. Voltee y vi a mi guapo novio sonriéndome.

-Hola –le dije –Acabas de llegar

-Si. Técnicamente. Llegue hace como una hora pero me perdí, es muy grande el aeropuerto –comencé a reír – ¿De qué te ríes? Eres una grosera.

-¡Miren! –Dijo alguien a un lado de nosotros –Pero si son la pareja del año, la pareja mas dispareja del mundo –voltee y vi que era Cintia – ¿Cómo es posible que la dulce, tierna, tímida, fea y novata de Paula, este con el guapo, rudo, ermitaño, serio, popular y cruel de Ruel?

-Ya cállate –le dijo Ruel –Que yo no haya querido estar con una lagartija como tú, no significa que tengas que insultar a mi novia. Y créeme, el noventa y nueve por ciento de los chicos de la escuela prefieren estar con Paula que contigo.
Cintia se quedo callada, y Ruel y yo nos fuimos hacia otro lugar.

El vuelo llego y todos subimos al avión. A mí me toco con un chico llamado Jake, pero Ruel le cambio el lugar.

-¿Estas emocionada por ir?

-Si –dije sonriendo –Y nerviosa

-No tienes por qué estarlo –sonrió

-Cuéntame como es allá.

-La educación es igual que en la escuela Tienes dormitorios.

-¿Individuales?

-No, gastarían una fortuna en poner cuartos para cada uno, los cuartos son grandes, aunque no mucho, y son para seis personas. Hay tres literas, y un solo baño, hay muebles para guardar ropa y un escritorio, o a veces hay dos. Ahí te dan comida, casi siempre es buena la comida, pero a veces no. Te acostumbraras querida.

Asentí. Me dio sueño y me recargue en el hombro de Ruel. Y rápidamente quede dormida. No recuerdo que soñé, casi nunca recuerdo mis sueños. Lo que sí recuerdo es que fue muy corta mi siesta. Comencé a escuchar un murmullo, que decía mi nombre, y un leve movimiento. Cada vez la voz esa escuchaba más cerca, con as nitidez y más fuerza, hasta que me levante.

-Ya llegamos Paula– dijo Ruel. –Te daré un tour por el lugar.

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Siento que este capitulo me quedo re feo.

Les comento que tengo otra novela que también estoy escribiendo y se llama "señales de tiempo" que es de ruel por si quieren ir a leerla, darle apoyo y amor como a esta ♥

muchas gracias. 

Nos vemos el viernes amores ♥ 

-𝖊 𝖓 𝖆 𝖒 𝖔 𝖗 𝖆 𝖒 𝖊- [Ruel] 2da T.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora