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-Por lo mismo –dijo y a continuación uso mi argumento en mi misma contra –Por tanto disfruta el momento. Además, eres joven ¿no? Vive mientras eres joven. ¡Nunca lo volverás a ser querida! Ni en tus más locos sueños. Nunca en miles de años. Disfrutarlo y arriésgalo, no serás joven por siempre. Y a veces te sentirás destrozada. ¿Pero sabes algo? De eso se trata la vida. No tiene caso vivirla si no te arriesgas. Por lo más mínimo que sea. No te aferres a la seguridad. No es necesario. Prometí mantenerte a salvo esta noche. Y aquí estas. A unos pasos de llegar con tu novio.

-¿De dónde sacaste eso? –dije anonadada. Tucker no era, o más bien, no parecía de los chicos con sentimientos, con arte filosófico. No parecía de aquellos que se expresan bien. –Tu... ¿Son palabras tuyas?

-Cuando estoy contigo me inspiro –dijo sonriendo

-¿Pero... porque te gusto? –dije confundida

-¿Quieres que te confiese todo? –se sonrojo un poco. Yo asentí. –Eres hermosa...

-¿Qué me hace bella? Por lo menos para tus ojos –dije interrumpiéndolo.

-¿Qué te hace bella? –Dijo en tono burlón –Todo, además tú tienes esa cosa que a mi me atrae

- ¿Esa cosa?... ¿Cómo es que crees que soy hermosa? Yo me miro en el espejo y no puedo, simplemente, no me gusta lo que veo.

-Esas pequeñas cosas que tienes, esa imperfecciones... Te haces ser tú. Vas a ser tú, con tus virtudes y defectos

-¿Me hacen perfecta mis imperfecciones?

-No, más que eso... Eres... Simplemente... No puedo dejar de mirarte.

-Tengo novio. ¿Sabías?

-Todos los días me lo recuerdo –dijo tapándose los ojos –Aunque me duele... lo recuerdo, porque no debo amarte. Pero no puedo evitarlo. No te diré que... Créeme que intento olvidarte, hacerme entender que no eres mía, y que nunca lo serás. Pero desde la primera vez que te conocí me atrajiste. Amo tu forma de ser... Te amo a ti.

A pesar de que esas cosas la dicen muchos hombres, vi en su mirada sinceridad. Y no tuve tiempo de razonar, porque cuando menos lo esperaba, mis labios ya estaban pegados con los suyos. No sé cómo, ni cuando, pero sé que yo fui la que me acerque a él. Sus labios eran suaves. Y a razón, tenía que arriesgarme. ¿Qué pasaría si en realidad el es mi amor? Tal vez tenía que conocer primero a Ruel para encontrar al verdadero amor de mi vida.

Sentí una punzada en el pecho. No. Eso no podía ser. Él, Ruel, fue, es y será el amor de mi vida siempre. Estar cerca de Tucker me debilitaba. No podía seguir. Me separe bruscamente, pero más lento de lo que me hubiera gustado. Lo mire, y él me miraba sonriendo a los ojos.

-Gracias –dijo y sin previo aviso me abrazo.

Después escuchamos algo, como que una rama se quebró. Voltee y Tucker me puso detrás suyo, con además sobreprotector.

-No te muevas –dijo en un susurro. Mientras miraba alerta entre los árboles que nos rodeaban. Me di cuenta de que grande era a escuela, hasta ese momento, me di cuenta, irónico

De repente salió de los arboles Ruel, despreocupadamente, como si no se hubiera dado cuenta que nosotros estábamos ahí, cuando subió la mirada y miro a Tucker y frunció el seño

-Y Paula... -dijo y después sonrió al notar mi presencia –Ya la vi –me sonrió dulcemente – ¿Que paso? –volvió a fruncir el seño.

-Pensamos que eras algo o una persona –dije saliendo detrás de Tucker, él tenía mi mano agarrada, pero yo la solté

-¿Un animal? –Sonrió –Ya veo. Iba a buscarte

-¿Hace cuanto estas por aquí? –pregunto Tucker entre cerrando los ojos. Se veía nervioso y desesperado, solo un poco

-No mucho. ¿Por qué?

-Solo preguntaba.

Y entonces reflexione y procese todo. Ya sabía porque Tuck se había puesto así. ¡EL BESO!

-Creo que ya me voy –dije sin mirar a Tucker –Adiós
Y corrí a los brazos de mi novio. Lo abrace, y escuche las pisadas de Tucker cuando se marchaba, no me gustaba hacerle eso. Me caía bien, y creo que me gustaba, pero Ruel era mi novio, y con el debo estar.

Camine de la mano con Ruel, hasta llegar al lugar preciso donde Carter nos había citado. Ahí estaba Nacho y Alicia. Carter y Samantha y después nos sentamos Ruel y yo uno al lado de otro.

-Perdón por llegar tarde –dije mirando a Carter
-No te preocupes –sonrió. –Yo también llegue tarde. Cuando llegue solo estaban Samantha y Ruel. Supongo que yo era el que tenía que llegar primero, pero ni modo.

Asentí sonriendo y comenzamos a platicar

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aaaaaaaaa ni yo me lo creo ah 

-𝖊 𝖓 𝖆 𝖒 𝖔 𝖗 𝖆 𝖒 𝖊- [Ruel] 2da T.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora