CAP#2
En la cafetería con una muchedumbre tratando de tomar un bocado de la famosa sopa de la señora Lee; mucha cebolla, demasiado grasoso y el olor del ajo es penetrante, residuos de la piel de cerdo baila sobre la sopa y los fideos son pastosos y demasiado blandos. Son estudiantes jóvenes, no ancianos de un acilo, la señora Lee no comprende y continúa sirviendo la extraña sopa. Los estudiantes prefieren traer sus propios almuerzos o pagar para tener una comida más humana.
Fuera de ese inconforme retrato alimenticio, alguien mas tiene sus propios problemas, más concentrado en buscar suficiente valor que tratar de averiguar cómo es que la señora Lee lograba darle vida a la comida.
_Tu puedes, tu puedes…_ se anima así mismo, respirando profundamente.
Sus manos sudan, tanto como para empezar a ser asqueroso, sus mejillas y orejas calientes le dicen que está más rojo que un tomate y dentro su pecho, su corazón palpita tan rápido que está a punto de salirse de su pecho. Estruja sus dedos, sintiéndolos mojados y pegajosos, no tienen más remedio que limpiarlas sobre su hermoso y brillante suéter amarillo. Esta nervioso, malditamente nervioso, tanto que podría desmayarse en cualquier segundo o vomitar sobre el bonito y brillante piso de la cafetería.
Mira por sobre su hombro hacia la mesa del club de canto, donde sus amigos le muestran el dedo pulgar, animándolo a seguir avanzando. Agradece el apoyo de sus amigos, pero agradecería mas que le pasaran un pañuelo o un ventilador por que se sentía tan caliente como en un horno.
_Allá vamos! _ susurra con convicción, dispuesto a caminar a zancadas y por fin, después de minutos parado en la misma posición, acercarse. Sin embargo, el pacito de dos centímetros no lo llevaría muy lejos.
Sus amigos se golpean la frente frustrados y JiMin se lamenta en silencio mirando por debajo sus pestañas la mesa ocupada por Jeon JungKook y sus amigos.
Tras el primer, segundo y tercer periodo, JiMin estaba desesperado buscando al chico que había robado su corazón desde el primer año, su enamoramiento siguió hasta el segundo año y ahora, durante el tercer año, su corazón no puede resistir más, necesitando hacerle saber de sus sentimientos a Jeon JungKook.
Sin embargo, por muy fuertes que sean sus sentimientos por el chico pelinegro, no es capaz de acercarse y pedirle una cita. Si, una cita o una salida de conocidos, cualquier cosa para crear un ambiente adecuado y declarar sus sentimientos, aun si su temor al rechazo es mayor, está dispuesto a correr el riesgo.
BaekHyun le dijo que funcionaria para empezar a dejar en claro sus intenciones, para hacerse notar y ser tomado en cuenta para una relación romántica. JiMin muerto de vergüenza, acepto el concejo de su amigo, pero nadie le dijo que sería tan difícil acercarse a su amor platónico ¡Sus piernas temblaban como gelatina!
JiMin respira profundamente, dándose fuerza y el valor suficiente y entonces lo hace, camina decidido a JungKook quien está de espaldas y ninguno de sus amigos lo nota. Solo un par de metros más, muy cerca, casi siente que puede tocarlo, oler su perfume y escuchar su risa ronca pero suave.
Abre la boca, dispuesto a pronunciar el nombre de su crush como tantas veces lo hiso en su habitación, fingiendo que el reflejo del espejo del baño era JungKook y no su mismo reflejo. La primera silaba le cosquillea la boca, su corazón palpita con fuerza y el sudor en sus manos se sienten como ríos o cascadas.
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It Isn't A Love Triangle
HumorTras enamorarse a primera vista, Park JiMin persigue activamente a su amor, Jeon JungKook, sin saber que sus sentimientos son mutuamente correspondidos, pero tras rebeces y mal entendidos, aun ignoran ser el amor platónico del otro. Por otro lado...