K̷o̷i̷ N̷o̷ Y̷o̷k̷a̷n̷ 💜̷K̷a̷r̷m̷a̷ Y̷ T̷u̷💜̷

🌺C̷a̷p̷i̷t̷u̷l̷o̷ 9̷🌺

Pasó ya un tiempo y no me atrevía ir a la escuela, Asano mandaba mensajes atraves de mis amigos, estaba cansada de ello así que les pedí que le dijeran de mi parte que lo invitava cordialmente ir a la mierda. Aún tenía tiempo, una parte estaba cumplida solo me faltaba la segunda: "Descubrir el maldito secreto", que según el zanahoria, la clase final esconde.

Con Karma no volví a hablar aunque ayer me mando un mensaje preguntando porqué no iba, no le contesté, no tenía ganas de hacerlo, eso de haberle mentido para que me ayudara me carcome por dentro. Quiero ir a gritarle la verdad y que lo sentía mucho pero no quiero que se enfade otra vez, ya ni siquiera me importaba el tono frío y distante que había usado la noche que ceno en casa, imaginaba que quizás ya sabe que le miento pero no sabe la verdad y le molesto que no se lo dijera.

¿Qué debo hacer?

Cubri mi rostro con mis manos sintiendo arder mis ojos, quiero llorar. Necesitaba hacerlo. Tengo que descargarme de alguna manera y solo puedo llorar en silencio. De tanto llorar me quedé dormida en el rincón de mi habitación en el que me encontraba tratando de pensar.

Despierto en la madrugada y estoy en mi cama, a lo cual no le tomé mucha importancia, sabía que quizás fue mi hermano, nadie más podría haberse molestado, eso sin mencionar que solo vivímos nosotros solos aquí. No hay manera de que haya sido alguien más. Me levanto poniéndome mis pantuflas de dinosaurio para bajar a la cocina ya que tengo hambre.

Suspiro al ver el saco de mi hermano tirado en el sofá, lo tomo para colgarlo como corresponde así no se arrugaria, debió regresar muy cansado y dudo que haya comido algo, si estaba cansado no debió haber tenido ganas ni de cocinar y yo estaba dormida.. Me arrepiento de no haber puesto una alarma por si eso sucedía, no me gusta el hecho de que no coma, necesitaba hacerlo, no es un capricho, solo no quería que se enfermara y perderlo. Mañana me despertare temprano y le haré un buen desayuno, también le prepararé algo de almuerzo para que coma en el trabajo.

Al terminar de cocinar, me serví y fui a la sala, prendí el televisor y busqué una película para ver mientras comía, había bajado mi celular así que lo encendí y vi que tenía mensajes, los abrí:

1er Mensaje

"Lamento mucho haberle dado tú número a Asano, estaba de molesto, me enfadé y le di tú número.. pero mira el lado positivo, podrás mandarlo a la mierda tú misma."

Ume-chan.

"No te preocupes, hiciste bien, no eres mensajera de nadie, Ume-chan.. Besos ^3^"

2do Mensaje

"Más te vale cumplir el reto, ¿sabes? Quizás te gustaría que cambie el reto.
Tienes 2 opciones:
1) Descubre que oculta la clase 3E.
2) Finje que te gusta Akabane y cuando a él le gustes dile que solo fue un reto."

Número Desconocido.

Este debe ser el número del imbecil de Asano, ojalá se ahogara con su saliva mientras duerme.
No me moleste en responder, era obvia mi respuesta, lastimarlo no está en mis planes, aunque Karma no es tan tonto, jamás se enamoraría de mí.

3er Mensaje

"Bien.. No respondas si no quieres, fue tonto pensar que seríamos amigos otra vez, solo quieres cumplir el absurdo reto. Gracias por dejarlo bien en claro."

Karma.

Leer su mensaje me quitó el apetito, no quería que pensara eso, soy su amiga.. Una muy mala eso es verdad.
Deje mi plato a un lado dejando escapar algunas lágrimas que caían sobre la pantalla del móvil, donde aún permanecía el mensaje abierto de Karma. Mire arriba del televisor y vi el cuadro donde estábamos nosotros y nuestra familia, aún éramos muy pequeños en ese entonces, recuerdo que la foto fue tomada un par de meses antes que ocurriera el accidente.

La familia Akabane fue un buen soporte para nosotros, se hicieron cargo de ambos hasta que Takeshi cumplió la mayoría de edad y les dijo que él se encargaría de mí. Soy una masoquista, me duele lo de Karma y lo de mis papás pero igual pienso en ambas cosas.

Narra Karma

Miraba atento mi celular esperando una respuesta de parte de ____(tn) pero nada.

¿Por qué no me sorprende?

Sí, soy un idiota por creer que seríamos amigos como antes, era un idiota por haber aceptado ayudarla pero más idiota era por permitirme tener esa sensación tan extraña que según tenía entendido era porque me gustaba estar con ella.

Me levanté de la cama y salí, caminé a su casa y toqué un par de veces el timbre. Nadie atendía, bueno aún no estaba el auto de su hermano así que él no estaba pero ¿y ella dónde estaba? Espere un rato más antes de tocar nuevamente pero nada, tuve el mismo resultado que antes. Fui hacia donde daba la ventana de la habitación de _____(tn), la luz estaba apagada, trepe como pude y entré sonriendo un poco. Aún dormía con la ventana abierta para que entrara luz.

Mire hacia la cama y me extrañe al no verla, mire alrededor encontrandola en un rincón dormida, la cargue acostándose en su cama y le quite los zapatos. La mire durante unos segundos y pude notar que había estado llorando, ¿por qué? ¿Asano le habrá hecho algo?. Acaricie su mejilla y quite algunos mechones de su pelo de su rostro.

-Tanto tiempo y aún me haces sentir así, ¿cómo es eso posible?- Susurre para mi mismo viéndola con una tonta sonrisa.-Cumplire con lo que quieres, por mí más que por tí.. Me alejare.-

Volteo para salir e ir a mi casa, estaba cansado, el entrenamiento de Karasuma sensei fue algo agotador y no podía dormir, no sin antes verla. Necesitaba saber al menos si estaba bien. Me cambié por mi pijama y me acosté, miré el techo pensando en mi decisión, no sé por cuánto tiempo hasta que por fin me quede profundamente dormido abrazando mi almohada.