Tanabata ( Kyotan AU)

Capítulo 1 :Tanabata parte 1

Era el séptimo día del séptimo mes, el festival del Tanabata estaba en su apogeo, las luces del atardecer iluminaban con dulzura a todos los que paseaban a los alrededores del templo, lleno de puestos de comida y juegos, la gente se reía y disfrutaba, pero no eran los únicos que me rodeaban el lugar, al caer la noche pequeños e inofensivos espíritus hacían su aparición para hacer travesuras a los despistados. Entre ellos se encontraba un espíritu zorro, Kyojuro, que como todos los años se pasearía con los humanos para disfrutar de la festividad.

-Oni-san, ¿Puedo ir este año contigo?-Preguntaba el pequeño hermano del Kitsune mayor.

-Senjuro, aún no estás listo para ir al mundo de los humanos... Recuerda que ellos son peligrosos... Pero si te portas bien con Padre pensaré en llevarte conmigo a ver el tanabata el año que viene - comentaba el espíritu zorro mayor con dulzura, haciendo cariños en la cabeza de su pequeño hermano antes de darle la espalda y marcharse al mundo humano.

-Aun eres un cachorro, Senjuro - dijo serio su padre, justo después de la despedida.

Kyojuro como cada año se maravilló con el lugar, iluminado y adornado con delgados papeles de colores, el olor de la comida era maravilloso, todo el mundo vestía de forma tradicional, cosa que lo hacía pasar desapercibido por su vestimenta. Pero no podía pasearse con su forma adulta por todos lados, ya de por sí sus orejas llamaban la atención, peor aún la cantidad de colas pomposas que tenía, sacó de su traje una hoja, los espíritus zorro eran bien conocidos por ser engañosos y estar llenos de trucos, la puso con cuidado sobre su cabeza y su cuerpo se transformó en un pequeño chico zorro de no más de 10 años, sería más seguro para él tener esa apariencia ya que la gente solía vestirse de esa forma.

-¡Compren mis dulces, damas y caballeros!- la gente de los puestos promocionaba sus productos con esmero, atrayendo cada vez a más gente al lugar

El olor de las comidas típicas lo traía vuelto loco, era lo que más amaba de los festivales humanos,probar de todo. Ya con su apariencia más amigable no tardó en mezclarse con la gente, nadie notaba raro a un pequeño que "vestía" de espíritu zorro, así que se dispuso para ir tras un puesto de dangos primero, no hacía falta pensar en dinero ya que sus hojas pasaban desapercibidas por sus habilidades ilusorias.

-Hola pequeño, ¿quieres unos dangos?-le saludo un vendedor de dulces tradicionales japoneses.

-Si por favor - dijo sin sonreír demasiado, puesto que sus colmillo seguían ahí, y levantar sospechas era lo peor que podría hacer, pagó con una hoja, que a los ojos del vendedor era el dinero justo, y se marchó contento, disfrutando aquel dulce.

-¡Sabroso! - exclamó devorando el dango de color blanco.

Comía sin mirar el camino, su concentración estaba metida en esos dangos de colores y el de té verde era su favorito, por ende lo estaba guardando para el final para poder disfrutarlo mejor. Por ende no notó que un joven pelirrojo caminaba despistado al igual que él, haciendo que el choque fuera inminente,y como consecuencia que los dulces llegaran al suelo.

-Auch, perdón -

-Mis dangos... - miraba el suelo, donde estaban sus amados dangos de té verde con una cara melancólica, sin siquiera fijarse con quien había chocado.

-Lo siento de nuevo, te compraré otros - "si me quedara dinero" 

Su mirada se iluminó un poco, al pensar en una nueva porción de dangos, dirigiendo al fin su mirada a quién le había chocado, sonriendole un poco.

Tanjirou empezó a caminar con el chico zorro siguiéndole por detrás comenzando a ponerse algo nervioso "¿que voy a hacer? No me queda dinero".